Capitulo final

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Becca miraba preocupada a su amiga, mientras esta corría despavorida al baño. Esperó unos minutos a por ella.

-Si no te conociera diría que estuvieras embarazada, pero... tu organismo es medio raro que cuando estas triste empiezas a vomitar y a desmallarte.- Rachel sonrió solo un poco por el comentario de la chica – Si sabes cómo te pones, le hubieras dicho a Louis que te lleve contigo.

-¿Crees que no le propuse? – La castaña recordó rápidamente la discusión con su esposo la noche anterior – Me lo negó, me dio a entender que no era un buen ambiente para mí.

-Bueno, devolver la comida que acabas de comer hacer 5 minutos tampoco es un "buen ambiente para ti"

Rachel no respondió nada, discutir con su mejor amiga era un caso perdido. La noche anterior sintió un vacío profundo en su cama. Las esperanzas de que Louis venga a altas horas de la noche y la abrace mientras duerma, eran nulas. Louis no estaba en palacio. Estaba sola por los próximos días.

-¿Rachel? ¿Acaso me estas escuchando?

-No, disculpa – volteo a mirarla tras haberse enjuagado y lavado sus dientes.

-Te decía querida Julieta – le tomo la mano al instante en que se reposo en la cama con ella- que mientras tu Romeo esta que debate con algunos políticos. Yo podría quedarme contigo, dormir juntas, salir, comprar. Tú sabes... así como los viejos tiempos.

A Rachel se le ilumino el rostro. Siempre estaba Becca para salvarla de sus tristezas.

-Bec, eso no se pregunta - sonrió con lágrimas en los ojos

-No. No. No. No llores pequeña – abrazo fuertemente a Rachel – La amiga Becca siempre estará para ti en los buenos y malos momentos contigo.

-Becca... Louis no me ha llamado

- Tranquila Rei. Tú sabes, tu esposo no tiene una vida tan normal que digamos. Te aseguro que mientras estamos tú y yo hablando, Louis debe de estar desesperado para que lo dejen en paz y así llamarte.

-¿Crees?

- Sí en definitiva. Además recuerda que hay diferencias de horarios.

-Sí eso será – sonrió un poco optimista

El día había pasado veloz. Rachel pudo despejar su mente por las ocurrencias de segundo a segundo que su amiga decía.

La mañana siguiente, se despertó un poco... mejor. Supuso que Becca se había levantado un poco temprano, puesto a que no la veía a su lado. Por la ventana se podía ver algunos rayos de sol, el día estaba muy lindo. No sabía nada de Louis, pero confiaba en el y que si Liam sabía algo de su esposo al instante se lo diría.

Tomo una ducha rápida para así bajar al comedor y hablar lo más antes posible con Liam sobre su marido. La sonrisa de Rachel iluminaba cada pasillo del palacio. Sin embargo, cuando paso por el gran salón se encontró a todos – incluyendo a Becca – mirándolos expectantes.

-Buenos días rey, reina. Buenos días a todos. ¿Acaso el desayuno fue más temprano?

-Quiso hacer contacto visual con Becca, pero esta le negaba. Miro a su alrededor, nadie le respondió. Oh. Johannah estaba tenia lágrimas en sus ojos, mientras que Mark respiraba profundamente.

-¿H-Ha pasado algo?

Liam se le acerco sosteniendo firmemente su mirada con la castaña

-Princesa... su esposo.

-¿Qué ha pasado con Louis, Liam? – Rachel elimino toda formalidad de sus palabras

-El príncipe Louis – Rachel sentía que su corazón latía más rápido por cada segundo. Vi a Liam suspirar y cerrar los ojos. Murmuro algo inatendible y la miro a sus ojos

-El rey Louis ha tenido un accidente en el vuelo. El avión ha explotado y su cuerpo es no hallado.

Rachel sintió como su estabilidad se desmoronaba.



Mañana el epílogo 💖

shh... soy tu dueño |L.T|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora