Geminis 0.0

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"Él amor no te ata, el amor es eso que te libera"

Tenía 14 años la primera vez que lo besó, él era mayor que ella, sabía a Vodka y limón, las pequeñas cuarteaduras de sus labios ardieron, Leo le correspondió el beso, pero sin mas se levantó a bailar entre las luces y la música.

Ella se quedó sentada en la barra con la corbata en las manos, la miró, ¿Porqué un chico que cumplía 16 ese dia llevaba una corbata?

Geminís no tenía ni idea de la mayoría de las razones de Leo, pero no le importaba, había estado enamorada de él desde que tenía memoria, su sonrisa altiva, su elegancia, su carisma, todo, todo de él le volvía loca y por fin había logrado besarlo, por fin, no importaba lo que sucediera el resto de la noche, ella siempre atesoraría ese momento y sin importar cuanto bebió esa noche el sabor de Leo no se borró de su boca.

Asi...sucedía siempre, besos caricias y después desaparecer.

La primera vez que durmieron juntos fue igual, no hubo penas, vergüenza o miedo, se conocían desde hace tanto que fue algo casi natural, sin remordimientos o rencores, pero tambíen sin cariño, sin acurrucarse en la cama, a Géminis le parecía genial, un cuento de hadas y libertad, ¿Que iba ella a saber? Solo tenía 16.

Géminis era feliz, o eso creía, Leo comenzaba a cambiar y algo dentro de ella tambíen lo hacía, de pronto las fiestas hasta el amanecer, los litros de alcohol y el sexo dejaron de ser tan divertidos, Leo parecía distante, solitario, era tan confuso, lo que siempre le había encantado a Géminis ahora le causaba dolor, cuándo ella coqueteaba con otro Leo se enfurecía pero cuándo estaba con ella parecía estar en otro lugar.

Géminis sintió miedo, mucho miedo, las cosas se le escurrían como agua entre los dedos, los meses pasaban y las cosas emperaban, comenzaba a tener pesadillas y le daba miedo hablar con Carpricornio, de pronto se sintió atrapada, sola, asfixiada, no lograba comorender nada, no quería a Leo con ella, le dolía, pero la idea de perderlo le quitaba el aliento, la idea de verlo con otra, que pudiese darle lo que ella no le acosaba, la volvía loca.

Ellos no eran nada, siempre tuvieron una relación abierta, libre, hermosa,  es por eso que Géminis no lograba comprender porqué se sentía tan atrapada, pero, cuando cumplió 19 lo entendió todo.

Nunca se había considerado perfecta, tampoco alguien avasalladoramente hermosa o fuerte, pero, cada que él la miraba sentía como si pudiese ella sola contra el mundo, como si todo lo que hubiese en él le perteneciera, cuando su manos rosaban su piel podía sentir la energía del mundo fluyendo en ella, causándole escalofríos.

Un día, cuando dejó de llorar, encontró en su alma la pasión y el anhelo que creía haber perdido, él multiplicó sus sonrisas y colmó su corazón de cariño, la sed de amor que jamás supo que tenía, la soledad se borró junto con cualquiér inseguridad en ella, ella era su numero uno y no había ningún numero más.

- Géminis - Le dijo la vez que supo que lo que sentía era amor - Yo te amo - La tomó de la mano y la miró a los ojos - Yo te amo, y eso no tiene nada que ver contigo, no es tu responsabilidad ni estoy pidiendo nada de ti, yo simplemente te amo, amo la forma en que eres, amo la pasión con la que haces las cosas, el como todo es mejor si estás ahi, amo la forma en la que recoges tu cabello en una cola de caballo en la mañana, amo el olor de tu cuello y el como te revisas cada defecto del cuerpo en el espejo cuando crees que nadie te ve, me encanta como escuchas canciones viejas, amo que jamás te das importancia incluso cuando eres lo mas importante, amo como luces, como te mueves y cada cosa que haces, amo como aceptas tus errores y como sigues avanzando a pesar de todos - La besó levemente en los labios - Géminis, amo cada segundo que paso contigo, pero, incluso si tu deseas irte de mi lado seguiré amando esa alma hermosa que tienes,  sin importar a donde vayas o lo que hagas, jamás olvidaré el amor que siento por ti, este que me quema por dentro, y si escoges a otro hombre en otro lugar del mundo, solo una cosa te pigo Gem, júrame que no aceptarás un amor menos grande que el mío, debes buscar a alguien que te vea de la misma manera que yo, que ame cada parte que odias de ti y que prefiera verte feliz que verte con él - La abrazó y metió los dedos en su cabello, Géminis comenzó a llorar incontrolablemente mientras Acuario se arrodillaba con algunas lágrimas también.

- Tienes que estar bromeando - Dijo ella entre sollosos cuando Acuario sacó un anillo y se lo ofreció.

- ¿Te quedas conmigo? - Le preguntó con una sonrisa mientras le ponía el anillo.

- ¡Pero no he respondido nada todavía! - Se quejó ella anonadada.

- Incluso si dices que no, quiero que lo tengas, es tuyo, cuando lo veas, estés donde estés, quiero que sepas que hay un hombre que te ama infinitamente y que estará orgulloso de cualquier cosa que hagas, si te conviertes en empresaria, escritora, locutora, doctora, documentalista,  en esposa o madre, siempre pensaré en ti, y buscaré tu felicidad, incluso seré el padrino de tus hijos, seré lo que quieras que sea, me basta lo que sea de ti, incluso un adiós, cualquier cosa que venga de ti, la amaré siempre.

- Vas a ser el padre de mis hijos, no su padrino - Contestó sin pensar, la alegría que sentida de saberse aceptada por completo, de saberse amada a pesar de cualquier defecto le llenaba por completo el corazón, no quedaban vacíos, ni soledad, solo el amor desbordante de acuario le llenaba el alma y cuando se lanzó a sus brazos y lo besó deseó con todas sus fuerzas que el amor que sentía  por él  que ahora también se desbordaba pudiera llenar también los vacíos de acurio y hacerlo tan feliz como lo era ella.

Zodiac ZeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora