Mate (Omegaverse)

Capítulo 1

Marco era un chico de dieciséis años de edad que descubrió que pertenecía a la clase más baja de su sociedad. Era un omega, los médicos no encontraban explicación lógica debido a que él era producto de dos alfas (hombre y mujer). Tenia tres hermanos mayores que él,  todos alfa pura sangre.

Narra Marco.

Desde el momento en el que me di cuenta que era omega me negué a creerlo, pero era la realidad Mí realidad. Mi vida cambió por completo.
Por suerte no estaba en época de clases, pero desde ese mismo día mis padres me obligaron a comenzar un muy duro entrenamiento para así poder ser fuerte. Mis padres parecían no tener problema con el hecho de que sea así, ya que ellos son personas de mucho dinero pagaron a los mejores entrenadores. Tres meses de tortura, pero los resultados fueron efectivos,  la voz de ningún alfa me afectaba, era inmune a todos.

El único problema era mi olor el cual es demasiado fuerte. Según mi madre es como a pastel de chocolate y té de jazmín. 

Tengo tres hermanos Julian y Lucas los cuales son mellizos tiene 22 años y Fabricio  de 18, dejándome a mí como el más chico de la familia.
Por eso y por mi condición todos eran atentos y sobre protectores conmigo.

Con el tiempo me dí cuenta que mi aroma calma a mis hermanos. Por lo que mi padre me contó ellos siempre se sintieron cómodos y relajados al sentir mi aroma tan "particular" según Marcel mi progenitor.

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Era lunes, pero no cualquier lunes, hoy debería volver al instituto al cual asisto con fabricio  que está en su último año.

Podría decirse que tanto mi hermano como yo somos "populares". Pero solo es así por la cantidad de dinero que mi familia posee.

Siempre las mismas caras, los mismos alfas y betas descerebrados, los mismo omega dóciles, sometidos, frágiles y tiernos.
Patético.  Es la palabra exacta para definir el instituto Crowens. El mejor del pueblo se supone.

Al despertar me duché, vestí y arregle para luego ir a desayunar con mi perfecta familia. Mi madre no quería intrusos en su casa por lo cual ella se encargaba de la mayoría de las cosas, algunas veces dividiendo las tareas entre mis hermanos y yo, no me quejo, a decir verdad se me es mas cómodo que no haya mirones en nuestra casa.

Dada las 07:10 Fabri y yo tomamos rumbo al colegio, él se veía realmente entusiasmado. Demoramos unos diez minutos en llegar., y al hacerlo me arrastró consigo a saludar a sus amigos, unos alfas un tanto descerebrados y desagradables en su mayoría.
Al llegar dónde ellos sentí un aroma exquisito que hacía que mi omega se revuelque del placer, pero por suerto eso no era problema para mí, sabía cómo controlar mi lado sumiso de forma olímpica.

- Bueno Fabri ya que has encontrado a tus amigos yo seguiré mi camino y buscare a los míos.

- Okey , y Marco, ten cuidado.- me dijo con un tono de madre sobreprotectora.

Empecé a caminar en dirección a los casilleros para ver si encontraba a mis dos mejores amigos: Tom y andres, ambos alfas.

Antes de emprender la búsqueda decidí ir a mi casillero a dejar algunas cosas.
Mientras estaba cerrando mi casillero siento como alguien me toma de la cintura y me levanta haciéndome girar en el aire, quería golpearlo, no era necesario que me volteara para saber que se trataba de Andy, el siempre fue muy pegajoso como un chicle. En cambio Tom era mas frío y distante.

Ellos eran los únicos que sabía que resulte ser omega.
Mientras forcejeaba para que me bajar, antes de soltarme Andy como siempre tenía que hacer algún comentario incomodo para mí.

- Tu aroma es adictivo- me susurro en el oído provocandome un ligero temblor.

- Ya Andres déjalo en paz- y ahí estaba mi salvador, pero nada dura demasiado-  ahora es mi turno de abrazarlo.

Definitivamente estoy jodido. A Tomy le gusta levantarme sosteniendo me del trasero ya que según ellos era demasiado redondo y suave además de grande, cosa que no podía ser más vergonzosa.

- Tom ya bajame hablo en serio! !.

-NO!! - a pesar de su respuesta me bajo y abrazo de forma normal,  a lo que se sumó Andy. Estábamos tranquilos disfrutando del abrazo hasta que escuchamos un gruñido dirigido a nosotros.
Quien lo había hecho no era nada mas ni nada menos que Samuel Ruiz, uno de los amigos de mi hermanos y novio de la mayor zorra del pueblo Britney.

Hasta aquí el primer capítulo... espero les guste y de ser así les agradecería que le dejen una estrellita o comentario. Gracias desde ya. Tratare de actualizar seguido .😁😘😘
Al ser está mi primer historia tal vez no sea muy buena, pero juro dar todo mi esfuerzo por ir mejorando día a día.