Se separó de mi y fué al baño, sin pronunciar palabra alguna. Enojada, me acosté, aunque no podía dormir, pensando en el hecho de su repentino acto. Sentí que abrían la puerta, me hice la dormida y escuché su inconfundible voz:
-Bebé, se que estás despierta, te conozco, fuí a buscar unas cosas
-No estoy despierta -Estúpida, estúpida, estúpida!
Río y me alzó como si fuera una pluma, este chico tenía una fuerza increíble
-Pequeña traviesa -Rió
Sin esperar nada, lo besé con lujuria, queriendo más; Su sorpresa se notó, aunque me siguió el beso, explorando con su lengua mi cabidad bucal
Se separó de mí un poco sólo para acostarme en la cama, fué y cerró la puerta con llavé, se giró, sonrió maliciosamente y se acercó a mí para comenzar a besarme. Nos separamos por falta de aire, en un acto rápido me giré quedandon yo arriba de él. Con mis dientes subí su polerón hasta su pecho y se lo saqué completamente con mis manos. En un ágil movimiento dió la vuelta y se apolló en sus codos para no aplastarme
-No me vas a aplastar -Busqué con la mirada sus ojos verdes y le sonreí
-Te voy a aplastar Martina, yo sé lo que te digo
-Prueba -Me sonrió y se soltó. OK si era pesado. Muy pesado
-Ok... s-i.. sos-sostent..e -Mi voz salió entrecortada y luego reí junto con él
-Te lo dije -Me comenzo a besar apasionadamente, y me saco el buzo junto con la sudadera. Excitada le desabroché el pantalón y lo bajé hasta sus tobillos. Él se lo quitó completamente. Tomé sus manos y las coloqué en mis shorts, los sacó mientras yo le quitaba su sudadera. Fué dejando besos húmedos en mi cuerpo y mordió levemente el lóbulo de mi oreja, se me escapó un gemido. Sentí su erección en mi vientre
-Jerry está despierto y quiere comer
Sus manos vagaron por mi cuerpo mientras dejaba un caminito de besos desde el cuello hasta mi vientre. En un abrir y cerrar de ojos, él ya me estaba desabrochando el sostén. Me acerqué a él lo suficiente como para sentir su respiración mezclada con la mía, lo besé salvajemente, y sentí el ruido de el sostén cayendo en alguna parte de la habitación. Se separó y comenzó a lamer mis pechos, me pellizcó el pezón derecho y yo gemí. Él estaba arrodillado frente a mí, succionando mis pezones. Enrollé mis piernas en su cintura y con los pies le quite el bóxer, se los terminé de sacar con las manos; sentí su erección en mis piernas, dí la vuelta y quedé arriba, me saqué apurada mi tanga negra, rocé nuestros miembros y gimió bajito, empezé a masajear su entrepierna y repartí besos húmedos en su estómago y abdomen
-Me vuelves loco -Su voz sonaba jadeante y excitante. Perfecto
-Haz..me tuya Jorge -Gemía
Se dió vuelta ágilmente, gemimos juntos y me penetro suave, lento, hermoso
-Más rápido -Pedí
Sus embestidas esta vez fueron más fuertes y rápidas, estábamos por llegar al orgasmo, y lo quería, lo quería como a nada en este momento
-Grita mi nombre Martina! -
-Jorge! -No pensaba con claridad, eso había sido un susurro
-GRITA!
-Jorge! -Gemí, ya llegaba- JORGE!
Un orgasmo son inundó y sentí placer, mucho placer, fué perfecto. Juntó sus labios con los míos y salió fuera de mi interior
-Usaste protección -Susurré cansada
-Sí...
Luego de eso me apoyé en su pecho y me dormí
