poison dreams

Extra.

Es un especie de recompensa a las que siguen fielmente mis historias, gracias de todo corazón.

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En el oscuro inframundo la diosa izanami se deleitaba con su mascota híbrida, lo tenía encadenado como a un animal, le había quitado su espada y ahora mismo sonreía mientras acariciaba el arma y veía como el hombre mitad bestia era azotado por una de sus sirvientas.
-ah!... Ah!... Ya para maldita!! Juro que me las vas a pagar!!!Ah!
-ah, ha pasado tiempo desde que llegaste a mis manos y sigues siendo el mismo rebelde que en ese entonces.
-cállate!!! Yo nunca me voy a rendir ante ti!!!
-si! Eso es bueno, me gustan los hombres salvajes y necios!! Eso me hace disfrutar mucho más el momento en que te destruya por completo en cuerpo y alma.

La risa frenética de la dios resonó en todo el palacio y casi en el inframundo entero al igual que los gritos de inuyasha, su nueva mascota.
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Mientras tanto, en el mundo de los vivos el clan Taisho disfrutaba de un hermoso día al aire libre, los años pasaban sin que alguno de ellos se viera afectado por ello, tan radiantes y hermosos.
La cabeza de la familia ataba su cabello en una coleta baja, su armadura había cambiado un poco siendo de acero puro, él era el actual comandante de un gran ejército de seres sobrenaturales que defendían sus tierras del avance de los humanos, siempre feroz, siempre orgulloso y frío sin temor a nada.
La siguiente era la esposa de la cabeza de la familia, la llamaban lady Taisho, nadie sabía más que lo que lord sesshomaru Taisho había dicho de ella, era una mujer de hermosa figura que siempre permanecía tras los muros y paredes del imponente castillo de su marido, casi nunca se dejaba ver, pero ciertamente no era un ser común y corriente, algunos creían que se trataba de alguna deidad debido a que no envejecía pero tampoco tenía rasgos de alguna especie youkai, solo sabían que era muy fuerte, tenía que serlo para ser la esposa del gran sesshomaru Taisho, siempre hermosa y protegida por un centenar de los mejores hombres del peligroso demonio de cabellos blancos.
Un misterio andante.

Los siguientes eran los hijos de la pareja, en su mayoría príncipes que destacaban en cualquier conflicto debido a su gran habilidad y también su belleza,  de cabellos blancos como la nieve, algunos con ojos dorados y otros con ojos color chocolate, un par de ellos tenían una fascinante combinación de cabello azul oscuro con ojos dorados, la única mujer entre ellos y uno de los hermanos los mayores.

Hasta el momento la lista constaba de 7 príncipes una princesa y un bebé en camino.
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Tras los fuertes muros reforzados del castillo se hallaba un inmenso jardín rebosante de árboles y flores en honor a la señora de la casa quien gustaba de tomar siesta y meditar en el jardín, cerca de ella siempre se hallaba al menos media docena de guardias armados con lanzas y un par de criadas a su disposición, la joven mujer salió como todos los días para meditar junto al árbol de cerezas que más le gustaba, estaba floreciendo y le parecía sumamente hermoso contemplarlo.
-madres.. - dijo educadamente una voz femenina a unos metros de ella, las criadas hicieron una reverencia dejando pasar a la youkai de cabellos oscuros.
-shisuka, bienvenida a casa.
-gracias.
-que pasa? Luces... Intrigada por no decir preocupada, ¿hay algo que te moleste?
-madre yo, quiero saber... ¿Que es lo que le viste a mi padre? Es decir... ¿Como supiste que él era el indicado para ti?

La mujer siempre usaba un velo oscuro que cubría la parte superior de su rostro dejando ver únicamente su boca, ella le sonrió y retiró el velo dejando ver unos ojos chocolate con un leve delineado rojo sobre el párpado superior, igual que su esposo.
-por qué quieres saber eso? A caso estas enamorada?
-no! Yo nunca....!
-no eres buena ocultando cosas querida, ustedes saben que yo... No recuerdo mucho de mi pasado de hecho, casi no tengo recuerdos antes de conocer a tu padre, pero sé que... En cuanto lo veo, mi corazón palpita fuertemente y quiero abrazarlo con todas mis fuerzas, el amor se siente así quizá, ya que es diferente para algunos, pero todos el mundo concuerda en algo, el amor es el sentimiento que te hace querer proteger  a una persona por la cual arriesgaría tu propia vida, el amor es querer ver feliz a esa persona incluso si no es contigo, eso... Mi niña, es amor.

Ella volvió a colocarse el velo en su lugar, la chica había aclarado parte de sus dudas y asentía con los ojos cerrados como afirmando algo para si misma.
-y... Quien es el afortunado?
-madre!
-por favor no hace falta que lo niegues, aun recuerdo el primer amor de algunos de tus hermanos, eso no se puede ocultar.
-bueno.... Es...uno de los hijos del líder de los hombres lobo.
-oh cielos... A Tu padre no le gustará eso.
-lo sé, pero él... Bueno me provoca todo eso que tu dices!
-tu padre puede ser muy obstinado a veces, yo podría intervenir en ese asunto pero, debes estar completamente segura de que él es el indicado para ti y también, debe de corresponderte ¿de acuerdo?
-aún no creo que sea amor!! Digamos que solo me gusta un poco...
-quien es el que te gusta?! - exclamó una grave voz masculina, la chica se tenso al reconocer la voz de su padre, pero su madre le había enseñado a improvisar muy bien cuando eso pasara.
-de nadie, padre, solo le decía a mi madre lo mucho que me gustaba... El dulce que ella prepara, amo ese dulce!!!
-m?
-le dije a shisuka que no es bueno que coma tantos dulces por más que los ame, y que si le gustan tanto podría prohobirselos.

El hombre no le tomó importancia al asunto y lo dejó de lado, ambas se levantaron y optaron por dejar a solos a los señores.
-lamento dejarte tanto tiempo sola, has estado bien? Te han cuidado bien?
-si, pero dejando eso a un lado, deberías descansar, has estado muy atareado y no te vendría mal dormir un poco más.
-te prometo que pasaré más tiempo contigo.
Le dijo besando sus manos.
-no te preocupes, solo cuida mejor de ti mismo, si?
-te lo prometo.
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La reunión siempre se llevaba a cabo a media noche cuando su esposa ya se hallaba dormida, sesshomaru se reunía con sus hijos mayores y sus hombres de confianza para encomendar la misión de simple.
-el sacrificio fue un éxito este año también, debemos prepararnos para el invierno que sigue, ya saben lo que deben hacer.
-si- respondieron todo al unísono.

El secreto de cómo mantener viva a la lady Taisho era compartido únicamente con un pequeño grupo de personas entre ellos sus hijos mayores los cuales se encargaban de buscar un alma adecuada para ofrecerle en sacrificio cada invierno.

Nivel siquiera ellos sabían por completo la historia de su madre, todo lo que sabían era que por salvar a su padre ella había dado su alma a izanami y que a cambio de tenerla de vuelta él había pactado sacrificar un alma cada invierno, un alma necia y salvaje, no sabían más detalles, nadie sabía por qué ella no tenía recuerdos de su pasado, sesshomaru sólo decía que era un castigo por parte de izanami para que no estuvieran juntos, nada más que eso.

Él mantenía en secreto de su esposa el trato que él mantenía con izanami, le había borrado la memoria, la había transformado en youkai, la había borrado del mundo y los que la recordaban para que solo fuera suya y solo lo recordara a él.

Y había funcionado.

Era suya y lo sería siempre.