Make Your Way Back To Me [Larry Stylinson] | Serie

1. all my tears have been used upon another love.

Sumario: Harry está tratando de seguir adelante pero los recuerdos siguen viniendo a su mente y su corazón es un desastre.

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» “Soy Louis. Louis Tomlinson. ¿Y tú, ricitos?” «
 
» “¿Sabes que, Styles? Me caes bien, presiento que vamos a ser buenos amigos.” «
 
» “Mamá, él es Harry. Mi mejor amigo.” «
 
» “Louis, ¿me estás escuchando?”
“No.”
“Pfff, imbécil.”
“No es mi culpa que tus ojos sean tan bonitos.” «
 
» “Ya deja de mirarme así.”
“No.”
“Louis…”
“Lo siento, pero no puedo evitarlo.” «
 
» “Haz, necesito preguntarte algo.”
“Dime.”
“¿Irías al concierto de The Script conmigo?” «
 
» “Sé que tu madre está esperando detrás de esa puerta pero… en serio quiero besarte ahora mismo.”
“No la matara esperar unos minutos más.” «
 
» “Harry Styles, ¿me harías el honor de ser mi novio?”
“Eres un idiota, pero sí, acepto.”
“No soy un idiota, soy todo un caballero.”
“Ya cállate y bésame, tonto.” «
 
» “Louis…”
“¿Hmm?” 
“¿Qué va pasar cuando te gradúes?”
“No pensemos en eso, Haz. Simplemente disfrutemos el uno del otro.” «
 
» “Por favor, nunca me dejes.”
“Nunca, Haz.”
“¿Lo prometes?”
“Lo prometo.” «
 
» “L-Louis…”
“Te amo.”
“¡Oh Dios, Louis!”
“Te amo.”
“M-más rápido, por favor, por favor.” 
“Ugh, ya casi, Haz, ya casi.”
“¡Louis!” «
 
» “Yo también te amo, por cierto.” «
 
» “¡Oh por Dios, Haz, me gradué!
“Mhm...”
“¡¿Lo puedes creer?!”
“Si… y estoy orgulloso de ti.”
[…]
“Hey, ¿por qué esa cara? Se supone que debes estar feliz, festejando conmigo.”
“Estoy feliz, Lou.”
“No se nota.”
“Lo siento. Pero créeme, estoy muy feliz por ti, amor.” «
 
» “Prometo amarte por toda la eternidad.”
“No seas tonto.”
“Oh bueno, gracias por apreciar mis palabras, Harry. De verdad, muchas gracias.”
“¡Si las aprecio!”
“Mhm…”
[…] 
“¿Para siempre?”
“Para siempre.” «
 
» “Louis, ¿estás siquiera escuchándome?”
“¿Eh? Uhm, lo siento, solo pensaba.”
“¿En qué?”
“Solo… cosas.”
“¿Está todo bien?
“Si, amor… todo está bien…” «
 
» “Lo siento.”
“¿Por qué?”
“Lo siento tanto, Haz.”
“¿Louis?”
“Perdóname. Yo te amo, en serio lo hago pero…”
“¿Pero que, Louis?”
“Tengo cosas importantes de las que ocuparme y… ya no puedo seguir con esto.”
“¿Con esto?”
“Si…”
“Dilo.”
“Haz, no.”
“Dilo, Louis.”
“Harry, por favor…”
“Sólo dilo de una vez y ya, cobarde.”
[…]
“Terminamos.” «

Harry mantenía sus ojos cerrados mientras un par de lágrimas se deslizaban por sus mejillas. Incluso después de seis años, aún lo recordaba todo como si lo hubiese vivido ayer, desde el principio, cuando Louis sin querer pateó la pelota hacia donde Harry pasaba caminando por la vereda de su casa y por poco lo golpea en la cabeza, hasta el final. El final, que aún le dolía como si se repitiera una y otra y otra vez frente a él. Furiosamente se limpió las lágrimas, odiando sentirse débil ante esos recuerdos. Quisiera olvidarse de todo de una buena vez pero cuanto más desea olvidar, más vívidos parecen volverse.
 
Si tan solo Louis no hubiese formado una parte tan importante de su vida…
 
Pero no, porque desde el primer momento, Louis fue maravilloso. Harry aun recordaba cómo casi se perdió en el mar de sus ojos azules cuando los vio por primera vez, eran tan hermosos y únicos. Aun recordaba que su nombre saliendo de los labios de Louis se sentía como un abrazo cálido rodeándolo. Aun recordaba sus dedos recorriendo por primera vez sus rizos, luego sus mejillas, luego sus manos, para después de un tiempo llegar a recorrer su cuerpo entero hasta los lugares más íntimos donde nadie nunca antes había tocado a Harry. Los toques de Louis siempre eran tan suaves y delicados que Harry no podía evitar sentirse lindo y amado, menos aun con la angelical voz de Louis diciéndole siempre cuan hermoso era y cuanto lo amaba. Y Harry le creía, porque le era imposible no hacerlo. Y ese era el problema, creerle siempre. Haber creído en sus miles de promesas que acabaron siendo vacías cuando él se marchó y dejó a Harry con el corazón destrozado.
 
Y, Dios, a Harry le costó tanto odiarlo, porque lo amaba más que a nadie en el mundo. Louis era el amor de su vida, y lo que él en ese momento creía, su futuro. Hasta que Louis decidió romper a pedazos esa ilusión. No valió el esfuerzo al fin y al cabo porque por más que lo intentara no podía odiarlo. Era imposible.
 
Harry sintió nuevas gotas cayendo por su rostro, y volvió a limpiarlas rápidamente.
 
– Fue un maldito hijo de puta contigo, – murmuró para sí mismo. – ¿Por qué mierda no puedes odiarlo? – La última palabra se rompió con un sollozo. En cambio, a quien odiaba ahora era a él mismo por no ser capaz de sacárselo de la cabeza. Ya estaba comprometido con otro hombre, por amor de Dios, en su mente no debería aparecer siquiera su nombre.
 
– Louis… – murmuró una vez más. Probando como cada letra se deslizaba por su lengua. Hacía tanto tiempo que no lo decía. – Louis. – Repitió. – Louis… Louis… Lou… Louis… – y ahora sonaba como un llamado, haciendo que se odiara aún más. – Louis… – Sollozó audiblemente. – Por favor… – susurró en apenas un suspiro, sin siquiera saber la razón. No tenía idea de que era por lo que pedía, ni le importaba, solo necesitaba descargarse. Soltó el abrazo a sus piernas y se recostó sobre la cama, enterrando su rostro en la almohada para acallar un poco su llanto. Dios, se odiaba tanto pero tanto en ese momento. Puto débil de cuarta, pensó.
 
Finalmente  se sintió exhausto y se dejó vencer ante su mente, dejando que trajera tan dolorosos recuerdos, esta vez golpeándolo más duro que antes.