❛ ི CRIMEN PERFECTO: PURGA | [MULTIKPOP] « ⇙

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Seúl, Corea del sur
A una semana de la Purga Anual

Todos los años me recuerdo a mí mismo qué debo aguantar, ser fuerte y dar lo mejor de mí en todo lo que haga, incluso si eso requiere un gran esfuerzo.

Es irónico el hecho de que, tal vez, el hacerlo puede costar la vida. Pero no de la manera en la que suena, no, en una manera más personal, quizás no se lleve la vida física pero se llevará gran parte de la personal.

¿Qué estoy diciendo? Después de todo, eso es lo que menos debe de importar ahora.

El hecho es que, nuevamente, me enfrento a un infierno. 

Toda mi vida ha sido uno, si analizamos las cosas detalladamente. Pero ahora, ese infierno se desató y está a punto de quemarme con sus ardientes llamas. 

Sobrevivir a la Purga siendo pobre es más difícil de lo que parece, y las cosas empeoran cuando tienes dos vidas que caen lentamente sobre tus hombros. El peso de cargar con la vida de mi hermano menor y la de mi madre llegar a ser sofocante, pero me tranquilizo a mí mismo asegurandome que llegará el día en el que podré descansar. 

Sin embargo, ese día parece cada vez más lejano. 

—¿Sabes, Min? Hoy me siento la persona más poderosa del universo. — La voz de Jackson logró sacarme de mis pensamientos, atrayendome nuevamente a la realidad de la cual esperaba escapar. 

Reí. — ¿Acaso te casaste con alguna hija de los nuevos Padres de la Patria? 

—Quizás. — Me miró con una sonrisa torcida en el rostro, exhaló y continuó hablando —. No he llegado hasta ese punto, tal vez un día de estos lo logre. Pero ahora lo que importa no está alejado de la realidad, saldré a depurar.

Sus palabras me tomaron por sorpresa y dejé caer el control remoto que reposaba en mis piernas al levantarme del sillón. —¿Te has escuchado a ti mismo? 

Su sonrisa desapareció.

—¿Qué si me he escuchado? Demonios, sí lo he hecho. Pero esta es la única oportunidad que tengo de cambiar esta miserable vida que me tocó. Todos los malditos días me pregunto cómo fue que sobreviví a la anterior purga y cómo sobreviviré a la que viene. ¿Acaso me negarás que tú también lo haces?

  Él me miró, retandome. No podía negarlo, claro está. Jackson no cargaba el peso de la vida de su familia, sin embargo se preocupaba lo suficiente por la suya como para querer seguir respirando un día más. 

—No puedo negarlo, pero, ¿Te has sentado a analizar cómo te defenderás de aquellas personas? Tú más que nadie sabes que los ricos buscan a gente como nosotros para "liberar su alma".

Él había perdido a su familia en una purga, de hace dos años, a manos de aquellas personas que jugaban a ser Dios.

—Lo tengo todo planeado, ¿Está bien? No tienes que preocuparte por mí, tienes suficiente con tu familia. Está claro que es por ellos que te levantas. Tu miserable vida no te importa, ¿Cierto?

Él me conocía demasiado bien. Sin embargo, no sabía que últimamente yo había empezado a tomar en consideración mi propia vida.

Me quedé callado, dejando que el silencio inundase la habitación. Cuando sentí que no había nada de lo que hablar, caminé hacia la salida con pasos pesados.

—Entonces, has lo que se te venga en gana, Jackson, eres experto en hacerte el imbécil de oídos sordos. —  Y con esto, salí de aquella casa que probablemente no volvería a visitar.

Caminar por las calles de Seúl cuando falta una semana para la Purga anual es un verdadero reto.

La gente se enloquece, como si la estuvieran viviendo en ese preciso momento.

Las calles se inundan de vendedores ambulantes con todo tipo de mascaras terrorificas mientras gritan a los cuatro vientos que este es el halloween de los adultos.

Otras ofrecen sus servicios alquilando una especie de "local" donde, según ellos alegaban, podrían mantenerse a salvo. A pesar de que todo el mundo sabía que esas cosas no eran seguras, aun había gente a la que le gustaba probar al destino y confiar sus vidas en una casa chatarra.

Yo ya había comprobado más de una vez lo mierda que podía llegar a ser el destino. Mi vida había estado plagada de todos aquellos malos recuerdos que me inundan lentamente.

 —¡Min Yoongi! — Una voz femenina logró sacarme de todos mis pensamientos y me volteé lentamente, para quedar en frente de Suran, quién me miraba sonriente.

—Pareces una psicópata sonriendo así, ¿Qué pasa, eh? —Ella rodó sus ojos y dejó de sonreír, haciendo que sus pequeños ojos volviesen a la normalidad. Ahora su rostro se había transformado, ocultando todo el rastro de una posible sonrisa.

—Pasado mañana mis padres no estarán, ellos se irán del país por unos días, pero no me llevarán consigo, así que, pensé que tal vez podrías ir con tu familia y pasar ahí la Purga. 

Suran es hija de una familia de ricos, de aquellos que tienen la vida resuelta y la Purga solo les parece un pretexto para generar mayores ingresos. Sin embargo, ella parecía ser la oveja negra de la familia, negándose a depurar y a ofrecerle su ayuda a gente como yo en el día de las Bestias. Aún así, ella nunca antes se había ofrecido a ayudarme a mí y a mi familia, por lo cual, las palabras que salieron de su boca me hicieron soltar una carcajada sarcástica.

—Estoy hablando en serio.

—No lo sé, me persigues, vienes y me ofreces ayuda durante la Purga Anual después de haberme ignorado por tres meses enteros. ¿Qué se supone que debo pensar yo, entonces? 

—Tienes que pensar en tu familia, Min. Pensé que la seguridad de ellos estaba por encima de la tuya. —Me miró expectante, aunque por dentro sabía que mi respuesta sería sí, ella quería verse lo más inocente y convincente posible. Aunque no depurase, ella seguía teniendo la sangre de su familia y el dinero amontonado en su cabeza. 

—Te veré a las siete, entonces.

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AJSJA I'M BACK.

Bueno, decidí por fin continuar con la historia, como verán. 

Y, además, he decidido cambiarla, Ahr, ahora no será BTSxBLACKPINK si no que contendrá grupos de Kpop en general. 

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