Memorias perdidas

CAPÍTULO 4: ¿Por qué lo haces?

Al terminar de comer dejó la bandeja plateada en la mesa y se dirigió al baño a asearse. Repasaba mentalmente lo sucedido hasta el momento, las "amistades" que tenía, las cosas que hacía, el daño que ocasionó al vender armas, sus batallas como Iron man, sus tantos errores y daños que ocasionó en otros para su propia conveniencia; siendo sincero con él mismo le alegraba no recordarlo, parecía una carga muy pesada y no se sentía culpable del todo porque nunca lo vivió, o al menos no lo recordaba. La amnesia tenía piadosos beneficios.

Salió del baño y se disponía a dormir cuando notó algo debajo de su cama.

"¿Y eso?", se agachó para sacar el objeto de su escondite y lo dejo sobre su cama. Era un maletín de metal negro, tenía forma rectangular con bordes puntiagudos y lados lisos.

"VIERNES, ¿de quién es esto?"

"[La agente Romanoff lo traía consigo]", informó la IA, "[Tal vez lo olvidó al salir.]"

"No lo creo...", descartó la idea de inmediato, no era posible que una espía con tal experiencia olvidara algo así, además de que los seguros no requerían llaves ni contraseñas.

Su curiosidad fue mayor que su prudencia y lo abrió sin pensarlo dos veces. En su interior solo había una pantalla mediana adherida a la tapa superior.

No quiso precipitarse en desmantelarlo, además que no tenía las herramientas necesarias para hacerlo, fue entonces cuando el monitor se encendió mostrando un fondo negro dividida por una línea horizontal color verde brillante en el centro.

"Buenas noches, Stark", una voz salía de los lados de la pantalla. La línea verde del monitor vibraba formando ondas de sonido al compás en aquella voz algo distorsionada.

"¿Quién eres?"

"Si recordaras sabrías quien soy; no te diré mi nombre así que solo considérame un fantasma de tu pasado"

Juzgando por su actitud prepotente no sacaría más información de él y tenía el presentimiento de que no era de fiar.

"¿Usaste a Romanoff para llegar a mí?"

"Algo así, tenía una deuda conmigo", su forma de hablar era fría y calculadora, se notaba que era una persona de poder y autoridad, "pero vayamos a lo importante: se te asignó una misión para recuperar unas bombas abandonadas por Hydra, ¿a qué área del estado las enviaron?"

"No lo sé y aunque lo supiera es información confidencial", no quería cooperar con él, era muy sospechoso. "Aunque conociendo tus influencias con espías como Romanoff no me sorprendería que ya sepas dónde están esas bombas y todo esto es solo una vana excusa para contactarme"

"No te ciegue por lo que te hayan dicho, Stark. Estas en más riesgo de lo que imaginas."

"¿Riesgo? ¿De qué estás hablando?", no entendía a lo que se refería ¿A qué peligros se exponía exactamente? ¿Quién amenazaba su vida?

"Hydra nunca desapareció, permaneció viva junto a los agentes de S.H.I.E.L.D. y entre los oficiales del gobierno apareció el enemigo que derrotó a los Vengadores. Siempre has estado rodeados de traidores Stark, no puedes confiar en todos a tu alrededor."

Sus palabras lo hirieron y más aún porque tenía razón, no podía ni debía confiar en nadie, estaba solo.

"Contactaré contigo cuando recuperes tu verdadera identidad, Anthony Stark", dicho esto la línea verde desapareció y la pantalla se apagó.

Le tomó unos minutos para componerse de tal advertencia. Cogió el maletín y volvió a examinarlo buscando si había alguna cámara aún funcionando. No podía dejar de pensar en aquel "riesgo" que esa persona le advirtió, ¿todo era por las bombas que recuperó? ¿Qué tiene eso que ver con su vida?