Tan pronto como llego a casa, me dejo caer en el sofá, dando un sonoro y cansado suspiro.
El clima de hoy ha estado tan helado que podría congelar toda una ciudad, debido a esto, los habitantes no han parado de pedir café o chocolate caliente a cada minuto.
Trabajo en la cafetería "Ho, Ho, Ho" desde hace dos años, las personas siempre creen que lleva ese nombre en honor a Santa Claus y nos preguntan la historia cada vez que pueden, aunque la verdadera historia está muy lejos de algún fanatismo. Según, Elioth, —el dueño de la cafetería—, eligió ese nombre al enterarse de que su esposa y él se habían quedado sin trabajo al mismo tiempo.
—Oh...oh...oh —fue lo que dijo cuando se esposa le dio la mala noticia.
Él creía que todo estaba perdido, ambos sin trabajo y en pleno declive de la economía de la ciudad de Trenton, ubicada en el condado de Mercer, New Jersey. Los dos todavía tienen una discusión sobre quien tuvo la idea de poner la cafetería y elegir ese nombre, sin embargo, la señora Rita siempre se atribuye la genial idea de cambiar el orden de las letras y hacer del decepcionante y frustrado: "Oh, oh, oh" un raro y llamativo: "Ho, Ho, Ho", el cual les ha servido durante todos estos años, ya que la cafetería es la más frecuentada de toda la ciudad.
Me quito las botas con la intención de darme un masaje en los pies. Miro a mi alrededor y a pesar de todo el cansancio, me alegra estar de vuelta en mi hogar.
En cuanto dejamos la casa de tía Hilary —ya hace dos años—, y volvimos a nuestra casa, sabía que se vendrían muchas responsabilidades sobre mí, pero eso era mejor que estar bajo el techo de personas que no nos querían, ya sabes, sonríen desde largo, pero una vez que invades su espacio, te conviertes en sus enemigos después de un tiempo.
Cuando mis papás murieron, tía Hilary y su esposo eran los únicos familiares cercanos que el gobierno pudo encontrar para que se hiciera cargo de nosotras. Al principio, ella también estaba mal por la pérdida de su única hermana y hacia muchas cosas para que nosotras estuviéramos bien, aunque supongo que los incesantes llantos a media noche de Amber y la constante carga de tener a dos menores bajo su techo fueron los que la llevaron a decir cosas como: "Por eso es que nunca tuve hijos, ahora mira, no puedo tener una noche tranquila" "¿Puedes hacer que se calle? ¿No estás grande como para superar su muerte y seguir adelante?" "Antes no teníamos que comprar toda esta comida, míranos ahora, criando hijos que ni siquiera son nuestros"
Lo cómico del asunto es que ella no gastaba ni un solo centavo en nosotras, ya que, mi papá dejó un fideicomiso el cual ella administró durante estuvimos bajo su tutela. Legalmente Amber es la única que sigue bajo su resguardo, aunque solo es en acuerdos legales, ya que soy yo quien está a cargo de ella, pero al tener ya veintidós años, tengo la suficiente edad como para que el gobierno acepte que esté legalmente a mi cargo, así que ya he hecho todo el papeleo correspondiente.
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Mi mayor deseo para Navidad.
Historia CortaLa vida para Heidi Baker ya no tiene el mismo sentido desde que su familia quedó marcada por un accidente, sin embargo, sabía que la única opción que tenía era ser fuerte, por su hermanita Amber, por sus papás y quizás también por ella. Ha sabido s...