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         "Este amor será todo lo que           
                          soñabas"

                                [...] 

Jamás me arrepentiría haber elegido a Hailey como mi compañera de vida, desde la ves que la vi protestando por un muñeco de ciencia ficción, hasta hora, donde   me acaba de hacer el hombre más feliz del mundo.
  

Tome su rostro y lo acerque al mío, nunca me casaría de sabor de sus besos, el cómo bailaban con los míos era mi sensación favorita.

Pasó sus brazos a mi cuello, mientras me aferraba más a su cintura. Minutos más tarde el beso se torno más caliente, la tome de su hermoso y mío trasero para que ella pudiese envolver sus piernas sobre mi cintura.

No dude ni un segundo para poder llevarla hacia la cama. Me posicione sobre ella mientras bajaba por su cuello, el punto débil para ambos.

Los pequeños suspiros y quejidos de parte de ella eran música para mis oídos y para mi amigo.

Pase y repase mi legua por sus claviculas, jugando un poco con ella. Hailey acariaba mi pelo de una forma que siempre terminaba enloqueciendo, haciendo círculos y jalando de vez en cuando.

Volví hacia su boca tratando de quitar mi hambre por ella.

Me encanta la música de nuestros gemidos y el baile de nuestros cuerpos.

    Horas antes...

Pase mi mano por mi cabello mientras suspiraba de alivio y calma.

Habia mandado a Hailey a un spa para que yo pudiese arreglar todo para la cena, ella al principio no aceptaba ya que decía que quería pasar el día conmigo. Yo también me moría por estar a su lado todo el día, moría por estar con ella todos lo días, no puedo evitar amarla, me nace sólo.

Partió a las 9 de la mañana llevaba 7 horas sin verle y me sentía que me volvía loco, pero después de todo la cena valdría toda la pena.

Quería que la cena fuera perfecta, tal como ella merecía y no podía evitar mis nervios y que mis pelos se pusieran de punta sólo en pensar en su repuesta.

Pero confiaba en su amor por mi.

Había mando a poner una mesa de pata corta cerca a la costa

Se que le gustará tanto a  Hailey, le gustan las cosas simples y sencillas pero significativas.

También había puesto una alfombra de playa a la vista del mar, la mesilla estaba por arriba y tenía algunas velas, los platos y cubiertos haciendo ardono.

Después de saber que todo estaba bien, tome camino al spa donde se encontraba, cuando llegué me recibió con una gran sonrisa, se  veía alegre y relajada, su rostro no llevaba ninguna gota de maquillaje pero aún así se veía como la misma Afrodita.

Subimos al auto y yo aún no había dicho ni una palabra, todo iba al plan.

Después de como 15 minutos de viaje por fin ella protestó.

—¿Pasa algo Justin?— me aguante las ganas de reír— es que de verdad no entiendo que está mal, sabes sólo puedes decirme lo que pasa.

Me miro confusa, su rostro mostraba preocupación y tristeza.

—Sólo calla y espera a que lleguemos, necesitamos hablar— trate de sonar lo más duro posible, me dolió hacerlo, pero era conforme al plan.

—No puedes callarme Mario...

La ignore.

Cuando llegamos me pregunto sobre el por que estabamos aquí.

La lleve a la mesa y la tome por atrás, ella vio todo y sonrió, había comprendido todo.

—¿Que? No puedo pasar tiempo con mi chica.

Ella río para voltarse hacia mi.

—Eres un tonto, pensé que de verdad estabas molesto conmigo— rió y me beso.

Conforme los minutos pasaban, mis nervios crecían de más. La hora de comida había pasado llena de risas, recuerdos y besos, venía el momento.

Le propuse caminar a la orilla del mar, para poder dirigir mejor.

Le explique que  podíamos dejar las cosas por que había gente cuidando y partimos camino.

Junte nuestra manos y bese repeditas veces su rostro, ella reía mucho.

Y oh por Dios su risa escandalosa era una bendición.

Pasaron algunos minutos y por fin había librado mi mente, para comenzar a hablar.

—Sabes Hailey— puso su atención en mi —la primera vez que te vi, pensé que eras rara. 

Río al igual que ella.

—Pero algo llamo mi atención a ti, antes no sabía el que era, pero ahora si — me detuve — Realmente fue todo,  solo, eres como, diablos, un maldito ángel, se que muchas veces lo niegas y lo olvidas pero para eso estoy yo, para ser quien te recuerde cada día,  déjame ser quien cada mañana se levante contigo, quien cuando estés triste poder curar tus heridas, quien puedes ser tu, y ser feliz, sólo déjame ser tu hombre, quieres.

Su sonrisa creció y antes de que pudiera hablar, apunte con mi cabeza hacia a un lado.

—Ve eso de allá

Un pequeño beagle cachorro venía comianando hacia nosotros con una caja en el collar.

—un perro- susurró

Me volteo a ver con el ceño fruncido, apunte de nuevo al cachorro y ella camino hacia el.

—¿Qué es esto Mario?

Tomó al perro en sus brazos y con su mano libre tomo el collar junto con la caja y la abrió.

Sus ojos de iluminaron, y yo tome el anillo.

—Hailey, amor mío, no tienes idea de cuanto te amo e incluso díario llegas a enamorarme más de lo posible, se que no soy perfecto, pero se que si algún día te llego a lastimar lucharé para que sanes. Por déjame ser tu hombre, por favor se mi esposa.

Ese día hicimoso el amor como nunca antes, desmostrandole que este amor será será todo lo que ella soñaba.

Oh mi dulce Hailey este amor que será todo lo que     soñabas

✨¡No mames que frío esta haciendo chamas! Este capítulo está dedicado a las bellas personitas ilsehoranhemmings @SoyTumblrZuribau @María_mago

Regalame ➶mbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora