Me dirigí nuevamente al castillo, pero antes pase por un par de batidos de fruta, de fresas para Mal y de mora azul para mi, no había sabido nada de ella en todo el día, pero seguro que no se resistiría a un batido de fresa. Durante todo el camino estuve pensando en lo que le diría a Mal, después de todo era un tema delicado, ya había tomado una decisión, le pediría un tiempo.
Al llegar a casa entre tratando de controlar mis nervios, estaba segura que M estaría en la habitación así que me dirigí hacia allá, al entrar pude verla cerca de la ventana pintando algo en un lienzo bastante grande, se veía tan hermosa, con el ceño fruncido y mordiéndose el labio inferior, supongo que trataba de hacer muy bien su pintura.
M: Hey, llegaste- Cubrió rápidamente su pintura con una manta, se acercó a mí y me dio un pequeño beso en los labios
E: Si, llegué- Sonreí de lado- ¿Qué estabas pintando?- Pregunté curiosa al notar la manera tan apresurada en la que había cubierto el lienzo
M: Oh pff nada, ya sabes, cosas que salen de mi imaginación- río nerviosa, no le creí nada- ¿De qué quieres hablar?- tomó mis manos
E: De nosotras- Me solté de su agarre y camine unos pasos lejos de ella tratando de tomar un poco de valor, recordé que traía los batidos- Te traje esto- Le extendí el batido para que lo tomara y así lo hizo
M: ¿Qué sucede bonita?- Preguntó para después beber un poco de la sustancia sabor fresa
E: Necesito que nos demos un tiempo- Dije finalmente
M: ¿Qué? ¿De qué estás hablando Evs?- Me miró claramente desconcertada
E: Hablo de nuestra relación, necesito un tiempo para pensar las cosas- Dije sin mirarla
M: ¿Pensar que?- Alzó la voz y pude notar una pizca de dolor en ella
E: ¿Pensar que?- Me reí sarcásticamente- Mal, haz estado haciéndome a un lado, no tienes tiempo para mi, necesito "agendar una cita" para poder hablar contigo, no te interesas en mi asuntos o en las cosas que son importantes para mi, ya ni siquiera respondes mis te amo- Dije a la defensiva
M: Claro que me intereso en las cosas que son importantes para ti- Volvió a alzar la voz
E: ¿Ah si?- Pregunté con sarcasmo
M: Por supuesto que si- Dijo seria
E: Sabes que viene el desfile de modas más importante de mi carrera y ni siquiera me haz preguntado como va todo o si me siento nerviosa- Ella sólo permanecía en silencio- Me he sentido más apoyada por el resto de los chicos que por ti- Ya mis lágrimas amenazaban con salir- A puesto a que ni siquiera recuerdas cuando es- Dije con dolor
M: Claro que si, es- Se quedó callada- Es ¿en tres días?- Eso fue suficiente para que mi enojo llegara a su máximo nivel
E: ¡No puede ser!- Exclame enojada, sin poder creer lo que acababa de escuchar, me dirigí al armario, tomé una maleta y comencé a meter un poco de ropa en ella
M: ¡Hey no!, ¿Que estás haciendo?- Preguntó con evidente sorpresa y preocupación
E: No es obvio Igna, estoy empacando- Suspiré
M: No puedes irte, ¿A donde irás?- Volvió a preguntar mientras trataba de desempacar mi ropa, pero yo se lo impedía
E: A un lugar donde pueda estar tranquila- Sentía como algunas lágrimas de tristeza y decepción descendían por mis mejillas
M: No puedes dejarme así E- Me giré a verla y fue cuando pude notar que ella también lloraba
E: Lo siento, Te amo- Fue lo último que dije antes de salir de ahí
