Estaba irritada, Antoni se burlaba de mi comportamiento cuando se trataba del hijo del mercenario.
Lucia sonreia mientras emanaba un aura de muerte, saco de la habitación al bufón de su marido.
Una vez que Lucia saco  a Antoni me observo de pies a cabeza, indecisa de sus palabras.

-Eiren, Gabriel vino hacia unos dias [Lucia no sabia si continuar hablando].

-¿El viejo estubo aqui?, maldición, seguro se entero! [Exclame nerviosa y dramatizando].

Lucia cruzo los brazos.

-No se ha enterado, puedes tranquilizarte [suspiro].

Me quede como idiota pensando, en que el viejo no vendria si no tubiera una petición, no podia trabajar aun y jamas venia de visita...

-¿Acaso el viejo pidio algo?

Lucia reia con gracía mientras asentia.

-Sobre eso, no te preocupes. Te contare de ello en tu regreso.

-sobre el hijo del mercenario...[las palabras salian de mi boca sin pensarlo].
Lucia no me dejo terminar.

-¿Han pasado 5 años no?,[dijo] desde la ultima vez que lo viste, ese chico se convirtio en un cazador antes que tu.
¿podria ser que el te motivo a este tipo de trabajo? [Los ojos de Lucia resplandecian demaciado].

¡Maldicion! Lucia lo sabia todo, no se le escapaba ni un solo detalle.
Mis palabras solo se atoraban en mi garganta y la cara se me coloreo del rojo mas vivo posible. Esa mujer solo empezo a reir burlonamente. Se aclaro la garganta y prosiguio hablando.

-¿ La razon por la que deseas tanto ser reconocida no es por Gabriel cierto?[expreso con una sonriza maliciosa]

Si,  esa era la verdad.
No me converti en cazadora para ser reconocida por el viejo, lo hise por que queria que Daniel me reconociera.
Si, Daniel era el hijo del mercenario, aquel niño que me salvo.
El era la razón de mi rutina diaria.
Deseaba profundamente ser recomocida por el. Pero hacia años que no tenia noticas suyas.

-¿es muy obvio? [Respondi]

-No debes avergonzarte de tus sentimientos [sonrio] estoy segura que el se pondria feliz.
                                 ...

Despues de aquella charla con Lucia me sentia mejor, pero ya era hora de volver a la realidad.
Me vesti con la armadura que me prepararon, era más ligera que las anteriores y encajaba perfecto con mi cuerpo.

-No es pesada...

-Antoni la fabrico con material de calidad, ligero  pero resistente, además de un toque femenino.

Lucia tomo la espada que estaba limpiando antes.  Por instantes la observo para despues entregarmela.

-La espada tambien esta reforzada. Ahora es más ligera, pero su corte no falla. Resistira un buen combate.

La empuñadura de la espada formaba la imagen de un dragón color esmeralda. Era más ligera, resistente y portaba de un filo excepcional. Simplemente hermosa.
Terminando de alistar mis pertenencias de combate baje las escaleras.
Demaciado ruido.
Habia mas personas de lo normal dentro de la taberna.
Viajeros, comerciantes, caza recompensas, cazadores, entre algunos. Todo el mundo observaba el tablero con los trabajos clasificados.
Me aserque un poco y Antoni me dio un monton de papeles.

-Escoje alguno, son de tus  favoritos.

Todos esos papeles que me entrego eran solicitudes de misiones relacionados con las bestias.
Mi experiencia en combate me respaldaba. Aprendi lo basico con Gabriel,  lo demás tube que aprenderlo en combate real.

-me interesa este [señale].

Se trataba de una aldea a  2 dias de distancia, los aldeanos habian sufrido muchas perdidas gracias al ataque de  5 bestias reportadas.

-No has combatido mas de 2 de esos mounstruos a la vez, no la tomaras. [Indico algo molesto]

-Si no tomo el riego jamas lo sabre, tengo que probar mi propia fuerza.
Asi que tomare esta. [Le recale].

Sin más, le arrebate el boligrafo y firme la hoja.

-una vez firmada la solicitud. El firmante es el que debe completar la misión [le indique] por lo que ya la firme, sere yo quien la lleve a cabo. Regresare en un par de semanas.

Antoni calmo su enojo muy rapido, reconocia que no podia luchar contra mi, y efectivamente ahora debia responsabilizarme de mis desiciones.

-El poblado no es lejano, [suspiro algo cansado] más se ha cerrado el camino por precaución, tendras que cruzar la montaña por lo que te tomar algo de tiempo extra en llegar.

-¿Por cierto, el viejo que buscaba? [Le pregunte curiosa]

Antoni sonrio, tomo un morral con
Medicinas y algunas provisiones.

-Cuando regreses lo sabras.

El Secreto De La TierraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora