A pasado una semana entera desde que Alexandra me mando solicitud y sin embargo hablamos prácticamente todo el día, todos los días, me gusta el hablar con ella y la manera en como se expresa, es una chica fantástica.
-Buenos días, extraño. 😂👀❤ 7:58 am
-Ya te dije que no me llames extraño, al menos sabes mi nombre, ya es algo JAJA. 8:12 am
-Lo que digas... Extraño. 😂👀 8:13 am
-... Como digas, Fatima... 8:15 am
-¡Sabes muy bien que odio mi segundo nombre, jamás debí haberte dicho sobre mi segundo nombre! 😡 8:17 am
-JAJAJA, entonces deja de llamarme extraño. 8:17 am
-Vale, lo haré si prometes dejar de llamarme Fatima. 🙄 8:18 am
-Tenemos un trato. 8:19 am
-Bien... 😂 8:20 am
«8:20 Eden, se te hace tarde para la escuela»
-Se nos hace tarde, ¿no crees? Me tengo que ir a apurar Alexandra, nos vemos en clase. 8:21 am
-Dilo por ti, yo ya estoy lista desde las 7:30. 👀💁😂 8:22 am ✔✔ visto a las 8:25 am
Por alguna extraña razón pesé a compartir salón de clases ella y yo no compartíamos muchas veces palabra, ella siempre estaba con su amiga Carla, Saraha y Valery, ellas eran agradables, pero no quería hacerme demasiado cercano a nadie debido a que tarde o temprano me mudaría de nuevo y no había nada que hacer al respecto.
Después de tomar una ducha, comer mi desayuno y conducir a la escuela (tratando de no matar a todos los conductores imprudentes) llego después de desperdiciar un poco más de tiempo de mi vida.
Estoy recogiendo mis libros de Aritmética de mi casillero cuando un chico de aproximadamente 1.80, cabello negro despeinado y largo, ligeramente moreno se aproxima a un casillero un par más allá del mío.
Hola. -Dice con la mirada fija dentro de su casillero-
Miro a mi alrededor buscando con la mirada a la persona a la que le habla, sin embargo no veo a nadie, los pasillos de la escuela se han vaciado ya puesto que solamente faltan 3 minutos para que el límite de hora de entrada a las clases termine.
-Si, te hablo a ti. -Dice mirándome con una sonrisa-
-Hola. -Digo sin emoción en mi voz-
-¿Eres nuevo, cierto?
-Dímelo tú, ¿alguna vez me habías visto antes? -Le digo con una mirada de fastidio-
Desde que llegué es lo único que hace la gente, preguntar lo obvio, hasta el entrenador de la escuela me lo ah preguntado, no me sorprende esto último, mi expediente deportivo le debió llamar la atención, sin embargo, no pienso formar parte de su equipo de fútbol americano, pesé a que insistió me negué rotundamente.
-Sinceramente no me sorprende tu actitud, cuando llegué aquí hace un año me sentía exactamente igual que tú. -Dice con sinceridad en su voz-
-¿Terminaste ya?, tengo que ir a clase y creo tu también.
-Oh... Ya veo, creí que eras diferente, pareces ser un chico rudo y sin embargo te da miedo llegar tarde a clases.
-No me conoces, y no quieres hacerlo, así que no hables de mí como si supieras algo de mí. -Digo con tono ligeramente amenazante-
-Supongo que tienes razón, lo siento. -Dice centrando su atención de nuevo en su casillero mientras se encoge de hombros-
Y es ahí cuando lo veo, saca un jersey negro con el número 36 estampado en lo ancho de la parte trasera en color dorado y el apellido Estrada en color blanco con contorno dorado también. «Forma parte del equipo de americano, no me sorprende, es alto»
Cierro mi casillero en cuanto el timbre que anuncia que voy tarde comienza a sonar y doy vuelta en dirección a mi salón de clases cuando su voz llama mi atención nuevamente.
-Soy Marcus por cierto, un gusto... todo el mundo habla de ti, sé lo que paso con el idiota Efrain, es un imbécil, no voy a negar lo obvio, sin embargo es mi mariscal y lo respeto, espero te unas al equipo, al entrenador le hace mucha ilusión debido a lo que el denomina un "expediente deportivo perfecto" y a estado hablando de ello toda la semana.
-No, no creo unirme, pero gracias. «Piensalo Eden, el idiota de Scott es el mariscal, ¿no te gustaría quitarle el puesto a ese imbécil arrogante?» «Sería un placer» -¿Sabes qué?, creo qué después de todo lo haré, me uniré a su equipo, ¿en qué momento puedo ver al entrenador?
-Yo creo que para el entrenador es importante que sea ahora mismo, o después, cuando puedas, el esta muy ilusionado. -Un ligero tono cargado de diversión se filtra de el-
-Si, supongo que si, nos vemos luego, tengo que ir a clase.
-Nos vemos Eden... -Y comienza a caminar-
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Eden.
Ficção AdolescenteTodos me miran, ya sabes, las típicas miradas lascivas de gente que no sabe una mierda de mí, todos juzgan, ¿pero tú lo harías?, no sabes un carajo de quién soy, ni de donde vengo y mucho menos lo que e vivido, mi vida no es la más difícil, pero sin...