LIGHTSABER-Kaihun

Parte 3

"¿Se te permite amar? —Pregunto.—Creí que eso estaba prohibido." 

"El apego está prohibido, la posesión esta prohibida, la compasión, por contra, que para mí no sería sino el amor incondicional es primordial en la vida de un Jedi. Así que podría decirse que se nos alienta a amar."

...

 El primer pensamiento que tuvo fue sobre su peli rojo amigo quien sabia que se encontraba en la cafetería al momento de la explosión.

—¿Que sucede maestro?—Pregunto Jongin confundido y un tanto nervioso al ver a su maestro en estado de shock.

Y lo que ocurría era que Sehun había sentido una fuerza oscura en el lugar, algo demasiado maligno se paseaba por las instalaciones, era algo con sed de sangre y venganza. De inmediato trago saliva por su garganta al sentir que esta se secaba, sintió algo extraño en el aire y fue cuando pudo salir de si.

—Nos están atacando.—Dijo para finalmente correr de regreso a la cafetería.

—¿Quienes?—Pregunto Jongin .

—El imperio.—Miró sobre su hombro para ver si Jongin lo seguía, y efectivamente el Padawan lo hacia. Sus miradas se encontraron por una milésima de segundo pero fue suficiente para que el mayor sintiera algo en su interior, un calor bastante agradable , una paz que nunca  antes había sentido y la confianza que necesitaba para poder enfrentar aquella presencia maligna.

Una vez que llegaron a la cafetería pararon en seco al escuchar el sonido de un sable de luz y varios disparos de blasters (Armas que comúnmente llevan los soldados de asalto enemigos.)

—Ve por ese lado.—Señalo Sehun la puerta trasera de la cafetería, la cual conectaba a la cocina del lugar. 

—Pero maestro...—Lo miro confundido ya que el creía que el hombre lo acompañaría, pero tal parecía que el iría  a otro lado, eso de alguna forma le preocupo.—¿A donde ira?

—Estarás bien, Baekhyun esta adentro.—Dijo mientras lo miraba a los ojos, sin poderlo evitar paso su mano sobre la mejilla de su Padawan.—Que la fuerza te acompañe Jongin.—Le dedico una sonrisa que provoco que el corazón del moreno latiera de una forma incontrolable.

Cuando Sehun estaba a punto de darse la vuelta y seguir su camino en busca de aquel maligno ser , unas manos lo tomaron del cuello de su gabardina y lo atrajeron hasta Jongin. Sehun estaba a punto de preguntarle el porque de su actitud, pero no pudo hacerlo ya que se vio apresado por los labios del menor.

Sehun sabia que aquel beso era bastante inocente ya que era apenas un roce de labios, quiso reír al momento en que vio a Jongin cerrar los ojos con fuerza, ya que se veía demasiado lindo e inocente, cuando en realidad no era así.

—Te mostrare como lo hacemos los adultos.—Dijo Sehun para finalmente colocar sus manos sobre la ancha espalda de su Padawan, y de inmediato colar su lengua por los labios del menor, su beso era tan suave y lindo que lo estaba volviendo completamente loco. Las manos de Jongin eran bastante torpes y nerviosas, acariciaban su espalda y su cintura como si temiera que se fuera a romper, Sehun jamas había sido tocado de aquella forma tan suave y cálida que lo único que le hacia sentir era estar en las nubes.

Se separaron el uno del otro gracias a la falta de aire en sus pulmones, ambos se miraron a los ojos mientras sus respiraciones agitadas se hacían evidentes dando a entender cuanto habían disfrutado del beso. Un leve sonrojo se apodero de las mejillas de Jongin, el mas joven seguía bastante sorprendido por lo que acababa de ocurrir, no le importaba absolutamente nada en ese momento, ni que los estuvieran atacando, ya que solo mantenía sus ojos y su atención en Sehun.