-Oh, vamos Natsu... ¿No quieres pasártelo bien conmigo? Ya sabes, como siempre solemos hacer...
-Tsk... Solo estás borracha. En serio, mañana te arrepentirás de lo que estás haciendo. -
Lucy, miembro reconocida en Fairy T...
–¡Pero Lucy! ¿Se puede saber qué es lo que comes? ¡Pesas como una vaca!
Happy estaba bastante molesto de que su gran compañero Natsu solo se dedicara a mirar como él hacía todo el trabajo duro. Varias veces pensó en tirar a Lucy al suelo, el no tenía la culpa de que Lucy se pusiera a beber, y para colmo, tenerla que llevar a su casa. Lucy decía cosas sin sentido y frases que no tenían ni pies ni cabeza, soltando cualquier tontería que se le venia a mente.
–A Lucy le gustan los botones de leche~....
Natsu, ya bastante nervioso de por sí, pudo ver por fin a lo lejos la casa de Lucy. Eufórico, salió corriendo hacia ella y esperó a que llegara Happy con la carga en sus pequeños brazos.
–¡Natsu, te has pasado! ¡La próxima vez la llevas tú!
–¡Aye, sir!
Al no saber dónde Lucy tenía las llaves, saltaron hasta la ventana y metieron a Lucy a su casa. La tumbaron en el suelo, ya que no tenían idea de qué hacer con ella, y esta se levantó del suelo tan rápidamente como pudo. Se mareó y cayó rendida a su cama. Natsu fue a encender las luces de la casa y ayudó a Lucy a incorporarse.
–¿Se puedes saber que ha pasado para que te comportes tan extrañamente hoy? –Preguntó Natsu, algo preocupado por su amiga.
–¡No me pasa nada! –Lucy se limitó a decir eso cuando estaba a punto de caer de sueño. –Hoy no quiero dormir, ¡vamos a alguna parte a pasarlo bien, Natsu!
–¡PERO QUÉ TE PASA! Tú no te vas a ninguna parte. Te quedas aquí, dormidita. Ya mañana haremos alguna misión con Lissana y los demás.
Al escuchar el nombre de Lissana, Lucy cambió su rostro medio adormilado a uno molesto. Se tiró en su cama. Empezó a patalear y lloriquear como una mocosa de 5 años.
–¡Yo no quiero que venga Lissana! ¡Quiero ir solo contigo! –Natsu se enrojeció levemente, pero se le pasó enseguida, puesto que él sabia que ella no lo decía en serio, solo estaba borracha.
De repente, Lucy se agarró al chaleco de una sola manga de Natsu, y empezó a tirar de él sin fuerzas.
–Oh, vamos Natsu~ ¿no quieres pasártelo bien conmigo? Ya sabes, como siempre solemos hacer... –Natsu podía ver que Lucy estaba demasiado cerca. Tenerla solo tan cerca de él hacía que se pusiera un poco nervioso. Se contuvo, y volvió a poner la misma excusa de antes.
–Tsk... Solo estás borracha. En serio, mañana te arrepentirás de lo que estás haciendo. –Se podía notar como Natsu poco a poco se iba poniendo más rojo cada vez que Lucy se acercaba a su cara.
–Pero Natsu, solo quiero pasármelo bien un ratito... Solo un poco...
–Lucy, he dicho que no. Debo marcharme, así que si no te importa, voy a....
Lucy agarró con mucha fuerza a Natsu y lo tiró hacia ella. Lucy estaba encima de Natsu, los 2 muy sonrojados.
–¿Qué crees que haces? –Dijo Natsu apartando con cuidado a Lucy de encima suya. –No podemos hacer esto. No quiero dejarte con mala reputación en el gremio. No vamos a hacer nada. Tu te acostarás y yo me iré, ¿De acuerdo?
El rostro de Lucy se entristeció de un momento a otro. Parecía casi de verdad que estaba triste, incluso con los efectos del alcohol encima. Lucy miró a los ojos a Natsu, quién empezaba a desear marcharse de una vez por todas y olvidar esto.
–Solo... Solo dame un beso y te dejaré ir. Solo eso. Nada más. Después de eso no te molestaré más.
Natsu se puso totalmente colorado. Sabía que su amiga no se encontraba nada bien, y menos iba a obecer a lo que decía. Pero en el fondo, muy al fondo de su corazón, deseaba hacerlo. Él sabía que no debía de aprovecharse de ella, pues al día siguiente lo olvidaría todo. Natsu se alejó de Lucy, sabiendo que no debía hacerlo, por su bien. Se asomó a la ventana, dispuesto a marcharse. Lucy se veía triste, mientras como su amor deseaba marcharse y solo olvidar.
–Escucha Lucy. Solo te veo como una amiga. Si me fuerzas, vas a hacer que me desborde. Así que por favor, manténte al márgen pidiéndome lo que me pides, ¿Vale?
Natsu salió acto seguido de su habitación. Lucy, pese a todo lo que había bebido, le dolió bastante lo que le dijo momentos antes de que se fuera.
[Solo una amiga ]
Lucy era ahora la que quería olvidar. Lo que su amigo de dijo antes le enseñó algo. Bajo los efectos del alcohol, todo se olvida. ¿Y si, aprovechar de no saber lo que hacer, y ganarse a Natsu, a un que después no recuerdes lo que has hecho? ¿Aprovecharse de no ser consciente de sus acciones, haría que Natsu se dejase llevar por la emoción del momento? ¿Podría así, olvidarse de Lissana?
Lucy estalló en lagrimas, dispuesta a hacer lo que tanto pensaba.
Natsu, en cambio, mientras caminaba solo por las calles de Magnolia, solo quería recordar.
Recordar la bella cara de Lucy cerca de la suya.
Recordar como su cuerpo lo apresaba.
Recordar las ganas que ella tenía de estar con él... Nunca antes le había pasado eso con una chica, al menos, lo mucho que había llegado a estar con ellas es dormir cerca, con Lissana.
Pero, ¿Estaba Natsu, enamorado de Lucy?
Natsu, pensativo, decidió preguntarle a Happy, quién llevaba un buen rato a su lado.
–Happy, ¿Crees que me he pasado?
–Mmm no lo creo. Ella esta borracha, obviamente no sabe lo que hace. Le has dejado muy claro todo, espero que ella lo entienda. ¿Por qué lo preguntas?
–Me preocupo de ella. No quiero que piense que no la quiero.
–¡Asi que la quieres! ¿No le habías dejado claro que solo la quieres como amiga? ¿O era solo...?
–¡Para nada! Nunca me he enamorado. Quiero estar solo el resto de mi vida, pero, ¿Es normal que cuando una chica está cerca de ti, el corazón te lata rápido, y te entren ganas de besarla?
–Normalmente, en chicos como tú, desesperados, sí. Creo que no estás enamorado, pero... ¿Acaso te atrae?
–Por ahora solo la veo como una amiga. Es algo que no quiero cambiar.
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