La noche las luciernagas danzantes
" adios mamá, nos vemos depues del colegio. Te amo"
Mi corazon latia rapido al igual que mi repitacion, mi pecho subia y bajaba con ritmo. ¿Fue un sueño? O ¿un recuerdo? Hecho un ojeada al entorno de donde me encuentro, en sus paleredes blancas se encontraban cuadros colgados, en sus columnas detalles de oro similares a los que se encontaraba en la chimenea pequeños estantes decorados con libros y otros objetos, una peinadora de marmol que hacia juego la cama donde me encuentro sus sabanas son de una textura suave igual a las almohadas, escucho una lenta y pausada respiracion, giro mi cabeza lentamente mirando en una persona sentada en uno de los muves individuales cerca del gran ventanas que proyectaba los ultimos rayos del día, con cuidado retiro las sabanas que tapaban mi cuerpo y con lentos pasos me acerco, subrostro mostraba tranquilidad adiferencia de unas horas atras, sus mechones caian hasta sus parapados cerrados una de sus manos la tenia en forma de puño y en esta le reposaba la cabeza.
Me quede por unos minutos viendo como sus hombros subian y bajan los rayos del alba se posaban en su cara haciendolo sentir mas tranquilo, por impulso una de mis mano temblorosas aparta unos cuantos mecholles de su cara la aparto rapidamente para observar por ultima vecez su rostro tranquilo, me doy vuelta para caminar en direccion a la puerta con paso firme con el ritmo relajado giro el pomo de la puerta para salir y depronto una gran mano se estreya con la puerta para cerrarla y seguido escucho a èl.
-¿a donde crees que vas?- pregunta, con mi cuerpo congelado por el susto, respondo que me deje ir.
De su garganta brota una risa sin gracia, me doy vuelta reclamando pero en ese momento mi cuerpo se hela al recordar "mi nombre", recuerdo mi nombre y al guardian.
Èl al ver mi rostro, sabia que habia recordado algo- dime lo que sabes del viejo- dijo exigiendo.
-¿por que deberia?- dije furiosa, no sabia lo que habia provocado hasta que me hagaro la muñeca con miedo trate de que me solta pero su cuerpo se iba acercando mas, coloque mi mano libre en su pecho para que mantubiera la distancia, comenzaba a afixiarme. Me reclamo a que le dijera lo que sabia pero me negaba a decirselo a causa de retarlo apretaba mas me muñeca.
-sueltame, me haces daño- quejandome y botando gemidos de dolor, el seguia insistiendo- por favor- le suplique. Su mirada seguia sin mostrar un poco de hulmidad- el guardian murio- lo grite cerrando mis ojos, su agarre se suabiso lentamente aun sin ver podia escuchar sus pisadas alejarse, tome la oportunidad y sali corriendo del cuarto, sin saber donde estaba exactamente, baje escaleras esta encontrarme en un jardin de rosas de distintos colores, ya era de noche y las velas se encendian por arte de magia, por lo menos estaba iluminado aquella parte del jardin donde me encontraba.
Las estrellas se veian como diamantes en un fondo pura oscuridad, la brisa era fresca al igual que el pasto donde reposaban mis piernas, un viento fugas hizo levantar un poco mi falda por consciencia lleve mis manos para acomodar la preda, al alizarla siento un pequeño tumulto en mi bolsillo derecho con curiosidad saco el contenido para examinarlo.
Su textura era aspera, tenia un simbolo extraño al reves de ella y ademas con tinta negra se hacia escrito un nombre en la esquina "una carta" pero ¿que hace una carta en mi bolsillo? Con dificultad me paro y al omiso se escucha a lo lejos una dulce melodia instrumental, debe ser él, observo la carta agnandome a caminar donde provenia la musica. Dure algunos minutos en encontrar aquel lugar, el pasillo se encontraba desolado e iluminado, la musica seguia sonando luchando con el silencio en cada rincon del lugar, el piso reflejaba mi siluta, mi cabello castallo rizado que caía hasta mis hombros y mi uniforme del institulo que estaba conformado por una camisa blanca y encima unos tirantes que bajaban hasta mi cintura enganchandose con mi falda negra.
La puerta blanca estaba entre-abierta y de ella salia luz, mis ojos fueron cegados por aquella luminosa sala adaptandome analiso donde me encontraba, sus paredes estaban adornadas con cuadros imensos y libros; mientras bajo por la escalera alfombrada veo el gran ventanal que hay alfondo de la sala atraves de ella se poede ver las grandes estrellas, mis pies se detubieron al compas de las ultimas notas, su mirada pesada cayo en mi.
- acercate- habla, mi cerebro analisa la situacion, aferro donde estoy sin mover ni un musco escuchando un suspiro por su parte se levanta arrastrando la silla del piano hacia atras y con paso firme de dirige hacia mí por miedo doy un paso atras.
Su figura dominante se encontraba a tres pasos de mi enmarcando su ceja espera a que diga algo pero encambio le respondo con silencio.
-entregamelo- exige, lo escondo detras de mi y asiendome la desentendida le pregunto.
-¿aque te refieres?- pregunto
Irritado, sus movimientos fueron veloces una de sus mano agarro mi cadera acercandome a el y la otra fue directo a la carta, pegando su pecho a mi cara escuchan sus latidos acelerados, con mis dos manos libres me alejo de el empujandolo, distraido el observa la carta y su simbolo, se da la vuelta y camina hacia uno de los muebles.
...
Ya han pasado mas de dos horas y no lo e visto por ningun lado, suspiro irritada viendo las estrellas en el jardin donde me escontraba horas atras, cierro mis ojos cayendo en un profundo sueño.
" camino devuelta a casa con pequeñas gotas resbalando por mis mejilla, los autos pasaban de un lado al otro y depronto un voz familiar me llama por un sendero, llamo por su nombre aquella persona dueña de esa voz y sin pensalo ya me encontraba frente a una puerta vieja en medio de la nada.
-Adelia-me llamo- entra busca al guardian, corre, ve mi pequeña"
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La Biblioteca De Los Sueños (Sin Corregir)
Romansa"Eres la unica llave que podra abrir estos cerrojos, solo tu seras la protectora de este templo sacrado, esta bibliotecas de los sueños"