El guerrero Dragón

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Los años habían pasado después de la batalla contra Kavaxas y haberlo regresado al infierno.

Las tortugas supieron continuar adelante después de la pérdida de su Maestro, pues contaban con la ayuda de sus amigos Abril y Casey; y en pocas ocasiones también de Karai y Shinigami.

Sin embargo, el tiempo no solo había logrado fortalecer sus lazos, también los había llevado un paso más al camino de la adultez. Además de los cambios físicos que sufrieron; sus cuerpos parecían más humanos, sus caparazones se habían encogido y adaptado más a la forma de sus espaldas, ahora parecían más mochilas, sus propios cráneos se parecían más al de los seres humanos, aunque seguían sin tener nariz ni oreja y continuaban sin desarrollar cabello.

Sin embargo un nuevo mal estaba por aparecer y un gran aliado seria arrastrado a las garras de la oscuridad

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Sin embargo un nuevo mal estaba por aparecer y un gran aliado seria arrastrado a las garras de la oscuridad.

El guerrero Dragón

Alcantarillas de la ciudad de Nueva York

Leonardo, líder de las tortugas, portador de la máscara azul, cuyas armas eran dos mortales catanas. Se paseaba intranquilo en su habitación, en los últimos días a esta sufriendo unas terribles pesadillas que no auguraban nada bueno... y sin su padre no tenía a quien recurrir por consejo,

- Leo, el desayuno está listo.

Escucho la alegre voz de su hermano menor llamarle.

No tenía idea de cuál sería el nuevo peligro al que tendrían que enfrentarse, solo esperaba que el, su familia y amigos estén preparado para enfrentarlo, pero sobretodo el esperaba poder guiar a todos a una victoria segura... y sin perdidas.

Sacude su cabeza tratando de despejar su mente de los pensamientos pesimistas... hasta ahora habían enfrentado grandes peligros; entre ellos a Destructor, Enemigos infernales y del Espacio, de seguro podrían enfrentar cualquier amenaza. Con ese pensamiento optimista decide bajar a desayunar con sus hermanos.

Al llegar, descubre que todos ya estaban por terminar su desayuno.

Rafael (Raph): se puede saber que te tomo tanto tiempo, intrépido líder.

Dónatelo (Donnie): temí que no llegaras a tiempo y que Mikey acabara comiéndose tu desayuno también.

Miguel Ángel (Mikey): no digas tonterías, jamás me comería el desayuno de mi respetable hermano mayor (dijo con tono solemne).

Sus otros dos hermanos mayores lo miran incrédulos

Raph / Donnie: pero ya antes te has comido el nuestro (le dicen a coro)

Mikey: porque a ustedes no los respetos.

Raph / Donnie: pequeño granuja

Ambos gritaron con enojados con flamas en sus ojos. Por lo que Mikey corre y se oculta detrás de Leonardo.

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