Pequeñas historias...

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Me gusta mirar a la gente, ya sea en la cuidad, en el metro,  las calles o en cualquier lugar.
Ver a esa persona con la mirada perdida. ¿tendrá el corazón roto o se está acordando de alguien?
O ese señor que corrió porque ya empezaba a estar en marcha el metro, lo miré a los ojos y era un niño en el interior.
La adolescente que va con un abrigo rojo, ¿se lo puso porque resalta su piel blanca y sus ojos cafés?
¿La señora que va durmiendo se habrá quedado hasta tarde ayudándole a su hijo a hacer tareas?
Esa pareja que se besa, ¿Alguna vez le habrá sido infiel el uno al otro o tendrán secretos entre sí?
Aquel bebé que va en el coche, ¿deseará no haber nacido en el futuro?
El guardia de esa tienda comercial, ¿Será feliz con su trabajo?
El caballero que lleva tantas bolsas de super mercado, ¿tendrá en casa a alguien que le diga cuánto lo quiere?
¿El chófer de la micro abrá tenido un día de mierda?
Aquél hombre joven que entra al metro y todos lo miran por que tiene tatuajes, ¿Qué historia tendrán para contar?
¿La mujer con el celular en la mano le estará escribiendo a su amor?
¿Por qué todos se ven tan serios? Es que acaso, ¿no son felices?
Si ese árbol hablará, ¿qué diría? ¿contaría más reencuentros o finales? ¿hablaría más de esos que lo contemplan o de esos que le utilizan para sombra?
¿A alguna de estas personas le dijeron alguna vez que ya no los querían?
¿Alguno de ellos será músico y lo dejó porqué no te daba para comer?
¿Alguno de ellos extrañará desesperadamente a alguien?

Me gusta imaginar que son pequeñas historias.
Ella se llama Vida, lleva un vestido negro y un abrigo verde, ahora va a encontrarse con su madre que no ve hace años, y está embarazada, es una sorpresa que le tiene.
Andrés, es un adolecente, siempre creyó que nadie lo querría por que era diferente, muy introvertido e inteligente. Pero apareció una niña que era sincera, aunque con cicatrices en las muñecas, se llama Lorena, se conocieron hasta las sombras y ahora están en el vagón del metro muy enamorados.
A un metro de ellos está quién podría llamarse Alejandro, que aunque está soltero, tuvo un gran amor, que superó todos los obstáculos de la vida, sin embargo, un día el, su novio se fue... Pablo, se llamaba, se fue... nunca lo volverá a ver, porque la señora muerte no perdona. Pero Alejandro sabe que él fue el verdadero y único amor de pablo.
No veo cuerpos, veo historias, caricias, anhelos, besos robados, sueños frustrados y alguna que otra pena.
No me importa como luces, si eres gordo o flaco, si eres muy joven o muy viejo, si eres raro o muy normal, me importa más cuantas historias por contar tienes.
Pero de tanto mirar a la gente, hay una señora que me mira, me mira, me mira, recuerdo que yo veo historias en ellos, pero ella me mira y sólo ve mi cuerpo robusto y las ojeras en mi cara.
He caído nuevamente en la realidad se ve tan gris y en mi imaginación era gris pero cada persona era un color. Pero ahora las personas son grises, sin vida.

La mente de un adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora