Frases

mi pequeña bolita de pelos

Blade, bladecho, cosita, monstruo, destroyer, mimado, bebé, y muchas más formas de las que te decimos...

Con nadie he hablado en serio de lo que te pasa, justo como con nadie he compartido los miedos que tengo, que la verdad son muchos y todo esto por tratar de mantener la coraza de chica dura y no llorar, que contigo nunca aplica.

Me he encariñado demasiado contigo, te conozco desde que ni siquiera tenías un mes, yo he sido quién te ha cuidado, te alimenté con un biberón cuando quién sabe cuánto tiempo llevabas sin comer, te arrulle cuando todo te daba miedo y no podías dormir y ni siquiera sabias caminar bien. He sido quién más tiempo ha pasado contigo, ya fuera acostado a mis pies o saltandome encima para que te pusiera más atención, te he cuidado, dado remedios, jugado contigo, enseñado trucos, y muchas más cosas, por esto es que sufro tanto al ver que no me reconoces, cada vez que te encuentras desorientado sin saber quién soy ni en donde estás, cada vez que no entiendes las cosas y me ladras o me tratas de morder, cada vez que me miras con una mirada que no es la de el cachorrito que llegó una noche a mi casa, cada vez que se te aguan los ojos de tal forma que literalmente es como si lloraras, cuando quedas sin aliento de todo el esfuerzo que te toma, cuando quedas tan cansado que ni siquiera quieres pararte de donde hayas quedado, cuando te encuentras tan mal que ni siquiera eres capaz de caminar normalmente y te vas para los lados, te chocas con todo o te caes, cada vez que reconozco los síntomas y digo "hoy le va a dar" (como pasa con el día de hoy) y solo con ello me empiezan a arder los ojos con ganas de que los deje llorar, cosa que no hago, trato de no hacerlo, tengo que ser fuerte y estar para ti, tengo que poner una sonrisa, poner la voz que suelo hacer con los perritos, y tratar de que me reconozcas y de que no tengas miedo, y esperar, que no sea que te vuelva a dar otra consecutivamente, y que no te vaya a pasar nada después de todo lo que tenga que pasar, tengo claro de que si sigues como haz estado de mal es probable que una vez no estés batallando con nosotros para pararte, que es posible que no vuelva a ver tu mirada, que es posible que no vuelva a tener a una bolita de pelos blanca con café tirándoseme encima para que le preste atención casi haciéndome caer, o dándome la pata para que le de comida, o ladrando para mostrarme dónde está el collar para que te saque, soy consciente de ello... Y me aterra. Y contigo, no puedo evitar el que me den ganas de llorar, e incluso en algunas ocasiones llorar, pero es que no puedo evitarlo, y hago mi mejor esfuerzo para ser fuerte... Pero en realidad no lo soy.