- ¡Karol! - mi madre movió mi silla - ¿qué haces sentada? Tienes que ayudar en la cocina. Dale, levántate.
Justo en la parte interesante del libro ¿En serio mamá? Me levanté y fuí hasta la cocina.
- Hola ¿en qué tengo que ayudar? - toqué el hombro de uno de los meseros para que volteara.
Se giró y me topé con los hermosos ojos del chico de hace unos minutos.
No te desmayes Karol.
¿Cómo es que se llamaba? Mich... Mac... Michael, eso, Michael.
- Tu madre me dijo que tienes que ayudarme a lavar los platos.
¿¡Ayudarme!? Karol ¿escuchaste eso?
¡Obvio que lo escuché! ¡Lavará los platos conmigo! Bueno, por algo se empieza ¿no?
- Ah, ¿o sea tú lavarás conmigo?
- Sí. - se puso un delantal y se fue al lavabo.Me puse un delantal y fuí casi corriendo hasta él. Cogí una esponja y empezé a fregar los platos. ¿Y ahora? ¿Qué le digo? ¿Cómo hago para conversar con él? Conciencia, siempre estás molestando y ahora no me das ideas ¿¡qué esperas!?
Es hora de que te las arregles tú.
- ¿Cómo te llamas? - preguntó sin mirarme.
- Karol. - respondí sorprendida.Que inteligente, hubieras empezado por ahí, Karol.
- Lindo nombre - y sonrió.
Que hermosa sonrisa, me desarmé cuando sonrió.
- ¿El tuyo? - pregunté, obviamente ya sabía cual era.
- Michael, Michael Ronda. Pero dime Mike.
- ¿Cuántos años tienes?
- 21 - respondió sin inmutarse. - ¿y tú?Sí que es mayor, creí que tendría mi edad. Y cuando le diga que tengo 18 creerá que soy una bebé.
- 19 - mentí nerviosa. - casi 20.¡Karol! ¿y qué harás cuando descubra la verdad?
Por ahora esta bien así, que piense que apenas me lleva casi un año.
- ¿Y qué haces: estudias o trabajas? - le pregunté mirándolo.
- Solo trabajo aquí. El trabajo no es lo mío, pero mamá me obligó a tomar este.
- Todo un bebé de mami - reí.
- Tanto como tú - también rió.Le alcancé un plato para que lo secara y lo recibió rozando nuestras manos. La piel se me erizó y él no hizo gesto alguno. Seguramente, Mike, ni se había dado cuenta de que me rozó.
- ¡¡Hola!! - se escuchó un grito escandaloso.
Esa voz, ya la conocía. Valen había llegado ¿qué hacía ella ahora? ¿no se suponía que llegaría más tarde? Mike sí giró rápidamente hacia el escandaloso grito.
- ¡Hermanita! ¿Qué haces con este guapetón? - le sonrió a Mike.
Como quisiera tener la actitud de Valen y poder decirle esas cosas a Michael. Que diferentes éramos, a pesar de ser hermanas. Solo ví como Mike sonrió mirando hacia abajo.
- Lavando platos - dije seca.
- ¿Y cómo te llamas? - se dirigió a Mike.
- ¡Necesito a meseros en el café! - gritó mi mamá desde la puerta - ven muchacho, te necesito. - señaló a Mike y él salió de la cocina.
- Que guapo... - dijo Valen y apoyó su mentón sobre su mano.Me quedé mirándola y me asusté. No quería que empezará a sentir cosas por él, no justo cuando a mí también me atraía. Ella era tan espontánea, atractiva, graciosa, cariñosa; era la chica perfecta para cualquiera. Y yo, pues soy el polo opuesto a Valen. ¿Quién no se enamoraría de Valen? Y si es que ella empieza a juntarse con Mike, es obvio que yo debería ser la que se aleje.

ESTÁS LEYENDO
Ella o Yo [Micharol]
Teen FictionUna cafetería familiar. Dos chicas. Un apuesto chico. Amor. Karol y Valentina, dos hermanas que se verán envueltas en un lío cuando se den cuenta que están enamoradas de un mismo chico. Una lo mantendrá en secreto y la otra hará lo posible porque el...