Choromatsu había subido a la habitación donde siempre compartían, pero se quedó en la puerta, mirando sus manos, estas aun temblaban por la incomodidad, se había lavado la cara, en una búsqueda por sacar las lágrimas que había dejado correr antes, entre los brazos de Osomatsu, buscando disimular la vergüenza que había sentido y la tristeza de ser regañado por su hermano, a quien, a pesar de nunca decirlo, admiraba y amaba de forma desinteresada.
—Soy un mal hermano, solo le haré daño si entro por esa puerta. —Choromatsu era el hermano razonable, el que a veces, no siempre, pero si muchas veces al día, trataba de buscar la lógica de las cosas y buscaba actuar como un hombre que realmente pudiera no decepcionar a sus padres, pero ahora, frente a esa puerta, era diferente, ahora estaba enfrentando a su pequeño hermano, quien les había confiado parte de su corazón y que él había roto.
—Todos somos algo despistados, pero no eres malo...—Osomatsu había puesto la mano sobre su hombro, en una búsqueda por calmar el malestar de su hermano y de darle la fuerza necesaria que el otro necesitaba, para cruzar la puerta y disculparse con Todomatsu.
Fueron segundos, para Osomatsu, un acto común como abrir la puerta, pero para Choromatsu fue algo más grande, fue enfrentarse a él mismo y a todo, fue eliminar esa barrera, que de alguna manera lo alejaba de sus sentimientos y del temor a perder a sus hermanos, que lo alejaba de esos minutos en que la presencia de sus hermanos le hacían desear un contacto, pero que por su personalidad, jamás era capaz de pedir y mucho menos de dar.
En la habitación Totty se encontraba recostado en el marco de la ventana, con la mirada perdida en la distancia, buscando algo que sus ojos probablemente no podrían siquiera imaginar, pensando en alguien que quizá había cambiado muchas cosas en el pecho del menor de los hermanos.
—¿Totty? —Choromatsu quería hablar, pero por alguna razón, la casa parecía aún más silenciosa de lo que el mismo podía recordar había sido jamás. — ¿cómo te sientes? — preguntó, preocupado por la palidez en la piel del menor y por apagado de sus ojos.
—Cansado, creo que ya no me quedan lágrimas, pero sabes, siento que ya no me pesa el pecho y que ahora, soy más yo mismo...
—Totty...
—Puede ser asqueroso o extraño, pero soy yo, por mucho tiempo no noté como me escondía del mundo, como simplemente me alejaba, pero ahora entiendo que solo es por ser una persona extraña...
—No eres extraño...— Choromatsu se había acercado, aunque aún existía casi un metro de distancia entre ellos, como su una barrera en medio los separase. —Amor es amor, no importa de quien venga, no importa a quien esté dirigido, lo importante es el amor.
—Choromatsu nii-san...— Totty se había girado, dejando por primera vez a los ojos del tercer hermano, notaran como el rostro de este, estaba contraído en una mueca de tristeza.
—Totty. —Choromatsu no era el más cariñoso de los seis hermanos y mucho menos era el que demostraba sus emociones más abiertamente, pero en ese instante, simplemente con la imagen del menor de sus hermanos en esas condiciones, funcionó como el mejor de los estímulos para superar sus miedos y hablar, simplemente de corazón. — siempre decimos que no tienes corazón o que puedes llegar a ser el más cruel o el que menos cosas comparte con los otros y en el fondo creo que es la verdad, pero realmente es nuestra culpa, por no darte la confianza necesaria, la fuerza necesaria para que te apoyaras en nosotros y te enfrentaras al mundo.
—Nii-san...
—No, déjame terminar, no importa a quien ames Totty, no importa los gustos que tengas, al final nada de eso te cambiará en algo, Totty es Totty y siempre será Totty, pero ante todo, siempre será nuestro hermano. — Choromatsu sonrió y agregó. — y ante todo Totty, eres nuestro pequeño hermano, nuestro hermanito, al que todos nosotros hemos jurado amar y cuidar, para siempre, así que, deja de llorar, te juro que nosotros te cuidaremos mejor que a nada en este mundo y que no importa que pase mañana, siempre será así.
Chromatsu rodeó el cuerpo del otro y simplemente lo consoló por varios minutos, hasta que el recuerdo del joven del parte llegó a la mente del joven de camisa. — Totty, tú estás enamorado.
—Nii-san, yo juro que no he...
—Tranquilo, está bien, solo quiero saber, si ese amigo tuyo, ese con el que sales y te mensajeas, es la persona por la que te atreviste a contarnos esto, si ustedes son, bueno ya sabes o si están juntos de alguna manera.
—No...— La voz del menor parecía estarse apagando. — él me dijo sus sentimientos y yo lo rechacé, creo que ya perdí mi momento, ahora se marchará lejos de mí y encontrará una persona más honesta a quien querer.
—No puedes rendirte así de fácil...
—él ya debe estar lejos...— pero no pudo continuar, cuando los brazos de Choromatsu lo arrastraron fuera de casa, de forma brusca.
Todomatsu estaba confundido, pero se dejó guiar, confiando en su hermano y en todo lo que estaba pasando, deseando, desde el fondo de su corazón, no tener que rendirse con Atsushi.

ESTÁS LEYENDO
Homosexual
Fiksi PenggemarSoñaba con ser diferente, soñaba con alguien que supiera quien era él, que supiera que era eso que poco a poco crecía en su pecho, que pudiera darle el nombre que por tanto tiempo el había buscado...