Capítulo 6

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Buscó en su estante de medicinas unas pastillas de naproxeno para el dolor que sentía, aunque no sabía qué era más fuerte, si su resaca por haber bebido demasiado vino o el dolor que traía su culo por tanto follar toda la noche. HyukJae tenía razón, una sola vez no bastaba para quedar satisfecho estando con él. Su amigo le aseguró que la pasaría bien y vaya que le cumplió a la perfección, puesto que en ningún momento pareció quejarse de su manera de hacerlo

Una vez que se pasó la pastilla con el agua cogió el polvo compacto y la base de maquillaje para taparse las marcas de sangre coagulada del cuello, no podía arriesgarse a que Jong Woon descubriera que no estuvo con RyeoWook la noche anterior, sino follando con el prometido de este. Claro, la última persona en la que sospecharía sería en su mejor amigo, ¿De qué se preocupaba?

Tan pronto terminó asegurándose que las marcas ya no eran tan visibles guardó sus cosméticos de emergencia para dedicarse a las labores del hogar, ese era su día libre, por lo que no le preocupaba en lo absoluto arreglarse para ir a laborar. Jong tampoco se encontraba en casa, supuso que salió a correr o algo por el estilo. No le importaba mucho tampoco, su esposo ya estaba lo suficientemente grande para saber lo que hace, sin embargo eso no quitaba el hecho de no preparar el desayuno y tenerlo listo para cuando al mayor se le ocurriera regresar

La puerta de la residencia se abrió, Jong Woon entró dejando su saco en el perchero encaminándose a la sala con una sonrisa de satisfacción. Hacia tanto tiempo no se sentía bien, pasar la noche con Wook le favoreció bastante, eso sin contar las cuatro veces que hicieron el amor: la primera en el cuarto de huéspedes, la segunda en el baño mientras tomaban una ducha, la tercera en la habitación principal y la última hace unos momentos antes de retirarse de ahí. Su vida sexual no era tan activa que digamos, pero vaya que quedó satisfecho de tanto hacerlo

—¿Y ese milagro? —La voz de DongHae interrumpió sus pensamientos. El castaño salió de la cocina sorprendido al verlo con la misma ropa del día anterior

—¿Qué? Por si se te olvida esta también es mi casa —El menor rodó los ojos, odiaba empezar de esa manera el día

—Me refiero al por qué estás vestido igual que ayer —Trató de no entrar en discusión con su marido —No me comentaste que ibas a salir, mucho menos que pasarías la noche fuera de aquí. ¿Por qué no llegaste a dormir a casa?

—Ah, por ahí hubieses empezado —Habló el mayor con una sonrisa dejándose caer en el sofá —Como no estabas aquí me dije: "No tiene caso regresar al departamento si voy a estar sólo", así que me fui a vagar por las calles de Seúl, sólo como perro faldero sin dueño —Su explicación sonó algo sarcástica a la vez que convincente, pero era mejor que un "fíjate que estuve con quien se suponía que ibas a estar tú, y no solo compartiendo una taza de café, sino lo que comparte con mi mejor amigo" —Y así lo hice. Salí al río Han a mirar las estrellas y a beber algo por ahí con un amigo —Hae frunció una ceja

—Pues... Me alegro que te hayas distraído en algo durante mi ausencia

Una sonrisa maquiavélica resplandeció en el rostro de Jong Woon cuando su esposo entró a la cocina, suponiendo que estaba cocinando o fingir que era un esposo preocupado que lo había estado esperando en toda la noche. Meter algo de cizaña en todo aquello no estaría nada mal, sobre todo cuando quería averiguar sus sospechas para saber lo que estaba haciendo cuando "estaba con Wook"

—Y... ¿Es verdad aquello de que estabas con RyeoWook? —El castaño dejó a un lado el cuchillo con el que picaba la fruta. El nerviosismo empezó a recorrer su cuerpo al imaginarse ser descubierto

—Es obvio que si, por algo te mandé el mensaje —Trató de sonar seguro de sus palabras antes de volver a su actividad —Estuvimos en su departamento charlando de muchas cosas sobre ustedes, ya sabes, HyukJae y tú

*Yaoi* Lost in desire [Eunhae] [Yewook][Super Junior]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora