Fix You// SHINee

Golosinas ácidas: amargo comienzo, dulce final.

CAPITULO VI

Golosinas ácidas: amargo comienzo, dulce final

Minho me miraba sin decir nada, estaba extraño. Algo no iba bien.

El celular vibro en mi pantalón, lo tome y decía: llamada entrante de 911

Fruncí el seño confundida, eso era….

— es por la denuncia… —

— Contesta — dijo Minho seco y sin expresión.

Kibum tomó el celular y contesto.

— ¿Aló? — tenia la expresión de preocupación. Pero pronto se convirtió de espanto. Y colgó sin decir nada. Miró a Minho que solo bajó la mirada.

— ¿Qué sucede? — exigí saber, pero ninguno dijo nada, golpee a Kibum en el pecho para dijera algo, eso estaba enfureciéndome. Gire a ver a Minho y lo empuje. — Dime — chille.

— Tu… tus padres (Tn) — hablo Kibum, deje a Minho y mire a Kibum.

— ¿Qué paso con ellos? — dije calmada casi en susurros. Sus ojos estaban colorados y aspiró aire. Le lance otro golpe en el pecho. — ¡Dime! — grite.

— (Tn) cálmate — dijo Minho.

— ¡¿Cómo voy a calmarme si no quieren decirme que sucede con  mis padres?! — grité descontrolada, giré y corrí en dirección a la estación de policía.

—¡¡ (Tn)!! Espera — escuche a Minho. Pero no me detuve. Pronto sentí sus brazos rodear mi cintura y me elevo del suelo. — tranquilízate —

— sino vas a decírmelo, iré averiguar yo misma. — lo empuje y comencé a caminar.

— (Tn) espera… te lo diré yo, pero cálmate — algo no iba bien, Kibum no se veía nada bien. Trague saliva y lo mire atento.

— Tus padres… tuvieron un accidente — lo miré sin mover ningún musculo de mi cuerpo, no entendía lo que dijo, por un momento no hablábamos el mismo idioma. Escribí en mi rostro una expresión de: “¿están vivos?” y negó con la cabeza, desvió la mirada de mis ojos.

En mi cabeza solo había “tuvieron un accidente y no están vivos” sentí mis rodillas estrellándose con el suelo, de pronto nada tenía sentido. Las personas pasaban como si nada sucediera, pero podía oír mi corazón quebrantarse o tal vez pulverizarse. Podía oír mi nombre, incluso unas manos me sacudían, cerré los ojos, volví abrirlos, tratando de reaccionar. Pero pronto sentí el asfalto en mi rostro.

— Despierta… por favor — el aire entraba y salía de mí con calma, no quería abrir los ojos. De pronto lo sucedido golpeo mi mente y mi corazón comenzó  apretujarse, “aun tengo corazón” pensé.

Estallé en llanto, las lágrimas tibias mojaban mi rostro el lóbulo de mi oreja e incluso mi cuello.

— Cálmate… — era una voz femenina. Abrí los ojos, entonces noté que estaba en el hospital.

— Mis padres — dije ronca, me puse de pie y un terrible dolor en mi antebrazo me detuvo, estaba con sueros.

 — ¡¡¡ (TN)!!! — grito Minho y Kibum me detuvo. Tome la aguja y la estire la sangre comenzó a salir en cantidad hasta que la aguja decidió salir de mi vena y mi piel. Empuje a Kibum y salí corriendo. Al salir del hospital no sabía dónde estaba, pero quería llegar a la policía, quería saber donde estaban, quería verlos y constatarme que no era cierto lo que decían.

— ¡(Tn)! — escuche detrás de mí, no iba a volver a ese lugar, miré el suelo y  vi que la sangre goteaba de mi brazo. Volví a correr.

— No volveré ahí — le dije.