Love Nightmare 1

315 20 1
                                    

-N-No... -dijo, sorprendido. –Lucifer.

-Bingo. –dijo este, sonriente.

-No puede... -comenzó a decir, pero este le apretó la boca con fuerza.

-¿No vas a preguntarme cómo llegué hasta aquí? ¿Cómo me encuentro? Que desconsiderado, Sam. Después que los ayudé...

-¿Cómo... cómo tienes ese cuerpo? –preguntó, quitándose la mano que le sostenía la boca. -¿Qué haces aquí? –no pudo seguir preguntando... Se sentía... sofocado. El cuerpo de lucifer estaba caliente.

-Una a la vez, Samuel. Una a la vez. –lucifer puso su dedo índice en su boca, pensado. –Mh... La mayoría de las respuestas son un secreto. Escapé. Y volví a conseguir este cuerpo, gracias a alguien, pero me escapé de nuevo. –con fuerza, le aprisionó las manos, para que no escapara. –Estabas cerca, pude... Pude oír tus plegarias. –se burló. –"Necesito ayuda". Aquí me tienes. Y para que lo compruebes, soy muy real.

Le apretó con fuerzas las muñecas, haciendo que le dolieran y se acercó, a centímetros de su rostro, que estaba presionado contra las baldosas del suelo.

-¿Estás feliz de verme, Sammy?

-No... no me llames así. –dijo Sam, desviando la mirada.

-¡Que cruel eres! ¿Sabes qué? No vine hasta aquí para nada.

Chasqueó una de sus manos y sintió que su cuerpo se relajaba. Todo estaba cálido y podía sentir el mínimo tacto en su cuerpo, que lo hacía suspirar con lentitud.

Lucifer tenía sus poderes.

Tragó en seco, nervioso.

Esto no podía ser cierto. Era un sueño... Una pesadilla.

-Es real Sammy. Soy real. –dijo lucifer. –Y ahora... no hay tiempo que perder. Te ayudaré con algunos de tus problemas.

Se acercó y pudo sentir su respiración en su rostro.

Lucifer sonrió y, acto seguido, pasó su lengua partida en dos, por su rostro. Sintió la saliva en su piel.

Estaba sonrojado.

-N-no... -logró decir, pero no había nada qué hacer. Era real y, después de todo, era el recipiente de lucifer, había estado con él y se conocían. Tenía atracción hacía él. Sabía que estaba mal, pero ahora no podía hacer nada, si intentaba algo podría involucrar a alguien más, además de que podía morir.

-Eres tan inteligente. –dijo lucifer, mirándolo sonriente. –No te mataré... por ahora. Nadie nos interrumpirá, no te preocupes. Así que, relájate y compláceme, ¿está bien?

Lanzó un suspiro, avergonzado y enojado consigo mismo.

Lucifer nuevamente lo envolvió de saliva, en todo el rostro, haciéndole un poco de cosquillas. Luego lo besó, con fuerza, con pasión, con lujuria.

Podía sentir calor, una energía misteriosa proveniente del arcángel. Eso lo atraía.

-Te ves muy bien de sacerdote, Sam... ¿Crees que hace calor aquí o es mi idea? –dijo lucifer y comenzó a quitarse la camisa celeste que llevaba, junto a su polera gris. –Te dejaré las manos libres, porque las necesitaras después, no te vayas a escapar ¿eh?

Se agachó, besando y mordiendo su cuello.

-¡AHH! –se quejó Sam, con dolor.

Volvió a hacerlo, varias veces. Lucifer puso sus manos en su cadera, también con fuerza.

-De verdad, ¡Te vez muy bien así!

Parecía que estaba realmente feliz.

-...

Unexpected Encounter (Encuentro Inesperado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora