♦La Verja De La Serpiente♦

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Johnny, como cualquier otro niño de 9 años o menos, soñaba con escapar algún día del colegio, para ver lo que ocurriría. En su colegio, la único forma fácil de escapar era saltando una verja de metal que daba a un descampado, en el cual había un muro con un graffiti de una serpiente bastante bien hecho. Debido a ese graffiti, todos los chicos llamaban a esa verja "La verja de la Serpiente". 

Un día, Terry, el más valiente de todos los amigos de Johnny, saltó la valla y huyó hacia el descampado. Esto pasó hace 4 días, y desde entonces nadie le había vuelto a ver. Johnny se imaginaba que le habrían expulsado una semana del colegio, pero se equivocaba...

Ese mismo día, Johnny, que se aburría porque sus amigos estaban jugando al fútbol, deporte que no se le daba precisamente bien, decidió saltar la verja para llamar la atención. En cuanto le vieron acercarse y hacer ademán de subir, Fred y Casey, dos de sus amigos, fueron a darle ánimos. 

Mientras él intentaba subirse, sus amigos le aplaudían y gritaban su nombre. Al final logró llegar arriba y saltó al otro lado. Era oficial, se había escapado del colegio. Empezó a andar hacia el graffiti de la serpiente, y se dio cuenta de que sus ojos estaban empezando a volverse de color rojo, cada vez más intenso. 

De repente, empezó a notarse cada vez más débil. Se dio la vuelta y corrió hacia la verja. Para su incredulidad, todo el mundo había desaparecido. No estaban ni Fred ni Casey, y el campo de fútbol estaba vacío. Se agarró hábilmente a la valla y consiguió saltarla más rápido que antes.

Fue corriendo hacia su clase, pero cuando llegó, no había nadie. Se acercó hacia el escritorio de la profesora y lo que vio le dejó paralizado. Estaba el cadáver de su profesora, con un tatuaje de una serpiente en cuello, la cual era exactamente igual que la del graffiti. De pronto, empezó a escuchar un silbido grave, como de algo muy grande y pesado acercándose hacia gran velocidad al aula en la que Johnny se encontraba. Johnny retrocedió hasta la esquina de la clase.

El silbido era cada vez más fuerte. De repente, cuando ya era un sonido que llegaba a hacer daño a los oídos, se paró. Johnny escuchó un seseo como de serpiente, seguido de un crujido de escamas, como si una serpiente gigante se estuviera retorciendo. 

De pronto, la pared que daba al pasillo estalló, y a través del humo de la explosión, Johnny vio una serpiente de 7 metros, escamas verdes y ojos rojos luminosos. 

La serpiente giró la cabeza lentamente hasta mirar fijamente a los ojos a Johnny. Seseó, y acto seguido, sin vacilaciones, abriendo la mandíbula y dejando ver sus enormes colmillos, se impulso hacia Johnny....

Todo oscuridad. Oscuridad eterna.

Johnny empezó a ver un halo de luz pequeño al fondo de su mirada. El halo empezó a crecer, hasta que Johnny se dio cuenta de que era la luz de una lámpara, la de la enfermería del colegio. Se levantó. La enfermera le miraba sonriente, y le dijo:

-¿Qué tal John? ¿Ya te sientes mejor?
Johnny estaba mareado, miraba a su alrededor, como si no supiera dónde estaba. La enfermera prosiguió:


-Te pegaron un balonazo en la mientras cruzabas el campo de fútbol. La próxima vez ten más cuidado, venga, vete a jugar.

Johnny salió disparado hacia la verja. Estaba seguro de que todo aquello de la serpiente lo acababa de soñar. Cuando llegó, vio que el graffiti de la serpiente había desaparecido. Solo quedaba una cosa, dos puntos rojos, donde solían estar los ojos. 

Johnny no habló a nadie del tema, ni siquiera a sus padres.

Ahora ya sabía donde estaba Terry...





¿Terry?

Yo no se donde esta >:v

PINCHE JOHNNY NO ME DEJES ASÍ >:v

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