Capítulo 5 | ¿Por qué estás ahí?

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Dos años después:

Annie POV

Doy otro vistazo a la lista de invitados de la fiesta de inauguración con las manos temblorosas, el pulso acelerado y al borde de un colapso, observo las letras y ¡joder! ¿Por qué estás ahí? ¿Por qué Spencer? No puede ser.

Muchas lágrimas se escapan de mis ojos y ese dolor en el pecho surge con más fuerza.

¿Qué voy a hacer? En estos dos años pasaron muchas cosas tan dolorosas después de que me fui de la casa de Spencer, la semana después de aquel día empecé a sentir mareos y arcadas, en ese momento recordé que Spencer y yo hicimos el amor tantas veces que se nos olvidó protegernos. Por eso fui a la farmacia y compré una prueba de embarazo, recuerdo los nervios y la emoción que sentí al darme cuenta que en unos meses iba a ser mamá, cuando lo supe decidí no contarle nada a Spencer, ya que a él no le importaría tener un hijo y no quería sufrir su rechazo y otra humillación como la última vez. Tal vez suene egoísta pero fue lo que hice, mi embarazo iba muy bien y estaba feliz tanto que después que naciera iba a buscar a su papá y a contarle todo.

Lamentablemente las cosas no sucedieron como las tenía planeada y un día mientras iba a visitar a mi padre sufrí un accidente y perdí a mi bebé con ocho meses, le faltaba tan poco para nacer.

Yo estuve al borde de la muerte, pero juro que prefería morir yo y no que lo hiciera mi bebé. Luego de la tragedia me fui de Canadá para no volver a ver a Spencer, y me fui a Massachusetts, pero el destino era cruel, hoy mis amigas y yo celebrábamos un proyecto y en la puñetera lista estaba Spencer Weslay.

Las lágrimas salen de mis ojos al recordar todo lo que he vivido.

¿Cómo vería a Spencer a los ojos? ¿Me reconocerá? Si le cuento ¿Me creerá? ¿Me reclamará el no habérselo dicho? ¿Me culparía? ¿Me odiará? 

Todas esas preguntas me atormentaban y prefería no analizarlas.

La puerta de mi despacho se abre y veo a una Keith sonriente, yo trato de sonreír pero solo logro conseguir una mueca sin gracia.

—Annie ¿qué te pasa? Estabas bien
¿Qué sucede?

—Nada, amiga, tranquila.

—No te creo, sé que es por tu bebé, sé que la pérdida te dolió mucho, pero vas a estar bien Annie eres una mujer fuerte.

—Gracias — le digo sincera

—Ya, vete a arreglar, quiero que seas la más linda — dice tratando sonar autoritaria pero su sonrisa la delata.

Cuando dice eso recojo mi bolso y pienso que ésta noche será una tortura para mí. Asistiría a la inauguración por obligación.

Bajé el ascensor mientras pensaba todo lo que he vivido, y que hoy me encontraría con el hombre que me llevó al cielo y cumplió todas mis fantasías, y el papá de un bebé que ya no está conmigo.

Me dirijo al parqueo, localizo mi coche y pongo musica relajante para, tal vez, olvidar un poco. Manejo por la carretera pensando que si le hubiese contado a Keith y a mis amigas Spencer no estaría invitado, pero decidí ocultarlo como si de alguna manera esconderlo conseguiría borrarlo.

Llego a mi apartamento y miro el reloj. 6:00pm. La fiesta empieza a las 7:00pm. Tenía 45 minutos para vestirme, por eso fui a mi armario y busqué mi vestido rojo carmesí, mis zapatos de diseñador y el collar que me regaló Thomas; mi mejor amigo.

Quería impresionar a todos esta noche, pero sé que quién me interesa es Spencer.

Me dirijo al cuarto de baño con cautela, me doy una ducha y pienso que habrá muchas personas en la fiesta y es posible que Spencer ni siquiera me vea, así que tal vez me preocupo de más.

Ya cuando estoy limpia, voy a mi habitación y saco el vestido de la envoltura, pero primero arreglo mi cabello para que esté liso. 

Cuando está como me gusta, me pongo el vestido, después mis zapatos y me maquillo de manera cuidadosa y sencilla, tanto que parecía natural, admito que es el mejor que me he hecho. Ya cuando termino, busco la cajita de terciopelo donde está el collar y mientras me lo pongo pienso que Thomas es muy detallista, por eso lo quiero tanto. Tomo mi bolso a juego con los zapatos, y luego rezo un padre nuestro y me río de mis ocurrencias; soy tan Annie Williams.

Tomo el ascensor y busco mi coche, manejo pensando que ojalá esta noche no termine en desastre.

Cuando llego al parqueo, dejo el coche en mi lugar asignado. Entro a la recepción y la tensión y los nervios se apoderan completamente de mí.

***

¡Uyyy! las cosas están que arden.

¿Qué creen que pasará en la fiesta?

¿Qué piensan de las cosas que ha vivido mi Annie?

Tuya Solo Por Un Mes ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora