Desmayo.

542 22 8
                                    

No puedo respirar, el aire me quema los pulmones mantengo la respiración, intento gritar pero solo se abre mi boca sin emitir ningún sonido, comienzo a desesperarme, tengo miedo y no puedo hacer nada. Siento como mis lágrimas comienzan a bajar por mis mejillas ¿este es el fin? ¿así es como voy a morir?, por instinto vuelvo a aspirar el aire, pero solo me cause más dolor. Caigo de rodillas ya no puedo más empiezo a perder el conocimiento.

—¡Ya despierta!— grito mi madre.

Abrí los ojos, era solo un sueño no morí. Me siento aliviada, me llevo la mano derecha a la frente esta llena de sudor frio, me quedo con la mano en la frente unos minutos y por fin decido levantarme de la cama, cuando me levante me sentí mareada, mis rodillas no soportaron mi peso y caí de tal forma que mi cara quedó contra el suelo. Esto causó un golpe seco.

—¡Mavira!, ¿Qué sucedió? —preguntó mi madre, corriendo hacia mi cuarto con cara de preocupación.

—Nada, solo me sentí débil y me caí —le respondí a mi madre mientras me ponía de pie con lentitud

—¿Estás segura? Ese fue un golpe bastante duro, quiero decir se escuchó hasta en el piso de abajo. —dijo mi madre insistiendo.

—Sí, estoy bien.

—Bueno, ya vístete que tienes escuela.

—Pero, es peligroso a mi edad, ya es peligroso —se lo digo mientras miro al suelo.

—Ya lo sé, pero si no vas a la escuela será aun más difícil. Solo será este año, lo prometo.

—De acuerdo. Solo este año.

Mi madre me dirigió una sonrisa y salio de la habitación, busque el uniforme en el closet, que esta a la izquierda de la cama, pegado a la pared. Lo encuentro y lo observo por unos segundos. Es una falda de cuadros, una camisa de manga larga blanca un saco con el escudo de la escuela del lado izquierdo y una corbata con el mismo diseño de la falda cuadros negros y grises. 

Me desvisto y observo mi pálida piel en el espejo del tocador que esta frente a mi cama nunca me a gustado este color de piel parece que estoy enferma. Me pongo la falda que me llega unos cuantos centímetros arriba de la rodilla, comienzo a ponerme la camisa y a abotonarla,  la meto dentro de la falda, me pongo la corbata  y encima el saco. No me veo tan mal, me veo bastante promedio, eso esta bien nunca me a gustado resaltar.

Me siento en la cama para ponerme las calcetas y los zapatos. Por ultimo voy al baño que esta en mi cuarto a la derecha, prendo la luz del baño, me pongo enfrente del lavabo, tomo mi cepillo de dientes, busco la pasta de dientes y la pongo encima del cepillo. Me llevo el cepillo a la boca y procedo a cepillar, mientras cepillo  veo mis ojos negros en el espejo, creo que es lo segundo de mi que me gustaría cambiar, ojala fueran rojos como los de todas las personas, creo que me sentiría más normal.

Termino de cepillarme los dientes y ahora toca arreglarme el cabello. También detesto mi cabello, originalmente es negro pero lo tiño de blanco por propia seguridad, solo los tóxicos tienen el cabello negro. Me delata como una de ellos, no me molesta ser una tóxica pero es difícil tener una vida normal.

Cuando vi que ya estaba lista tome mi mochila y ,baje a al piso de abajo donde esta la cocina, el comedor, la sala y la puerta de la entrada. Me dirigí a la cocina, ahí estaba mi madre.

—Mamá ya estoy lista. Vámonos.

—Espera. ¿No vas a desayunar? —me pregunto mi madre.

—No tengo hambre —conteste.

—Bueno, pero cuando vuelvas de la escuela comerás sin poner ninguna excusa..

—Si, como quieras.

Mi mamá se puso la mascara antigás  para poder respirar el aire del exterior, y aunque yo no la necesite me la pongo para pasar desapercibida y que nadie sepa que soy una toxica. Mi mamá abre la puerta y salimos lo más rápido posible aunque no hay peligro de que el aire llegue dentro de la casa ya que puertas y ventas están herméticamente selladas y solo las abrimos para salir o entrar  aparte de que se utiliza un sistema que recicla el aire del interior. Si aire contaminado llega dentro se filtrara y quedara limpio para respirar .

Veo la calle, todas la casas se parecen y no hay nadie afuera, es normal amenos que no tengas que trabajar o ir a la escuela no hay ninguna razón por la cual salir al exterior . Subimos al auto, mi mamá lo enciende, arranca y se pone en marcha.

Pasaron como unos 20 minutos y llegamos a la escuela. A diferencia con las casas la escuela no esta sellada así que en todo momento los estudiantes y maestros debemos de llevar las mascaras antigás puestas. 

—Adiós mamá nos vemos más tarde —me despedí mientras me bajaba del auto.

—Adiós, Mavira. Nos vemos más tarde—me despidió mientras arrancaba el auto.

Me dirigí hacia la entra, mientras camino voy con la mirada agachada no quiero que vean mis rostro. Si ven mi rostro sabrán cual es mi debilidad o lo que me molesta y no quiero eso. Entre en la escuela y hago la fila. Todos los días antes de entrar a los salones nos forman a todos para revisar nuestras mascaras, lo hacen por que quieren evitar accidentes, si la mascara de alguien común falla morirá.

Cuando terminan de revisar la mascara del ultimo chico, nos dan la orden de entrar a nuestros respectivos salones. Pero  comienzo a sentirme mal, mis rodillas comienzan a temblar y ya no soportan mi peso caigo al piso de rodillas, veo borroso. Estoy temblando me recuesto en el piso, cada vez estoy peor, lo ultimo de lo que soy consciente es que alguien me sacude pero no es suficiente, todo se nubla y se pone negro.

*******************************************

Hola, esta es el primer capitulo espero les guste. Les agradecería mucho dejaran sus comentarios. Gracias por leer.

Tóxica (versión 2013)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora