Egoista║George Shelley

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-Salí de la casa principal para poder alejarme de ese niño bonito de ciudad, tenía razón en lo que dije, era un niñito de papa, malcriado y egoísta, aparte de muchas cosas más. Pero no sé cómo no puede parecerse a su padre, el señor James será un empresario muy ocupado, pero el se crió en el campo y sabe lo que es mantener las estancias Shelley en movimiento, gracias a eso somos los mejores en todo.

-El establo estaba vacío por hoy (Josh seguro que se los llevo para pastar, debe tener cuidado, hay veces que los pura sangre son un poco salvajes. Pero aun así, Crow (lo puse así por ser tan negro como un cuervo) seguía siendo un salvaje incontable, solo por mi, recuerdo el día en que lo encontré herido en el bosque, me había salvado la vida y yo le devolví el favor de cuidarlo día a día, con el rotundo apruebo del señor James, a cambio debí entrenarlo desde pequeño. Desde ese día se convirtió en el caballo mas querido por todos, pero una fiera incontable, me han ofreció millones por el, pero nunca se lo venderé a nadie.

-Crow- rechino suavemente y se adelanto para que lo acaricie- ¿otra vez has abierto la puerta tu solo travieso?

-El solo quería caricias, así que tome el cepillo y lo utilice suavemente, el solo resoplaba de felicidad, amaba ese sonido, pero no tanto como el viento en mi pelo cuando lo montaba en las colinas al amanecer. Estábamos felices los dos hablando plácidamente, cuando de pronto sentí que alguien entraba de golpe y eso hiso que Crow se pusiera nervioso, por suerte lo calme.

-Así que aquí estabas- se acerco a una distancia razonable, lo mas raro en que Crow odia a los extraños, pero estaba calmado y muy feliz- hermoso potro, no creo que sea tuyo

-A pues que adivinas ahora- le dije mientras lo acariciaba suavemente- es solo mío, ¿A que has venido?

-Por una respuesta- se acerco mucho y Crow se alejo tranquilo, yo lo solté involuntariamente y George lo aprovecho- ¿Qué andas diciendo de mi?

-¿Hace falta que lo diga?- me le enfrente.

-Depende que quieras decir- sentía su mirada fija y su cuerpo demasiado cerca para mi gusto, lo interpuse con las manos, ¿Qué me pasaba? ¿Por qué estoy nerviosa?

-Creo que quiero decir esto