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Los días para Jimin se pasaban realmente rápidos, siempre llevaba la misma rutina. Levantarse, ducharse, comer, ver televisión hasta cansarse y dormir.

La misma rutina de siempre lo estaba aburriendo, y más cuando sólo estaba en esa silla de ruedas.

Cuanto deseaba poder salir y divertirse en parques de diversiones.





[...]





-- Jimin, irás mañana a la escuela -- su madre había entrado a su habitación abriendo la puerta de un golpe.

-- ¿Q-qué?  -- murmuró después de asimilar lo que dijo su madre, ¿escuela? .

-- A la Universidad -- entró por completo a la habitación tomando ropa sucia que se encontraba en una silla -- A presentar el examen para ingresar a ella.

Jimin abrió sus ojos como platos, ¡acababa de salir del hospital hace unas semanas!

-- ... ¿Universidad? --

-- Siempre quisiste estudiar medicina -- la peli negra lo miró -- es tu oportunidad para entrar a esa costosa Universidad.

-- P-pero... -- Yerin lo interrumpió yendo hacia la puerta.

-- Pero nada... -- antes de salir miró por ultima vez al peli negro sentado en la cama. -- YoonGi también va a esa Universidad, es bueno que se vuelvan a ver. -- salió de aquella habitación dejando a Jimin desconcertado.

-- ¿YoonGi? -- hizo una mueca al pronunciar aquél nombre, no sabía por qué... pero ese nombre le causaba escalofríos -- Supongo que le tengo cariño -- susurró con una pequeña sonrisa.

Cariño... sí, claro.





[...]





A la mañana siguiente Jimin hizo lo mismo que hacía todas las mañanas, sólo que esa vez se preparó para ir a la universidad, prácticamente su madre lo había obligado a ir.

-- ¡Te ves realmente bien! Has crecido tanto... -- Yerin sonrió al ver a Jimin salir de su habitación en la silla de ruedas.

-- Todavía me cuesta manejar esta cosa... -- habló refiriéndose a la silla de ruedas -- pero realmente ayuda que mi habitación esté abajo.

-- Compré esta casa junto con tu padre... -- su sonrisa se fue desvaneciendo.

-- Madre, mi padre... --

-- ¡Dios! Se nos hará tarde -- Yerin se posó atrás de la silla de ruedas ayudando a Jimin a salir de la casa.

Algo pasaba con su padre.

Al llegar a la universidad rápidamente las miradas de todos los estudiantes se posaron en Jimin, algunos susurraban cosas entre ellos mientras que otros reían intentando ocultar su risa.

-- Eh... -- Yerin se apresuró y lo llevó hasta dentro de la universidad.

-- No les hagas caso. -- Jimin asintió ante lo dicho por su madre, simplemente miró todo a su alrededor mirando los pasillos de aquella Universidad.

-- ¡Señora Park! -- Jimin elevó su mirada encontrándose con el rubio que fue a su casa en la "fiesta de Bienvenida"

Aquél extraño joven se acercó hasta Jimin y le sonrió.

Su sonrisa era forzada.

-- Jimin, es bueno que estés aquí. -- revolvió los cabellos del menor haciendo que éste se sonrojara.

-- ... -- Yerin rió ante la reacción de su hijo y miró a YoonGi.

-- Cuidalo... no me vuelvas a decepcionar -- murmuró la peli negra, YoonGi sólo asintió.

-- Jimin está en buenas manos, cuente conmigo. --

Yerin se fue después de ir con el director y dejar algunos papeles, todavía faltaba para que el examen empezara así que YoonGi decidió ir al patio de la gran Universidad junto con Jimin.

-- YoonGi... ¿tú y yo éramos buenos amigos? -- al llegar al patio Jimin detuvo la silla de ruedas en el pasto mirando hacia YoonGi, era demasiado alto.

-- Lo éramos... siempre te protegía de todos, eras una niñita -- rió YoonGi, Jimin sonrió levemente bajando la mirada.

-- Supongo que era inocente... -- susurró Jimin.

-- Lo sigues siendo, pequeño Jimin. --

El peli negro volvió a sentir ese escalofrío.

Sólo necesitaba recordar todo lo pasado y poder vivir en paz el presente.

YoonGi se veía que era buena gente... después de todo es su mejor amigo, ¿no...?






No te alejes ● YoonMin | Adaptación ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora