Al borde del precipicio

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Varios años más tarde

Comienza en instituto, tanta gente alrededor con tantas ganas de comerse el mundo y yo me siento como un ratón en una ratonera, mientras que la directora daba la bienvenida yo veía a ese grupo de personas de frente a mi haciéndome burlas.

Estaba tan concentrada en los que ellos estaban haciendo que ni me si cuenta que me llamaba la directora para enseñarnos las instalaciones.

Mi primer día y ya empezaba el infierno.

Pasaron las horas y llegó el recreo no conocía a la mayoría de mis compañeros, sólo me quedé sentada en un banco solitario del pasillo, como era de esperar tenían que venir a hacerme una visita, para mi desgracia en estos años de diferencia ellos ha una conseguido más adeptosentre ellos había varios compañeros de mi clase.

Ellos:
- Esta es la ballena azul.
Mis compañeros:
- Hostia, está es mira que bien la vamos a tener controlada en clase a que si.
Me dijo mientras me dio una patada y me agarró por el pelo.

Yo:
-Dejasen por favor no os he hecho nada.

Ellos:
- Existir, te aseguro que haremos lo posible para que dejes de existir y si no lo haces por ti misma lo haremos nosotros no te preocupes.

El que me tenía agarrada por el pelo me empujó al suelo.
Cuando de repente uno de ellos, grito:
- Aguas el jefe de estudios.
Hicieron como si me estuvieran ayudando a buscar algo pero cuando paso me patearon el estómago.

Y se fueron dejándome en el suelo una vez más burlándose y riéndose de mi.

Por la tarde

Por la tarde mi madre me obligó a hacer un recado, y como no debía salir de mi zona de seguridad.
Iba andando por la calle mirando hacia de tras y los lados temerosa de que aparecieran. Al llegar al parque, pensé bueno aquí hay gente no se atreverán hacer nada si me los encuentro, voy cruzando el Par que cuando de repente oigo detrás mía un grito:
-Ballena azul a la vista, Cazarla!

La gente que había allí miraba hacia un lado hacia otro para saber de los he iba el tema, yo intenté acelerar el paso casi corriendo pero ellos iban en bicicleta.
Me rodearon, me empezaron a insultar y a empujar a darme con las ruedas de las bici intentando tirarme al suelo. Para mí sorpresa entre ellos había un chico que se quedó a un lado. Intentando que dejarán de hacer lo que estaban haciendo diciendo:
- Oye creo que ya os estáis pasando ya nos hemos divertido, dejadla.

Se encargaron con el diciendo que si le gustaban las ballenas iba acabar muy mal, el sólo callo y bajo su cabeza.
Yo intentaba huir aprovechando la distracción pero sin éxito uno de ellos me agarró por la coleta de mi pelo y me tiro al suelo donde me empezaron a escupir todos, ante la atenta mirada de todos lo que por allí pasaban. Una vez se cansaron se fueron y yo fui hacer el recado de mi madre, cuando llegue a mi casa y me vio mi madre sólo me atrevi a decirle que me caí en una fuente.
Me metí en la ducha, donde rompí a llorar sentada en el suelo. Solo me quería morir.

Ese fin de semana

Ese fin de semana se celebraba una váter a con bicicletas donde yonparticipaba desde que era pequeña. Estábamos esperando a que empezará con mi padre hablado con unos amigos suyos mientras las bicis estaban aparcadas muy apartadas de nosotros.
Lo cual aprovecharon para cortar los frenos de mi bici ya que estaban a allí sentados con las litros.

Yo cogí mi bici y ni me percaté de lo que habían hecho, haya que llegó la hora de la carrera, todo iba bien hasta que llegó una bajada de pendiente donde intenté frenar sin éxito y acabe estrellándose contra unas escaleras dándome un buen golpe en la cabeza y ya no recuerdo más hasta después de despertarme 2 meses después de aquello.

Amenazas

Mis días cada vez eran peores, ese día en clase no como el profesor correspondiente pues niño otro de guardia, pues mis queridos compañeros adeptos de ese grupito de gente se sentó detrás mía, mientras que yo intentaba hacer deberes ellos se dedicaron a usarse como corcho, usaban sis compases para pincharle en la espalda, me cansé me dolía mucho y sangraba.

Me levanté:
- Sois gilipollas, dejadme ya en paz joder que no he hecho nada.
Profesor:
- ¿Pero que pasa? No grite así no quieres una falta grave.
Le dije lo que estaba haciendo y que si un hacer algo al respeto.
Profesor:
-Yo no he visto nada.
Yo:
- ¿Y esto que es? Le enseñe mi espalda y no dijo nada
- Estoy harta me voy a dirección.
Profesor:
-Si sales por esa puerta te pondré la falta grave.
Yo:
- Ponía ya por que me voy, salí de allí dando un portazo baje las escaleras h busque al jefe de estudios pero estaba dando clase, me atendió la directora.

Le conté lo que me había pasado y sólo me dijo estás palabras:
- Los chivatos no son buenos, defiendete por que on cosas de niños.

Como me iba a defender yo sola de 10 persona.

No quise subir a clase me quedé en un banco fuera del Instituto, a la hora del recreo me vio aquel chico que me intento defender en el parque se sentó a mi lado y yo me aparte con miedo.

El:
- No, no te apartes, deja de llorar nose por que te hacen todo esto ya no es divertido.

Yo desconfiaba de el.

El:
- Entiendo que desconfíes de mi despues de todo yo tambien te he hecho daño, lo siento, empezamos de nuevo, me llamo Adrián y me uni a ese grupo por miedo a que me hicieran lo mismo que a ti por ser gay.

Intento limpiar mis lágrimas, pero aparte la cara.

El:
- Yo te defenderé, seamos amigos. Y me tendió su mano. Nose porque pero en ese momento algo me dijo desde dentro dale la mano. Y se la di. Me estuvo consolando, cuando de nuevo aparecieron ellos.
Se encargaron con el:
- ¿Que haces con la Ballena?
Adrian:
- No la llames así, e iros a otros sitio dejarla en paz ya.
Ellos:
- Jajaja , ahora si te compadeces de ella si sólo es una gorda inmunda, si no quieres acabar mal mejor dale dos hostias y vámonos.

Adrián se negó por completo.

Ellos se encargaron conmigo:
- Ballena sabes que por tu culpa tu nuevo amiguito y tu familia van a tener problemas, no haberte chocado gorila de mierda ahora si que has abierto la veda.

Se fueron riéndose.

Las 14:30

Por fin, llegó la hora de irse, llegue a casa no como nada en todo el dia, a la noche me metí a la ducha y en mi cabeza no dejaba de resonar la amenaza... no quería que nadie sufrieran por mi y quería acabar con todo salí, cogí un kuter que había bajo el lavabo de el baño y me intenté suicidar pero mi madre me encontró, a cuando había empezado a desangrarme.

Ahí empezaron los tratamientos psicológicos, pastillas que me hacían dormir y otras que me hacían espabilar.

Caí en una depresión muy grave. Adrián venía a verme casi cada día.

Poco a poco el se fue haciendo imprescindible para mi y yo para el sólo nos teníamos los dos.
El único que sabía todo lo que pasaba.

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⏰ Última actualización: Dec 09, 2017 ⏰

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Diario de una víctima de bullyingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora