Capítulo 3

45 5 0
                                    

Harry se encontraba leyendo una revista sin mucho interés, seguía pensando en lo que su madre le había dicho y aun seguía creyendo que era un mala idea.
Él era consiente de lo que su inmadurez había provocado, sin embargo no se arrepentía porque gracias a eso tenia una criatura en el vientre que lo amaría incondicionalmente hasta el día en que muriera.
Por lo que está tambien consiente de que el plan de su madre es una total locura, ocultarle a su padre su embarazo seria mas difícil de lo que ellos querían admitir.

—Harry, baja un momento por favor tengo que hablar contigo. –Escuchó del otro lado de su puerta la voz de su madre y luego el sonido de sus tacones al caminar lejos de ahí.
Suspiró con impaciencia, ¿Su padre ya se había enterado? No, absolutamente no porque si no su madre no estaría tan tranquila.

Se levanto con pesar de su cama y camino hacia la sala de estar, donde efectivamente su madre se encontraba con la misma cara que había adaptado desde que se enteró de su embarazo.

—Aquí estoy. –Susurró bajo sentándose enfrente de su madre viendo a esta asentir con calma. Okey, ya se estaba preocupando.

—Escucha eres mi hijo y te quiero, sin embargo sabes que no estoy de acuerdo con la estupidez que cometiste, no lo estoy ni lo estaré.

—Lo sé y ya te dije que si no piensas apoyarme me puedo ir de casa. –Respondió con voz pastosa intentando mantenerse fuerte.

—¿Sí? ¿Y de qué vas a vivir? Te recuerdo que esa cosa y tú necesitan cuidados después de que te alivies, por lo que te ofrezco mi ayuda pero tienes que hacer todo lo que yo te diga sin rechistar, aceptas o te largas y te mueres en la calle. –Vio a su madre como si de un monstruo se tratase, él nunca creyó que llegarían a tal grado.

Lo meditó un momento y ¿Que podría salir mal?
Sin más asintió con la cabeza y sonrió como desde hace 2 semanas no lo hacia.

—Bien, sabía que no eras tan estúpido como para no aceptar la oferta que te tengo querido.

Harry se quedo escuchando todo el plan que su madre le decía y por dios, ¿Él era capaz de hacer algo así?

*

Sí, efectivamente él haría cualquier cosa por el bienestar de su hijo y de el mismo.

Vio a su madre a lo lejos verlo fijamente haciéndolo sentir incómodo, sabia que le estaba queriendo decir que no podía echarse para atrás.

—Él no se encuentra aquí. –Escuchó una voz tras el haciéndose le familiar y como no si se trataba de su hermana, Gemma, que desde hace algunos meses no veía por motivos de estudio y una gran distancia que los separaba.

—¡Gemma! –La abrazó con alegría siendo correspondido su abrazo de forma suave.

—Mamá me llamo y me contó en la estupidez que estas envuelto y dejame decirte que estoy desepcionada de ti.

—Gemms, yo no...–Fue interrumpido por su hermana.–

—No digas nada, lo hecho hecho esta. Ahora como te dije tú presa no se encuentra aquí, esta allá afuera junto a su familia. Ve con él y entabla una conversación, ten por cualquier cosa. –Su hermana tomo su mano y dejo un pequeño bote sobre la misma, arrugo el ceño en signo de confusión.—¿Creías que todo seria tan fácil? No mi amigo, dejame decirte que la mierda en la que te haz metido es por lo que me siento decepcionada de ti. Ahí vienen, no lo arruines solo una pastilla y dos gotas, no lo olvides.

Y sin más su hermana se fue sin siquiera dejarlo hablar, okey esta noche se ganaría su pase VIP al infierno pero eran ellos o él.

Esperaba no arrepentirse de esto.

El bebé, Nosotros Y ¿Él?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora