Una Saiyayin en konoha [Editando]

Sueño, alucinación o fantasía [Editado]

Narra ___

Xx: ¡Tu padre se va a entrar!- exclamó levantándose de la esquina de la cama, mientras un aura maligna salía de ella, sonreí nerviosa, si se parecía a mi madre, cuando menos en eso

Me sorprendí a mí misma ¿A mi madre? ¿Que madre? Me llevé una mano a mi cabeza, confundida

Yo: esto.... E-emm...- dudé un momento- m-madre... Exactamente ¿Dónde... Dónde estamos?- pregunté tratando de salvarle la vida a sea quien sea Matsura... ¿Por qué sentía que ese nombre me sonaba de algo?

Mamá: oh cariño- me miró tristemente, al parecer olvidando su furia, se sentó nuevamente en una orilla de la cama para quedar junto a mí- nuestro planeta lo llamamos Supremo ¿Enserio no lo recuerdas? Lo nombraste así una vez dejamos el planeta Tierra- acarició mi cabello con suavidad

Yo: ¿La... Tierra? ¡Ugh!- me quejé por el agudo dolor de cabeza que se me produjo repentinamente

Mamá: ___... Corazón ¿Por qué no intentas descansar un rato más? Parece que aún no te recuperas del todo- dijo con tono afligido

Yo: N-no, no, y-yo estoy bien- contesté llevando mi mano a mi cabeza- l-la Tierra ¿Por qué dejamos de vivir en ese lugar?- pregunté levantando mi vista hacía ella

Mamá: eso...- desvió su mirada- tal vez quieras verlo tú misma- suspiró levantándose- ¿Vienes?- preguntó estirando su mano hacía mí

Dudé un instante, pero finalmente tomé su mano, me levanté y la dejé guiarme, nos dirigimos al exterior de aquella casa

Un lugar bastante pequeño, pero daba el sentimiento de ser un hogar realmente acogedor, apenas salimos una pequeña esfera de cristal llamó mi atención, y al parecer ese era nuestro paradero pues ahí fue donde mi madre detuvo su andar

Yo: ¿Que es esto?- pregunté, observando con curiosidad el objeto, recibí una mirada extraña de mi progenitora antes de que esta misma colocara su mano sobre el curioso objeto

Mamá: muestra lo que sucede en el planeta Tierra- ordenó expulsando algo de Kí, el cual fue absorbido en un corto momento

Yo: esto... Esto no puede ser- jadeé impactada, la curiosa esfera de cristal había empezado a proyectar un paisaje horrible, mucha sangre y cuerpos de humanos muertos por doquier

En ese preciso momento también presenciamos un nuevo asesinato de una joven mujer, que debía tener como mucho unos 28 años, apuñalada brutalmente con un kunai

Cayó muerta, o si no había tenido suerte, agonizante, revelando que trás ella escondía a un pequeño niño de tal vez unos 5 años, llorando en completo estado de shock

Un escalofrío me recorrió al poder visibilizar al asesino, que a pesar de todas mis espectativas demostró ser aún más desalmado de lo que ya había demostrado, y asesinó al pequeño sin piedad alguna

Al salir de la conmoción provocada por la escena noté mi propio estado, temblaba mientras me abrazaba a mí misma, llorando descontroladamente

Mamá: es por esto que nos marchamos- explicó, quitando su mano de la esfera, dejando desvanecer la escena recién mostrada- los humanos... Se volvieron violentos... Inhumanos- se acercó a mí, quién aún temblaba- mi amada y pequeña Diosa... No podíamos permitir que crecieras en un lugar así- acarició mi rostro, antes de abrazarme

Yo: ellos... Se están autodestruyendo...- murmuré sin poderlo creer

Mamá: involucrarnos hubiese sido contraproducente... Nos hubiésemos arriesgado al ataque de un humano descontento y... No me atrevería a ponerte en tan peligro querida...- explicó, con una expresión acongojada