La Liga de los Guerreros

Capitulo 7 El Samurai Jack

El mundo real, estaba, una vez más lleno de guerra, muerte y destrucción, y dominado por Gan, o como prefería que lo llamaran: el Señor del Terror, pero al Señor del Terror, aun le preocupaba algo, el se había quedado con el Libro para ver si había alguna forma de ser derrotado, ya que el Libro de la Profecía, les daba indicaciones a los guerreros que se disponían a defender la paz del universo y devolver la libertad a los seres que no la  tenían.
  En el Libro aun se seguían escribiendo algunas líneas: un samurái acabará con él reinado del señor del terror y devolverá la paz al mundo una vez más.
  Gan sabía que los humanos eran los únicos que manejaban el arte samurái, entonces comenzó a atacar las pocas aldeas humanas que quedaban, buscando aquel samurái que acabaría con su reinado, para acabar antes con él.
Por semana, cinco aldeas eran destruidas, no solo por el Señor del Terror, el enviaba bestias y demoños, para acabar más rápido  con su preocupación.
  En una aldea bastante aislada de todo, en las tierras del sur, vivía un samurái, vivía Yack,  en esa aldea era la ley del más, para su suerte, él era el  más fuerte, pero usaba su fuerza, para ayudar a la gente de su aldea, defendiéndolos de los demoños mandados por el Señor del Terror; pero cada vez los ataque se hacían más y más frecuentes, y llegó un día en que Yack murió, pero no desapareció por completo, dejó un hijo sin nombre, y sin padres, ni tíos, ni abuelos, ni primos, la gente de la aldea lo crió, y cuando llegó a la edad de siete años demostró gran talento en muchos deportes, luego a los trece, comenzó en las practicas de samurái, y a los dieciocho, ya había superado la fuerza de su padre a los treinta; los que conocían a su padre lo empezaron a llamar Yack, era idéntico a él, solo que mucho más fuerte; resistía sin problemas, los ataques de bestias y demoños, pero igual que a su padre, los ataque iban en aumento, y cada vez eran más y más fuertes, asique decidió ir a terminar con esto de una vez por todas, y fue a atacar al Señor del Terror; luego de salir de la aldea, hiso cincuenta k/m y se topó con una aldea totalmente destruida, sacó a la poca gente que quedaba viva, y luego siguió su camino, pero  antes de poder dejar la aldea, una voz lo detuvo, una voz tras su espalda:

  Voz_ ¡Hey  pibe!, si a vos te hablo.
  Yack_ (Se da vuelta, pero no ve nada) ¿Quién? (Se vuelve a dar vuelta, y frente a él estaba Gan, a un paso de distancia) ¡mierda!
  Gan_ ¿Por casualidad te llamas Yack, o lo conoces?
  Yack_ ¿Por qué?
  Gan_ ¡Yo hago las pregunta acá!
  Yack_ Soy yo.
  Gan_ ¿Y sos un samurái?
  Yack_ ¿Quién sos vos?
  Gan_ Perdón, que irrespetuoso, déjame presentarme, soy Gan, pero me dicen el Señor del Terror.
  Yack_ ¡¡Rallos!!

  Gan lo golpea con una patada y lo devuelva a su aldea, luego, de un salto, cae allí;  Yack se levanta, y pelean.  Gan era un poco más fuerte, y luego de dos horas, lo dejó agonizando, pero se había cansado; la gente de la aldea se reunió, y mataron a Gan, pero como él había matado al Fénix, esto le entregó su vida, reviviéndolo, pero luego en la aldea llegaron más personas, las personas de aquella aldea destruida, que Yack había salvado, juntaron más guerreros, para ayudar a su salvador a pelear y terminar con el reinado del Señor del Terror. Gan escapo, apenas con vida, y calló en un rio, sin fuerzas, la corriente se lo llevó.
  Yack dejó la aldea y no se supo más de él; Gan despertó en una playa, sin recordar nada, solo su nombre, que lo tenía tatuado en un brazo. Todos pensaron que ambos habían muerto. El Libro volvió a perderse, y el mundo, quedó aterrorizado, bajo el ejercito de bestias y demoños que obedecían a Gan; la raza humana estaba a punto de extinguirse, ya no habían más esperanzas, hasta que…