Adiós

57 2 1
                                    

Si alguna vez me dijiste "Te Amo" en un McDonald's, puedes seguir leyendo.

No sé qué quieres de mí, siempre logras obtener algo. Pero ya no más.

Lograste sacar mi lado más enfermo, me hiciste llorar, patear y gritar. Me hiciste pensar cosas tan horribles, una de esas ideas que hasta da vergüenza pronunciar. Pero, tal vez el psiquiatra tiene razón, hay muchas razones para seguir viviendo:
-Probablemente aún no he conocido al amor de mi vida.
-Probablemente aún no he tenido el día más feliz de mi vida.
-Probablemente no he tenido la borrachera más grande de toda mi vida.
...
Es una lista muy larga, pero ya no estás ahí. Hace mucho que no eres una razón para seguir viviendo.

Odio la idea de ti, o al menos eso creo: babeo, mis mejillas se sonrojan, me pongo muy ansiosa y me dan ganas de vomitar. Dime, ¿eso deberías hacerme sentir? ¿Te parece sano?

Quise guardarte como un bonito recuerdo, pero ni eso me dejas.

Todos me repiten una y otra vez: la cagaste. Lo entendí y me arrepentí, te busqué y me mandaste al carajo. Es suficiente para mí, no me gusta estar con personas que no me necesitan.

Tú no me necesitas, y yo tampoco, entonces, ¿qué haces en mis sueños?

Sabes que no te extraño porque en el momento que lo hice, te convertiste en algo horrible. No sabes cuanto me arrepiento de haberte rogado, no sabía que te ibas a volver así.

¿Qué pretendías con esas niñas estúpidas? Celos no me diste, eran bonitas, pero no te podían ofrecer más que sus nalgas, te conozco y siempre buscas más. Al menos eso hacías.

Sabes que todos me dicen que te arruiné, me culpan de que ahora seas esa bestia egoísta.
Pero sabemos que tú decidiste ser así, te corrompí, pero aún no sales de ahí.

A veces recuerdo tu primer beso, pero no somos Cassie y Sid, más bien terminamos como Effy y Freddy, una loca y el otro muerto. No sabes cuántas veces intento matar lo que pasó. Pero olvido que los recuerdos no se mueren, ni con un cuchillo en las muñecas, ni con exceso de clonazepam.

Fue bonito estar contigo, pero ahora sabemos que ni tú ni yo podemos volver, los dos tenemos que estar dispuestos a evolucionar; cambiar y perdonar. Tal vez en algún momento te des cuenta y en algún momento me sienta bien, tal vez pronto maduremos y dejemos de estar en este estúpido juego, pero por ahora no. No hay ninguna prueba de que los dos estemos dispuestos a hacerlo. No me busques hasta que me necesites. Por ahora ninguno de los dos lo hacemos.

Ah, por cierto, no sabía que creías que te había engañado. Quiero que sepas que nunca lo hice, claro que también me convertí en algo horrible, pero no sería capaz de hacerlo. Tampoco te dejé por otro, no intentes engañarte, tú sabes porqué fue. No estaba lo suficientemente bien para darte mi 100% en ese momento, estaba triste e irritable, y tú eras la clase de persona que se merecía mi 100%. Repito, eras.

Ya tengo a alguien más, así que por favor haz algo para irte. No puedes seguir atormentándome toda una vida. Por favor, vamos a decir adiós. Déjame ir como yo lo hice.

12/diciembre/17

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 13, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cartas que Probablemente Nunca Voy a Enviar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora