Capítulo 1. ¿Qué ha ocurrido?

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La vida puede cambiar radicalmente en un segundo….

Era una mañana de invierno, soleada y fresca. El sol se asomaba desde detrás de los edificios altos y acristalados de Tokio.

En el hospital, había mucho alboroto; médicos para arriba, para abajo, nuevos pacientes, pacientes que se van, enfermeras con goteros… El aire fresco entraba por la ventana de mi habitación del hospital.

-         ¡! ¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado?- desperté y exclamé. Me di cuenta de que me encontraba en una habitación de hospital y estaba ingresada.

Empecé a sudar. No recordaba nada. ¿Quién era? Miré mi pulsera, y por suerte ponía mi nombre y mi edad. “Aira” “25 años”. Era un nombre bonito, y la edad estaba bastante bien. Decidí relajarme y intentar recordar el porqué estaba allí.

De repente, se abrió la puerta y interrumpió mis pensamientos. Un chico de mas o menos mi edad, rubio con ojos azules y piel blanca entraba en mi dormitorio. Llevaba una chaqueta de mangas blancas, con el símbolo de una universidad, unos vaqueros y unas deportivas desabrochadas. Tenia un aire vacilón. Se sentó al lado de mi cama.

-         ¡Hombre, has despertado! ¡Menuda resaca, tres días! Y sigues blancucha…¡Menuda cicatriz que llevas en el cuello!

¿Resaca? ¿Cicatriz?¿Blancucha?

Me dio un beso en la boca y le di una colleja.

     - ¿De qué vas?- dije yo cabreada.

     -Huy, que la gata saca las uñas…¿Qué ya no te gustan los besos de tu  chico? Bien que te gustaban….

           - Para tu información, no recuerdo nada…

   - Ok, don’t worry, be happy. Yo soy Marc, tu novio desde el instituto.

- ¿Qué ha pasado? No me trates como tu novia, tengo que volver a recordarlo todo y acostumbrarme…

- Vale, te lo contare, pero solo si me muerdes con esos colmillos raros que te han salido.

-¿Qué? ¿Colmillos?

-Los que llevas, castaña. Mmmmm, si me recordaras…

-Te recuerdo que no recuerdo nada.

-Excusas, estas antipática porque estas con la regla…

- A mí no me hables así.

- Te hablo como quiero, que para eso soy el hombre de la relación. Empiezas antipática, pero luego…Bien que te lo pasas. Así estabas, en coma tres días…

- No me vaciles. ¿En verdad eres mi novio?

-Sí, y bien que te gusta. Ah, me dijeron los médicos que cuando despertases, te revisaban y te daban el alta. En casa, están los platos por lavar, la cama por hacer, el balcón por barrer, así que ya sabes…

- ¿Qué¿ ¿Y no lo has podido hacer tu? Además en una casa tenemos que hacer todo entre los dos…Un momento, ¿casa? ¿Vivo contigo?

- Sí, tenemos un apartamentucho…¿A qué viene eso, si siempre lo haces tu todo? Y soy el hombre y no tengo porqué hacer nada.

-Mira chaval, si has sido mi novio, seria tonta, asi que, no quiero volver a verte más.

-¿Qué? ¿Estas rompiendo conmigo?- dijo él con un tono irónico.

-Sí, asi que adiós, o sino llamo a las enfermeras…

Marc se fue. Pero sin contarme lo que paso. Desde ese momento, no lo volví a ver más. Fui al baño , me miré al espejo y tenia razón: estaba blanca, llevaba unos colmillos raros y una cicatriz en el cuello…pero exactamente no era eso, eran como dos agujeros morados. “Y si soy..” llegué a pensar “ pero eso no existe…” Un enfermero entró a mi habitación, porque había sido comunicado de que me había despertado. Me llevó a la consulta para revisarme. Cuando la revisión acabó, se me quedo mirando raro.

-Esos colmillos no son normales…-dijo- Estas muy pálida…-y llevas dos agujeros en el cuello.

Se fue y volvió con una cruz de madera con la punta afilada. De repente, de la ventana de la consulta, entro una mano blanca, me agarró, y se me llevó por la ventana.

Seikatsu Vampira [#Wattys2015]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora