6. Ten cuidado con tu pollo Haley.

59 7 49
                                    

Me levanté por la mañana, ni miré la hora pero no había nadie en la habitación algo me decía que llegaba tarde, muy tarde, pero lo último que quería era ir a clases, estaba deseando que todo fuera una pesadilla, esperaba que en el chisme muggle que me había regalado Alice estuviera el tipico mensaje de buenos días que nos mandabamos, pero nada en este chisme aqueroso no había ningún mensaje. No me acuerdo de como se llamaba, era telef...algo nunca conseguía acordarme, me lo dio antes de las Navidades para mantener el contacto y en Hogwarts solo lo usábamos para mandarnos mensajes y para escuchar esa música muggle que también me había enseñado ella.

Estuve buscando mi capa durante venticinco minutos, sin exagerar, hasta que me di cuenta de que me dormí con ella puesta, salí corriendo con mi chisme muggle por si Alice me ponía algo y mire la hora, joder era la de la comida, me había perdido bastantes clases.

Sin darle mucha más importancia bajé las escaleras hacía el gran comedor, tenia hambre, no había comido nada en bastantes horas y eso empezaba a notarse, de un segundo a otro note como unos finos brazos me rodeaban.

-¡Lo conseguí! Te abracé- celebraba Haley como si fuera el mejor logro del mundo.

-Enhorabuena- No tenía ganas de esto, bueno de nada en general, solo quería ir a comer y pasarme el día en la sala común, me la sudaba ya saltarme las últimas clases que me quedaban.

Entre en el gran Comedor y me dirigí hacía la mesa de Gryffindor, hasta que me di cuenta de que Alice no me estaría esperando ahí, siempre me saltaba las reglas de las mesas y me sentaba en la suya, joder de vuelta a la de Slytherin, me senté sin gana alguna de comer, mientras observaba como Derek se sentaba al lado de Alice y ambos sonreían, desconocía las razones por las cuales Derek se había ido de Hogwarts, pero no entiendo porque ahora decidía volver y no solo eso, porque con su vuelta Alice decidía dejarme por él.

-A si que eso pasa, Alice...- Alex debería llevar un rato a mi lado viendo como miraba al gilipollas de Harry Potter de Derek tonteando con Alice.

-Vete a tomar por culo Casper- Joder hoy todos querían tocarme la moral ¿O como va el asunto?

-Venga ya Dae, tampoco te pongas así, sólo está pasando un tiempo con Derek hace tiempo que no se ven- Alex intentando buscar el puto lado positivo a cosas que no las hay como siempre.

-Derek me dijo que no me acercará a su novia, Alex ¿no lo pillas? Ya no estamos juntos- Me estaba calentando y no era una buena idea, iba a acabar mal.

-Dae, creo que estas exagerando yo...- No le deje terminar.

-¿Tu que, Alex? ¡Aún no has visto que Alice me ha dejado por el gilipollas de Derek, pues abre los ojos!- se me había escuchado por todo el comedor, todos me miraban y por si no era poco el extruendo justo después de darle un golpe a la mesa salí como una bestia del gran Comedor.

Salí fuera de Hogwarts, necesitaba aire y ya había hecho suficiente el ridículo, ahora todos sabrían que Alice me había dejado, genial, maravilloso, que puta mierda todo.

{···}

Estaba tumbado en el suelo, fumando algo a lo que los muggles llamaban cigarro, no quería que nadie me molestara y parecía que si antes hablaba antes aparecía alguien. 

-Dae ¿Estas fumando? ¿Que es eso?- abrí un ojo y me encontré otros dos ojos verdes puestos en mi cigarro.

-Se llama cigarro, Haley no quiero hablar con nadie por favor vete- cuando termine de decirlo cerré el ojo que tenía abierto y le di otra calada.

-Mijo me he enterado de lo que ha pasado ¿Estás llorando?- noté como se tumbó a mi lado.

-Estoy bien y no lloro ¿vale?- ya le había dicho que quería estar sólo joder.

-Ya, ya- notaba como se acercaba a mi para abrazarme lentamente, yo seguía fumando como si esto no fuera conmigo.

-Que es abuela- Me levanté dejando a Haley tumbada, aplasté la punta de mi cigarro con los dedos haciendo que se apagará y lo tiré.

-Ya veo que por lo menos los chistes malos no se te han ido- se sentó en el suelo estirándome su mano para que le ayudara a levantarse y eso hice.

-Veo que tu no vas a parar de darme la brasa ¿Damos una vuelta?- sabía que Haley iba a seguir insistiendo hasta que le contará toda la versión de los hechos o hasta que estuviera mejor, que no iba a pasar nada de las dos cosas, pero prefería tenerla despistada.

Estuvimos andando a lo largo de los patios de Hogwarts, cambié de tema todo el tiempo posible para que Haley no me lo recordara una y otra vez, estuvimos bastante agusto hasta que pasamos delante de tres o cuatro chavales con cara de mala leche.

-¿Que miráis?- saltó uno en cuanto se dio cuenta de que Haley y yo les mirábamos.

-Calma chaval, no quiero problemas contigo- Agarré a Haley de la mano y me la llevé de ahí, lo último que quería eran más discusiones.

-Eso correr, ¡Por que iba a coger a vuestro pollo le iba a arrancar la cabeza con la boca y después la iba a masticar!- No supimos cuál de todos acababa de decir eso, lo que si sabíamos es que era la mayor estupidez del mundo, pero había conseguido hacerme reír.

-Conseguí que te rieras, ves si no hubiera venido estarías fumando esa cosa ahí todo amargado, me debes algo, ¡Quiero chocolate!- me replicaba mientras se ponía de puntillas golpeandome la mejilla con el dedo.

-Creo que tengo una rana de chocolate, quédate aquí ahora vuelvo- y salí corriendo hacía mi habitación.

Cuando estaba volviendo de mi habitación con la rana de chocolate le vi, Alice iba sola por las escaleras, me iba a acercar cuando me di cuenta de que no estaba sola, Derek estaba abajo en la escaleras, observando como bajaba, ese solía ser yo, el que se quedaba embobado esperándola y ahí lo pensé, no iba a perder sin luchar, empecé a correr hacia Alice y en cuanto le alcancé me puse delante y la besé, fue sin pensarlo y lo único que recibí fue un empujón.

-¡No Daemon! Fuera- y bajo corriendo hacia Derek, para rogarle que le perdonara y decirle que era culpa mía, ya estaba ahora si que todo estaba aún más claro que antes.

Bajé hacía donde estaba Haley y seguía esperándome en cuanto me vio corrió a por la rana de chocolate que llevaba en la mano, yo sólo levanté el brazo y ella empezó a saltar para alcanzarla.

-¡DEIMON! Dame mi rana jo- parecía una niña pequeña.

-Haley creo que necesito más el chocolate que tu- y le empecé a contar todo lo ocurrido con Alice y Derek. 

Mi vida tras el andén 9¾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora