Gracias por todo, por esperar esos días. Bueno este capitulo me gusta mucho y... bueno, pido siete votos. Repito, si quereis que os dedique un capitulo avisarmelo por un comentario y os lo dedico, por mi no hay problema. Bueno aquí lo teneis:) Espero que os guste
-Es Harry.- Dice poniéndose las bragas Rebeca.- Me voy a esconder en el armario.- Dice y entra en el armario de mi ropa. Me pongo de nuevo el cinturón y bajo las escaleras, veo que Harry está corriendo por la casa buscando a Rebeca.
-¿Qué pasa Harry?- Digo haciéndome el que no sabe nada. No le dejaré que suba para ver donde se encuentra Rebeca.
-¿Dónde está Rebeca?- Dice Harry desesperado.
-¿Quién es Rebeca?
-Mira gilipollas.- Dice cogiéndome de la camisa y tirándome hacia arriba.- Me da igual lo que hagas con tu vida pero escucha, sino quieres que te mate ¡Aléjate de mi chica!
-Relájate. Busca por la casa, no hay nadie que se llame Rebeca.
-La vi entrar.- Dice escupiendo las palabras. Me da un puñetazo en la cara y se va.- Encima que te pago la fianza ¿me lo pagas así? Espero no volver a verte en mi vida.
-Fuera de mi casa.- Digo y él me mira y luego se va. Que agresivo es este chico.
Narra Harry.
Sigo esperando en mi casa a que venga Rebeca cuando por fin se abre la puerta. Me da una sonrisa y un beso en los labios, pero yo ni le correspondo al beso.
- ¿Qué pasa Harry?- Me pregunta dejando el bolso en la mesa y sentándose al lado mía.
-¿Qué qué pasa? Me dices que vas a estar conmigo una relación seria y te vas a tirarte a otro tío. ¿De qué vas?
-¿Qué dices? He estado en la peluquería Harold.- Dice besando mi cuello.
-¿De verdad? Te he visto entrar en casa de otro.
-Puede que sea otra, yo soy sola para ti.- Dice poniéndose encima de mí.
-Júramelo.
-Te lo juro.- Dice y se va a la cocina. Gruño y me levanto.
-¿Por qué me dejas así?- Digo señalando mi erección
-Soy mala como tu.- Dice sacando la lengua hacia un lado.
-Vamos Rebeca.
-Quiero ir lenta.
-Si lenta, y por eso te has follado al otro.
-¡Que no joder!
-Bueno, bueno vale. ¿Quieres ir a tomarte algo?
-Sí. – Cerramos con llave la casa y caminamos al bar más cercano que se encuentre, le agarro de la mano. Al llegar al bar no muy lujoso por lo que veo entramos y nos sentamos en una mesa que se encuentra al fondo a la izquierda. Los camareros nos saludan pero yo no le echo cuenta.
-Buenos días, ¿Sabéis lo que tomareis?- Dice una muchacha rubia con ojos celeste y pelo rizado.
-Emm… Una coca cola.
-Que sean dos.- Dice Rebeca mirándome. Se ha puesto celosa al ver como miro a esta muchacha.
-Mira.- Digo sacándome del bolsillo un papel.- Toma, llámame.- Digo guiñándole el ojo. Ella me sonríe tímidamente y se lo guarda en el bolsillo.
-¿Te puedes ir de una puta vez?
-Si claro.- Dice y se aleja.
-¿De qué coño vas Harry?- Dice apoyando las dos manos sobre la mesa, estaba enfadada.