Capitulo 25

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EDITADO

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Siento un calor apoderarse de mi

Pero llegan dos sombras corriendo

– ¿Están bien? ¿No se lastimaron? – pregunta Alejandra preocupada

– estamos bien – dice Max incomodo

Me ayuda a levantarme

Me acomodo el vestido y camino hasta donde están las mantas y ya todos sentados

Me siento y a lado derecho se sienta Max y al izquierdo Mario

Lo que faltaba

Pienso en que debemos sacar los nombres de todos ya

– bueno chicos les quería decir que tenemos que sacar sus nombres para hacer las chaquetas que usaremos en cada trabajito ¿de acuerdo? Así que díganme – digo con una pequeña sonrisa

Todos dicen sus nombres y al final lo dice Max

– yo, el dragón del infierno – dice Max

Después de eso todos se levantan y salen corriendo hacia el mar y solo quedamos Alejandra y yo

– que vergüenza ¿ya viste que todos nos ven? – dice Alejandra sonrojada

Miro y si, hacen señales todos de que vayamos

– ¿sexys? – digo mirando a Alejandra con una sonrisita

– oh si – dice emocionada

– tu primero – le indico

Se quita el vestido dejando al descubierto su bikini blanco que se le ve muy bien realmente

Volteo para ver a los chicos y están un poco con la boca abierta y luego me miran esperando algo

– bien, es mi hora – digo riendo

Me subo lentamente el vestido por una pierna hasta que las dejo al descubierto y me lo termino de quitar moviendo mis caderas

Me acomodo el cabello, el bikini, me quito los huaraches y me pongo bloqueador

– te luciste ¿ya los viste? – dice divertida

Volteo y todos me miran con la boca abierta

Me rio un poco

– son unos pervertidos – digo riendo

– bien ¿vamos? – dice riendo

Asiento y caminamos hacia los chicos que nos miran y al llega cerca les digo

– ¿Qué? – les pregunto con una ceja alzada

– Nada – dicen todos mirando hacia otro lado

– bien – digo riendo

Me acerco a Max que me mira con una sonrisa pícara en sus labios

Cuando estoy suficiente cerca para abrazarlo le digo

– así que quieres continuar lo que dejamos ¿eh? – digo con una sonrisa picara

– claro que si ven aquí – dice sonriendo

– bueno – digo encogiéndome de hombros y pongo mis dos piernas a los lados de sus caderas y siento un pequeño bulto que hace que sonría burlona. – tan pronto se te pusiste mi guapo – digo riendo

ENAMORADA DE UN IMPOSIBLE (1/2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora