Mas grande que el universo.

Capitulo 04

Todos los personajes pertenecen a Naoko Takeuchi.

Ya había caído la noche, Usagi se encontraba en su habitación, tumbada en su cómoda y amplia cama, con un brazo tapando parte de su rostro. Se sentía triste, pensando en la conversación que había tenido con Michiru. Ella no era feliz, se sentía tan sola la mayoría del tiempo, ya que su padre siempre estaba ocupado viajando, en eventos o en juntas de negocios. Era muy poco lo que podía compartir con él.

Tomo su celular para llamar a Minako, quería despejarse un poco, pero recordó que su amiga, le había mencionado que saldría con Kunzite. Resignada soltó un suspiro, recodando una vez más, lo patética que era su vida. Que si al menos se diera la oportunidad de salir y conocer chicos, no estaría tan aburrida un sábado por la noche.

Su dispositivo emitió un sonido, era la alerta de un mensaje de texto. Al revisar se dio cuenta que provenía de Michiru.

"Usagi, esta tarde me encontré a Mamoru, quedamos en vernos en el parque número diez hace treinta minutos. Pero Seiya, me invito a cenar y lo olvide por completo. No quiero arruinar mi plan, por favor ve al parque y no lo sé, dile que mi madre me pidió que la acompañara a un evento de improviso. Se que cuento contigo amiga. El parque queda cerca de tu casa. No intentes llamarme, estaré ocupada... ¡Besos!"

Usagi no sabía qué hacer, pues nunca salía de noche y mucho menos sola. Estaba segura de que si se atrevía a hacerlo, su padre se enteraría y eso no terminaría nada bien. Ella nunca lo había desobedecido, le aterraba la idea, no quería desatar la furia de Kenji. Definitivamente no.

Así que solo trato de relajarse y tomo la decisión de no asistir a lo que, Michiru le pedía. Era muy arriesgado, su padre la encerraría para siempre y obviamente no quería eso.

Mamoru debe estar esperándola

En ese momento, sus pensamientos fueron interrumpidos por unos toques en la puerta de su habitación. Usagi inmediatamente, se levantó de su cama para abrir, era Mimet, su nana.

—Niña Usagi, la cena esta lista desde hace un buen rato, ¿Por qué no has bajado a comer?

—No tengo hambre, Mimet. —Respondió con desgano— Quizás mas tarde baje por un vaso de leche.

—Está bien, —contesto no muy convencida— me iré a dormir, hasta mañana.

Se despidió para macharse, pero Usagi la detuvo.

—Mimet...

—Dime, mi niña.

—¿Mi padre... aun no llega?

—No, el señor Kenji llamo hace poco y dijo que tuvo que salir a un viaje de negocios y no viene hasta la otra semana.

—¡Perfecto! Buenas noches, Mimet. Regreso en un rato. —Entro a su habitación para buscar su bolso.

—¿Vas a salir a esta hora? —Preguntó Mimet, entrando detrás de la rubia. Estaba alarmada, Usagi nunca había salido sola de noche.

—Sí. Ya tengo veintiún años, Mimet. —Expresó molesta— creo que ya puedo salir sola.

Luego de contestar de esa manera, Usagi se arrepintió. No debió hablarle a Mimet de esa forma, ella era como su madre y la apreciaba mucho.

—Lo siento. —Se disculpó, enseguida— Perdóname, no quise hablarte así.

Usagi bajo su rostro, estaba avergonzada por su comportamiento.

—No te preocupes, —Mimet con una mano levanto el rostro de Usagi— Ve a donde tengas que ir, no le diré a tu padre.