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Maratón 12/12

¿Están listos para el final? (ㆁᴗㆁ✿)
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La llegada de NamJoon a su hogar sorprendió a Yerin de una manera impresionante, la mujer gritó espantada al ver el cuerpo de su pequeño hijo con una grave herida en el abdomen y su pálido rostro dándole a entender que estaba al borde de la muerte.

— ¡Jimin! — gritaba la desesperada mujer mirando como su esposo llevaba a su hijo hasta su habitación. — ¿Qué ha pasado, NamJoon? ¡Dijiste que él estaría bien! — el nombrado ignoró a Yerin mientras recostaba a Jimin en la cama y buscaba desesperado el botiquín.

— La sangre sigue saliendo sin control, necesitamos pararla. — decía NamJoon cuando por fin logró encontrar aquél pequeño botiquín con alcohol, gasas y cosas varias para primeros auxilios. — Tengo capsulas de cicatrización guardadas aquí, hará todo más fácil cuando despierte — con la ayuda de Yerin logró curar la herida y parar la sangre, Jimin seguía totalmente inconsciente.

—NamJoon... — susurró Yerin al terminar con la herida de Jimin, el rostro del mayor se dirigió hacia la mujer mirándolo sin expresión alguna. — Puedo sentir tu sentimiento de culpa desde aquí. — el peli negro desvió la mirada hacia su hijo y negó levemente.

— No es culpa. Es asco — corrigió tapando un poco el cuerpo de Jimin con las sábanas de la misma cama. — Jackson me traicionó y me hizo creer que era por el bien de Jimin. Así él no saldría lastimado.

— Entiendo tus sentimientos, pero nuestro hijo salió lastimado después de todo... aquella doble personalidad que YoonGi guarda no es problema de Jimin, que Jimin sea el detonante de eso no lo lleva a merecer el sufrimiento. — murmuró Yerin acariciando los azabaches cabellos del más bajo, sus ojeras resultaban en su pálido rostro. — Es hora de proteger a nuestro pequeño.

— Lo protegeré, tú sólo observa. —

Las horas pasaron junto con la preocupación de Yerin y NamJoon que iba en aumento.

Jimin no despertaba y eso estaba empezando a ser un problema.

— ¡YoonGi! —un gritó de Jimin hizo que NamJoon y Yerin corrieran apresurados hacia la habitación del menor, éste se encontraba temblando y con múltiples lágrimas bajando por su cansado rostro.

— Jimin. — habló NamJoon aliviado al ver a su hijo despierto.

Jimin lo miró y su mirada mostró terror, su respiración se empezó a agitar mientras trataba de alejarse de la cercanía que tenía su padre con él.

— ¡No me hagas nada! — gritó el peli negro llevando su mano hasta la herida en su abdomen y mostrar una mueca llena de dolor. — Sólo quiero ver a YoonGi, déjanos en paz.

— Jimin, tu padre no te hará nada — habló Yerin acercándose a su hijo, se veía tenso y realmente asustado.

— Él ya no es mi padre. —

Golpe bajo para NamJoon.

— Hijo, no digas eso — Yerin se sentó en la cama mirando fijamente los oscuros ojos de Jimin. — Tu padre... sólo fue una víctima más de todo. — soltó un suspiro pesado mirando a NamJoon, éste permanecía parado sin decir ni una sola palabra.

Se sentía totalmente lastimado.

— Es verdad lo que dice tu madre. — se animó a hablar NamJoon acercando su cuerpo hasta la cama de la habitación. — pensé que haciendo todo lo que me decía Jackson, tú podías salir bien de todo... al final me llenó la mente de cosas malvadas y llegué al extemo de lastimarte. — suspiró sentándose en la cama al otro lado de en donde se encontraba Yerin.

No te alejes ● YoonMin | Adaptación ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora