A como lo dice el titulo, imaginas, escenarios y todo tipo de pedidos que ustedes quieran :v
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Gracias por su amor *-*
Oh!~ ya estas aquí, dejame decirte que luces muy hermosa -se acerca a tu oído- mucho más hermosa que el resto de chicas aquí.
Tomó tu mano y juntos caminaron hasta el gran salón donde se llevaría acabo la cena de noche buena.
¿Sabes? No podría pedir una mejor navidad que esta, pues mi felicidad está donde estás tu y ahora tú estás conmigo; eso me hace el hombre más felíz en estes jodido mundo -tomó tus manos y las llevó hasta su rostro para poder dejar un beso sobre estas-.
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🎁
Renjun.
Por favor, dejame probar solo un poco -rogó mientras intentaba meter sus dedos en la masa para galletas que hacías para la pequeña reunión que acontecería en unas horas- sabes que amo tus galletas, estas siendo muy cruel no dejándome probar.
Suspiró resignado y volvió a la mesa en la cual estaba terminando un dibujo.
Luego de meter la masa al horno te acercaste sigilosamente para poder espiar su trabajo que te estuvo escondiendo con recelo desde que empezó.
No dejaré que lo veas -te asustaste por su repentino hablar- pero hay una condición -agregó con una sonrisa a lo que frunciste el entrecejo sabiendo para donde se dirigía todo esto- si estas pensando en las galletas eso ya no importa -se acercó hasta rodear tu cintura con uno de sus brazos- con un beso será suficiente... por ahora.
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Jaemin.
Te preguntarás el por qué llevamos tanto tiempo de esta manera -y la verdad era que si, habían salido a la terraza para tomar aire pero Jaemin tomó tu cabeza uniendo sus frentes mientras te miraba directamente a los ojos, habían pasado un buen rato de esa manera- bueno yo... no tengo nada para tí, dejé todo para última hora y no pude conseguir algo especial para obsequiarte -bajó su cabeza, tu reiste y empezaste a comentarle que no te importaban los regalos materiales, con cualquier objeto podrías estar bien pues lo realmente importante es la intención y los sentimientos que fueron puestos, esta vez el fue el que sonrió- A veces me pregunto por qué sigues conmigo, yo realmente no te merezco -tu negaste con una sonrisa diciendo que todo lo que querias era estar con él por mucho tiempo- oh santo cielo, deja de decir cosas tan dulces por Dios. En verdad me terminarás dando problemas de azucar, ven acá -dijo extendiendo sus brazos para abrazarte con fuerza escondiendo su cara en tu cuello, sentiste algo humedo pero no dijiste nada, sabías que llorar lo hacía sentir bien.
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