El Secreto De La Tierra

2

Mientras empacaba algo de ropa y algunas pequeñas dagas, Gabriel esperaba recargado en la puerta.

-¿otra vez?, Por una vez escuchala y quedate...

Suspire. Gabriel entro a la habitación, tomo la silla junto a la mesita y se sento...

-ha pasado mucho tiempo, ¿no?

-supongo...

-constantemente haces que me arrepienta de haberte enseñado todo lo que sabes sobre pelear y la espada, preferiria que te quedaras en casa con Emma y Marcus ...

-No podria [volte a mirarlo y sonrei] Realmente no seria feliz encerrada todo el tiempo, además, alguien debe traer dinero a casa[recale].

Gabriel se avergonzo de si mismo, no hace mucho tubo que abandonar la caza debido a una herida que necesitaba sanar.

-Lamento poner esta responsabilidad en tus hombros...

Mire calidamente a aquel hombre y sonrei.

-Padre tonto [rei] No me importa hacer un trabajo pesado, ademas cazar significa nuestro sustento.
Toma esto como vacaciones.

Gabriel se levanto de la silla y salio de la habitación no muy convencido, se detubo un momento.

-almenos no estes fuera tanto tiempo, ¿podrias?

-lo intentare...

Era mentira, cada vez estaba más tiempo fuera, no podía decirle que clase de trabajo hacia realmente, seguro me encerraria de porvida...
La caza era fuente de sustento pero solo por temporadas, dado que los grandes animales empezaban a escacer necesitaba más...
Tome el trabajo que nadie queria, el trabajo que a muchos les daba terror, casi nadie regresaba convida y es que eliminar Bestias era muy complicado.
Lo más importante es no terminar en su estomago.
La paga era vastante atractiva, Emma sospecharia si le diera tanto dinero, por eso siempre que regresaba a casa lo escondía en la habitación de Marcus, ese granuja sabe hacer tratos a su edad...
antes de salir de mi habitación observo mis manos, hay muchas marcas de arañazos, muchas heridas...
Mis manos no son bonitas como las de Emma, pero son fuertes y capaces de manipular la espada correctamente.

-hermana, ¿ya es hora?

Observo al pequeño mocoso entrar a la habitación, su rostro reflejaba tristeza...

-oye, quita esa cara [frunci el ceño] no necesitan a un llorón sabes... [pose mi mano sobre su cabeza y asintio].

-No soy un llorón, es solo que tengo una hermana muy boba.

Valla!, si que le di tremenda paliza por esas palabras...

-tonta, solo vuelve a casa pronto, algún dia sere yo el que haga estos trabajos.

-Mocoso, para que hagas estos trabajos falta mucho, solo cuida de ellos hasta mi regreso...

Emma estaba hecha humo, no hacia algo que le agradara,  tenia razón.
Muy indignada me entregaba una pequeña bolsa con proviciones.

-pequeña, si que seras... [comenzo a llorar]

-Pronto tendran noticias [sonrei] y Madre, cuide a estos inutiles en mi ausencia...

Todos reimos por un momento. No volveria en un tiempo y ellos lo sabian.
Un dia demaciado Gris en mi memoria...