one-shots; nielwink.

« your eyes »

Los ojos de Jihoon tienen un brillo natural, un brillo único. 

Un destello que de inmediato llamó mi atención, uno que me hizo caer a los pies de aquel chico. 

Creí ver mi vida en ellos, creí verme junto a él, creí amarlo como nunca había amado a alguien en toda mi vida. 

Vi en ellos mi perdición, mi alma, mi vida, mi cielo y mi amor. Noté como todo aquello flotaba en ellos, como se perdía mi reflejo en aquel extraño pero precioso color. 

Un color que no se puede definir en una sola palabra, o al menos no para mi. Es un color único, uno que sólo ves en aquella persona que tanto adoras. 

Supe de inmediato al verlo que deseaba vivir junto a él, soñar junto a él, crear recuerdos con aquellos preciosos y especiales orbes. 

Los cuales eran tan preciosos como su mismísimo dueño, Park Jihoon. 

Oh Jihoon, ¿en qué momento lograste volverme tan jodidamente loco por ti? 

Sólo hablamos un par de veces, no compartíamos algo en especial. 

Pero mierda, teníamos que cruzar miradas cada vez que pasabas frente a mi, ¿verdad? Tenías que mantener contacto visual conmigo cada vez que hablábamos, ¿no es así? 

Pues, de esa forma lograste tenerme rendido a tus pies, lograste que estuviera en la palma de tu mano. 

No te entiendo Park, en serio eres tan perfecto que me tienes de esta forma.. Tú y aquel brillo en particular de tus hermosos iris. 

Te amo Park Jihoon, y eso lo sabes.

Lo sabes como nadie.

[ ღ ]

La primera vez que te vi sólo intenté observar aquella penetrante mirada sin soltar algún suspiro, cosa que se me hizo tan difícil como no caer enamorado ante ti en ese mismo instante. 

¿Quién te obligó a tener esa intensa mirada, Kang Daniel? Porque créeme que queda perfectamente en ti. 

Oh diablos, si tan sólo no hubiese mantenido contacto visual contigo la primera vez, estas extrañas sensaciones no estarían recorriendo mi cuerpo sin descanso.

¿Quién te dio permiso para causar esto en mi, Kang Daniel?

¿Quién te autorizó a enamorarme tan locamente de ti..?

No puedo creer que alguien como tú tenga ese resplandor tan único, en tu mirada tan especial.

¿Sabes cuándo adoro aún más esa mirada? 

Sí, cuando va dirigida únicamente a mi. Cuando me observas, cuando me analizas con esos oscuros y a la vez fulgentes orbes. Cuando me sonríes y estos desaparecen gracias a tus párpados.

Adoro cuando ambos nos perdemos en nuestras miradas, cuando el tiempo pasa extrañamente más lento de lo normal y sólo nos dedicamos a observarnos el uno al otro, donde sólo nos preocupamos de amarnos, a través de nuestras miradas.

¡Oh, y como no nombrar sobre todos los sentimientos que nos transmitimos gracias a estas!

Es mágico.. tanto que casi no puedo creerlo.

Te amo tanto, Kang Daniel. 

Tanto que llega a ser irreal para mi.