Cap 3-- Un lío tremendo

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Los chicos que están al lado suyo, entre ellos hay uno que se llama Carl.
Otro que es demasiado bueno. ¿Cómo se llamaba ese? ¿Cómo podía averiguarlo?
¡El formulario! Quizá aún no lo hayan entregado...
Miriam suspira. Suspira de nuevo. ¿Y si aquellos dos son Carl y Rubén? ¿Podría pasar?
Sale de su habitación y camina. Camina hasta la habitación 542. ¿Estaban dormidos aún? Son las  9:43 am. Debería. ¿O no?
Iba a llamar, pero no tiene valentía. Se queda ahi plantada, con la mano apoyada en la puerta, sin saber qué hacer. No era buena idea, desde luego que no.
Un "click" se oyó y la puerta se abrió de golpe. Miriam cayó hacia delante chocando con alguien.

"¡Ay!"

Miriam alzó la cabeza y vió que era Carl, que según ella, debía de serlo, ya que el otro era de ojos verdes.

"¡L-lo siento!" Se disculpó ella apartándose de él. El chico, sin embargo, estaba muy divertido con lo que acababa de suceder.

"Con que no solo ne miras, hasta me espías, ¿eh?" Se burló Carl.

"No, te equivocas."

"¿Y entonces qué haces aquí?"

En este momento apareció Rubén por detrás.

"¿Qué pasa, bro?" Pregunta ignorando a la chica.

"Ésta es la chica de la que te hablé ayer. Me miraba fijamente cuando salía del ascensor. ¡Y ahora resulta que nos espía!"

Rubén miró de reojo a Miriam. Estaba guapa. Tenía el pelo suelto, que le llegaba hasta los hombros y llevaba una camiseta púrpura acompañado de una mini-falda.

"Pues ella también es la que nos llevó la cena y el formulario." Aclaró Rubén apartando la vista.

"¿Ah, sí?"

"Sí..." se dirigió a la muchacha. "¿Qué querías?

"Em...esto, venía a recoger el formulario, ya que mi amiga la necesitaba ahora... Iba a llamar, pero casualmente, él abrió la puerta..." Explicó ella mirando su regazo.

"Ah, ya veo." Dijo entrando de nuevo. Cogió el formulario y se lo entregó.  "Y tú, Carl, no te hagas ilusiones porque es extraño que ella se fije en ti."

"¡Todo es posible, Rubén!" Gruñó su amigo dándole una colleja.

"¿Rubén?" Miriam no pudo evitar decirlo. Miró al chico y se fijó en su muñeca. Llevaba una pulsera de plata. "¿Rubén? ¿Tú... eres Rubén?"

"Sí" contestó confuso el chico. "¿Nos conocemos de algo?"

"¡Sí...!" Alzó su muñeca para enseñar la pulsera, pero se lo había olvidado en su apartamento.

Rubén alzó una ceja.

"¿Qué...?"

"Bueno, nada. ¡Déjalo! Supongo que 6 años es mucho tiempo... ¡Seguro que ni siquiera te acordarás de mi nombre!" Dijo cogiendo el formulario con ademán de marcharse.

"Espera."

Miriam se giró de nuevo.

"¿Cómo te llamas?" Rubén estaba muy confuso después de lo que le había dicho.

"Yo..." Miriam no sabía si era mejor decírselo o no. Porque Rubén se llevaría un chasco al ver que no llevaba la pulsera. "Lo siento, me tengo que ir."

"¡Espera...!" Pero ya era demasiado tarde. Se había marchado corriendo.

Carl miró a su compañero.

"¿Tú crees que ella podría ser...?"

"No lo sé."



























PERO PRONTO LO SABRÁ.

***

Hola! Si has leído este capítulo, quería decirte que muchas gracias!!!

Me alegra al saber que hay alguien que aprecia mi trabajo!

Pronto subiré el  siguiente cap.

Por cierto, quería recomendaros un perfil...
--->> fifoma
Gracias!!!














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