Capítulo 7: "Da Mun es una amenaza".

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El vuelo fue un poco largo, detesto los viajes. Permanecer tanto tiempo sentada es un martirio para mi.

- Ash.- Intenté acomodarme en el asiento pero me fue imposible encontrar una buena posición.- ¡Oh!

- ¿Qué pasó?.- Me pregunta Sunny.

- Me olvidé de Hyu Jae.

- ¿Hyu Jae?, ¿Quien es Hyu Jae?.- Lo medita y me responde exaltada.- ¿Park Hyu Jae?... ¿La chica rara de la escuela?.

- Mm.- Asentí.- No le dije del viaje. Ña, de seguro debe estar muy ocupada como para preocuparse de mi.

- Mejor duerme.- Fue lo último que escuché de Sunny, luego me dormí.

Finalmente llegamos a destino, bajamos del avión y nos dedicamos a buscar nuestras maletas. Las tomamos, salimos del aeropuerto, afuera nos estaba esperando un vehículo oscuro.

- ¿Qué estás haciendo ahí parada?, ¡Vamos!.- Sunny me ordenó mientras se adelantaba a abrir la cajuela del auto.

Reaccioné, hize lo mismo que ella, y me subí al auto. Casi me desmayé al ver que era mamá. Se apresuró a abrazarme y agradecerme, falsamente dije que estaba bien.

- No hay problema mamá, es... está bien.- El nerviosismo había invadido completamente mi cuerpo.

- Ahora estamos todos juntos.- Nos volvió a abrazar a ambas esta vez, y luego hizo una seña al chofer para que avanzara.

Había olvidado completamente que mis padres eran millonarios, lo que significaba que yo también lo era... o mejor dicho, lo fui.

Entramos a un condominio algo campestre y absolutamente verde.

- ¡Woah!.- Dijo Sunny asombrada por tanta belleza.- ¿Y esa es nuestra casa?.- Apuntó a la gigantesca mansión que se divisaba a la distancia.

- Mm.- Asintió mamá.- Espero que estén cómodos hospedandose aquí.- Rió ingenuamente. Nuevamente actuaba como agocéntrica.

- ¡Por supuesto que sí!.- Me miró un tanto extrañada.- ¿No te gusta?.

Yo me encontraba de brazos cruzados, sentada a un lado de la ventana izquierda. Sunny me empujó y me llevó hacia su ventana.

- ¡Yah!.- Le grité molesta, me zafé de su agarre y volví a mi antigua posición.

- La pequeña Jung Sub no a cambiado.- Dijo mi madre un tanto molesta, y con una pizca de ironía. La miré enfadada por su comentario.

- Que más vas a esperar, yo ni siquiera quería venir.- Perdí todo contacto visual con ella.

- ¿No querías venir?.- Se comportó igual que yo, cruzó sus brazos y miró por la ventana de Sunny.

- No.

- ¡Oigan oigan!, ¡No peleen ahora!.- Luego se dirigió a mamá.- ¡Deberías estar contenta de tener a Jung Sub aquí!, ¡Fue difícil traerla!.- Le gritó.

- ¡Tú mocosa!.- Gritó con furia mamá.- ¡Te va a ir ma...!.- Ella la ignoró completamente colocando su mano izquierda en frente de su cara.

- Yo ya soy adulta.- Me miró.- Ambas somos adultas... nos vuelves a hablar de esa manera, y me llevó a Jung Sub de vuelta a Seúl.- Hubo un silencio aterrador muy largo.

Finalmente llegamos a la mansión, el mayordomo nos ayudó con las maletas.

- No gracias, puedo llevarla yo misma... no es tan pesada.- Levanté la maleta con una fuerza impresionante y subí la escalera hasta llegar al segundo piso.

"Siempre juntos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora