Suelo maldito

Junio de 2015

El río había desbordado por las fuertes lluvias. Las calles inundadas estaban llenas de toda la mugre que se había acumulado en las polvorientas aceras del pueblo.

El agua comenzó a burbujear. Se comenzó a dibujar una silueta. Un cuerpo inerte emergió de entre las profundidades.

Era un crío de unos 11 años. Tenía la cara llena de bultos,y su piel podrida se abría bajo el pómulo izquierdo, donde faltaba la mejilla.

Los cuervos comenzaron a bajar en círculos sobre el cadáver.
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-El forense dice que la mejilla se la comieron los cuervos que encontramos sobre su cadáver.

-Tío, fue horrible. Yo casi muero del miedo cuando aullaron al ver a los perros que llevábamos. ¡Joder,cuervos aullando! No vi nada igual desde el "accidente" del 68.

El jefe Grant puso gesto huraño.
-Olvida eso. Sea lo que sea, olvídalo. Acabamos con eso. -El jefe Grant se acercó a su ayudante, y dándole golpecitos con el dedo en el pecho,dijo:
-Ese lo que sea no va a volver.
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Jason Parker se ajustó la corbata frente al espejo.
Ya había acabado el funeral. Seguía pareciéndole oír la voz de su hijo. Aunque no sonaba como su hijo.
No han sido los cuervos.
Miró asustado a su reflejo.
He sido yo.
Jason golpeó el espejo con furia.
Te dije que volvería.
Golpeó una y otra vez,hasta que el espejo se astilló.
Y he vuelto.
El espejo explotó en mil pedazos, derribando a Jason. Una sombra se cernió sobre él. El ser extendió una mano, hasta tocar la frente de Jason. Este se desvaneció.
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Cuando despertó se encontraba en el piso de arriba. Era de noche. Las gotas de lluvia golpeteaban contra el tejado. Se levantó del suelo. Estaba frente a la habitación de su hijo. Empujó levemente la puerta. La única luz de la habitación era la que entraba por la ventana,que, al ser de noche, no era mucha. Entró silenciosamente. Palpo la pared hasta encontrar el interruptor de la luz. La luz se encendió. Lo cierto era que esas florituras en el papel de la pared siempre le habían parecido bastante siniestras,pero ahora le aterraban. En la mesita de noche había una maqueta de un avión a medio montar. Jason lo cogió. De repente las tres bombillas de la lámparas explotaron a la vez. Jason soltó el juguete, que se fue a hacer pedazos contra el suelo. La habitación estaba completamente a oscuras. Del armario comenzó a salir una luz verdosa. Jason se acercó. Su mano encontró el pomo del armario. Lo abrió lentamente. Al ver lo que había dentro, gritó como nunca en su vida había gritado. Dentro estaba el cadáver de su hijo, irradiando luz verde,con una mueca de terror horrible en la cara, la boca y los ojos anormalmente abiertos y la mejilla era un grotesco agujero sanguinolento a través del cual se veía el interior de la boca y cuya piel de los lados estaba verde y pútrida. Jason trastabilló y cayó, golpeándose la cabeza.
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Cuando volvió a despertar, estaba en el salón de su casa, todo era normal y su mujer le miraba extrañada.

-¿Cariño, estás bien?

-Olga,tenemos que mudarnos.