¡Muchas gracias por los votos! Decidme si quereis que os dedique un capitulo. Aquí os dejo el capitulo. Espero que lo disfruteis. Pido cuatro votos
-¿Qué pasa? Me prefiere a mí. ¿Verdad? Te puedo hacer gozar mucho más que este… niño.
-Me gusta mas este chico.- Dijo la chavala tocando mi pecho.
-¿Lo ves? Me prefiere a mí.- Louis levantó una ceja.
-¿Tú eras el chico del móvil?
-No, era mi hermano gemelo. ¡Idiota claro que si!- Dije. Es idiota.
-¿Qué quieres de mi gilipollas?- Dijo Louis cogiendo una copa y dándole un trago.
-Como tu padre es el presidente no te puedo matar… pero sufrir sí.
-¿Qué?
-Sí.
-¿Qué dices?
-Lo que has escuchado sordo.
-Idiota.- Dijo y se volvió dándome la espalda. ¿De qué va? No sabe con quién se mete. Le cogí del pelo y lo arrastré hasta el jardín de la casa. Le di un tortazo él se llevó la mano hacia su mejilla.- ¿¡Que haces imbécil!?
-Nadie, nadie me llama IDIOTA.- Dije apretando los puños. ¿Este chico está mal? Sí.
-Me das asco chico desconocido.- Dijo vacilante. Literalmente, me estaba tocando los huevos metafóricamente.
-Me llamo Harry.
-No te pega ese nombre. Harry…- Dijo pensativo. ¿Qué estaba pensando?- Te pegaría el nombre Haston.
-¿¡Que!? Ni hablar, me gusta mi nombre y un niñato como tú no va a venirme a cambiarme mi nombre.- Dije enfadado.- A ti te pegaría culo gordo.- Dije ahora divertido.
-No tengo el culo gordo.- Dijo Louis tocándose su culo. Me empecé a reír.
-Si lo tienes.
-Tu no lo has visto.
-Me lo imagino.
-¿Qué te pasa eres gay?
-No.- Dije ahora enfadado.
-Vale, vale.- Dijo riendo. Me acerqué a él y agarré su pelo tirando hacia el suelo. Soltó un quejido.- ¡Suéltame Harry!
-Repíteme que soy gay.
-No. Perdón.
-¡Que lo repitas me cago en la hostia!
-Por favor para.
-¡Repítelo o te corto los huevos!- Dije tirándole más de los pelos.
-E-eres un gay.- Dijo. Solté un suspiro, le di una patada en el estomago, el se puso las manos ahí. Yo me alejé de ese bicho y entré en la fiesta. Pasaron horas y horas. Yo bailaba con algunas chicas, ni sabía sus nombres. Me tocaron el hombro. Me volví y vi a Louis con una mala cara.
-Esto por lo de antes.- Dijo tirándome de los rizos hacia el suelo.
-¡Ah joder! ¡maricón suéltame!- Grité. Me dolia. Nadie me tocaban mis rizos y si me lo tocaban saldrían muy mal herido.
-Suplícame.
-Ni en broma.
-¡Suplícame o te juro que te mato!
-¿Tu me vas a matar a mi?- Dije incrédulo. Imposible, nadie podía conmigo y menos un debilucho como el niño este.
-Sí. Suplícame.