Sus dedos descubrieron algo. Una esfera. Una pequeña esfera de metal que cabia perfecta en la palma de su mano.Se emociono al instante.
Rapidamente, poso ambas manos en el objeto y lo hizo girar.
Ansiosa espero algun sonido. Volvio a intentar.
Giro el pomo con mas fuerza y al ver que no daba resultado, choco su cuerpo contra la puerta de madera.
Su hombro hizo un ruido feo cuando choco por sexta vez el portal.
Mierda. La maldita puerta estaba cerrada.
Se disponia a volver a atropellar su cuerpo cuando sintio un escalofrio en su nuca.
Mierda. Mierda.Mierda.
Volvio a hacerlo con mas desesperacion . Se tenia que abrir. Aunque le costara un hombro, la puerta era su unica salida. Siguió intentando.
Crak
《Lo logre. ¡Lo logre!》
El pedazo de madera al fin cedió ante tantos intentos y con un quejido lastimoso, sus bisagras funcionaron y le dieron la bienvenida a una nueva parte del hospital.
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Dejo de sentir el escalofrio en su nuca.
No porque se hubiera detenido, si no porque estaba tan concentrada en fijar su vista en la oscuridad que se olvido de ese escalofriante cosquilleo.
Lo que habia albergado sus esperanzas pronto la habia desecho en desilusión.
La oscuridad rodeaba gran parte de la habitación. Se encontraba en rincones donde la luz de la luna no podia alumbrar.
Esperen.
¿Luz de luna?
《Una ventana》
Levanto la vista y alli, a tres metros de la linea del suelo se encontraba su unica salida.
《Esta muy alta》 pensó.
Recorrió la habitacion con sus ojos para encontrar algo que la ayudara a llegar hasta alla arriba.
Las dimensiones de esta, eran suficientemente grandes como para contener a varias personas, quizas unas treinta.
Se sorprendió de que la estancia se asemejara a una habitacion que albergará a las personas que eran tratadas como "locas".Varias camillas estaban agrupadas en un orden especifico. Estaban enfiladas en cuatro pares de camas enfrentandose con otras en el mismo orden pero en la pared contraria.
Extrañamente, las sabanas estaban tan blancas y ordenadas que parecia que nadie las hubiera usado, las almohadas estaban igual de ordenadas y blancas como si ninguna cabeza se hubiera resguardado en ellas.
Haciendo excepción de las camas, el resto de la habitacion estaba en un completo desastre.
Manchas de humedad recorrían las paredes de arriba hacia abajo. Pedazos de pintura de la misma, caían al suelo dejando ver una estructura gris y desnuda por debajo.
Algunas plantas habian crecido gracias a la fuente de humedad, dándole un tono verdoso a los costados.
Nadie habia usado esta habitacipn por muchos años.
Pero no entendía el porque de las camillas.
No se dejo preocupar por eso y busco algun objeto que la ayudara a salir.
Una silla.
Queria una silla.
Y una silla estaba ahi.
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¿A que llamas monstruo?
Mistério / SuspenseElla era la unica que lo veia. La trataron de loca. A el le gustaban las sillas. Una rara combinación ¿no? #932 en misterio/suspenso 10/12/2017