·Noche·

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El cielo era oscuro, la luna brillaba más que nada, y las estrellas eran sus lagrímas. Todo eso estaba encerrado en aquella ventana, deseaba con ancias salir afuera. Por un lado, todavía estaba triste, y por otro... Tan solo deseaba estar con James. Pero decidí dejarle su espacio y dormir en mi habitación. Necesitaba pensar las cosas. No sabía como decirle lo que sentía, aún no me siento muy listo...

Te necesita...

Me levante de la cama, y aparecí en el umbral de la puerta de James. Por alguna razón, esta estaba abierta. Escuché un solloso.

-¿J-James? -a lentas zancadas me acerqué- ¿Qué sucede?

Me sente en un pequeño espacio que había en su cama y comenzé a acaricíar su cabello.

-¿Hay algún problema conmigo? -dijo entre lagrímas.

Me exalté un poco por su pregunta.

-Cariño... No hay nada malo contigo...

-Mientes -dijo firme dando la vuelta- se que hay algo que te molesta...

-No es relevante encerio... No hay nada malo...

-¿Seguro?

-Ngh... Puede que a veces sienta que no me querés... Pero no es relevante, son pensamientos estúpidos que pasan por mi cerebro... Perdón por molestarte a esta hora de la madrugada...

Quize retirar mi mano, pero me tomo fuertemente.

-Te amo más que a nada... No te vayas... Por favor...

-Nunca me iré... Siempre estaré...

Me empujó levemente hacía el para que lo abrazara.

-Te amo... -dijo profundizando el abrazo. -Y mucho...

-Tambíen te amo... -mi voz se quebró.

Decidí dormir con el. Su abrazo me hizo tan bien, que mi corazón volvío a su latido normal. Volví a sentirme bien. Volví a estar feliz. Sin el, no lo estoy... Soy tan malditamente vulnerable, soy tan infeliz...

Te nesecito...

Mordí su cuello.

-¡Ahu! ¿Por qué hiciste eso?

-Fue tentador... Lo siento -reí.

Mordío mi mejilla y luego la besó.

-No me dolio -reí

-¿Querés que te duela?

-No JAJAJA

De igual manera mordío. Escupí un gemido.

-No pense que te gustara tanto... -me mordío una vez más.

-¡A-ah! B-basta -mis mejillas ardieron.

-No lo haré...

Mordío con mucha más fuerza, apretando mis nalgas. Lo pegue más a mí, me encanta sentir su respiración mesclandose con la mía.

Narrador Omnisiente.

Metío sus manos debajo del boxer negro que llevaba Joseph, exitandolo más de lo que ya estaba. De apoco, James, comenso a sentir la erección del menor. Sus grandes dedos comenzaron a preparar el ano del Rubio. Este, gemía descontrolado. Gotas de sudor caían por la espalda y frente de ambos. El menor, inicío a mover sus caderas para los costados, sintiendo así la erección del mayor.



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Continuaré en el proximo capitulo 7
Este capitulo demuestra que algunas cosas se solucionan con sexo (?) Ahre

Compañero de Cuarto {Yaoi BL}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora