SAVIOR «Narry»

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Niall entró en el pequeño departamento y dejo su maleta junto a la puerta mientras encendía la luz.

Definitivamente no era un departamento con lo que estaba acostumbrado a vivir; las paredes tenían un papel tapiz que en algún momento había sido verde pero ahora tenía un tono amarillento por lo viejo que era, y el suelo tenía manchas de dudosa procedencia, sin mencionar que el lugar no podía medir más de uno diez metros cuadrados.

Niall sacó de su bolsillo trasero el papel que April le había dado por la mañana, era una tarjeta de presentación un poco desgastada ‹Harry Styles - 9657213819›, su hermana había mencionado que él era un dom con la intención de ayudar pero la verdad era que no se creía eso del todo, el apellido Styles era conocido entre los políticos importantes de la ciudad, y ellos habían hecho todo para que los dom siguieran siendo superiores a los sum en todos los sentidos. Niall suspiro un poco frustrado y colocó por ahí la pequeña tarjeta.

En el viaje en autobús hasta su nuevo hogar había hecho cuentas mentales acerca de cuánto tiempo sobreviviría con el dinero que su familia le había dado. Después de ese tiempo tendría que buscar algún trabajo o conseguir algún dom, esa opción le causaba incluso escalofríos al pensarlo, pero cualquier opción era mejor que regresar a casa pidiendo por ayuda de sus padres. Ya podía imaginar las caras de desentendidos que harían si lo volvieran a ver.

Niall entró completamente en el departamento, arrastrando la maleta tras si y pudo divisar mejor la división del lugar; del lado izquierdo y al fondo se encontraba una pequeña cocina acompañada de un desayunador, después estaba el pequeño living que no consistíaas que en un par de sillones individuales y una pequeña mesita de centro. Del lado derecho estaba una puerta que daba a la habitación, donde se encontraba el único baño. En una esquina estaba colocada la cama con sábanas limpias–gracias a Dios–y el pequeño baño a penas tenía el espacio necesario para que estuvieras de pie junto al retrete y dentro de la ducha, que estaba bastante llena de moho.

Al menos la cama lucía bastante decente, aunque las sábanas se veían desgastadas estaban limpias y olían a detergente. Niall se sentó y coloco su maleta a un costado para comenzar a desempacar.

Mientras sacaba todas las cosas no pudo evitar que las lágrimas salieran de sus ojos, creía que cuando cumpliera los dieciocho años y por fin se fuera de esa casa iba a dejar de sentirse una completa carga por deshonrar a su familia, pero la verdad es que ahora se sentía peor que una mierda.

Desde que le habían dicho que era Sum sus padres había hecho lo posible para demostrarle que no estaban conformes con su naturaleza, y cuando cumplió quince años le dijeron que no querían que lo vincularán con su apellido cuando fuera mayor-y todos pudieran saber qué era-ya que eso era como un insulto hacia ellos.

Cuando terminó de doblar las camisas y pantalones en los dos cajones que había se seco las lágrimas y soltó un gran suspiro. No merecía la pena llorar por esas personas, él podía salir adelante sólo y siendo un sum.